Mostrando entradas con la etiqueta Patagonia. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Patagonia. Mostrar todas las entradas

Patagonia aborda la gestión de envases de agroquímicos

 


Autoridades de la Patagonia debatieron sobre la gestión de envases de agroquímicos

Fecha de Publicación
: 21/09/2023
Fuente: Letra P
Provincia/Región: Patagonia


Representantes de las carteras de Ambiente y Producción de Río Negro y Neuquén debatieron cómo manejar mejor los residuos agroindustriales.
La Asociación Civil CampoLimpio organizó en Río Negro su segunda Mesa de Sustentabilidad de la Patagonia, donde interactúan actores públicos y privados que participan de la cadena de tratamiento de residuos agroindustriales, en especial de los envases vacíos de fitosanitarios.
Con el objetivo de llevar adelante un proceso de complementación y cooperación en el que se pongan en común dificultades, intereses, líneas de trabajo y abordajes de la gestión de envases en particular y la producción sustentable en general. Convocaron a autoridades nacionales, provinciales y locales, sociedades de productores, recicladoras, universidades y otros actores.
Participaron la intendenta de General Roca, María Emilia Soria y otras autoridades de Río Negro y Neuquén. Entre ellas, Judith Jimenez, subsecretaria de Control y Fiscalización de Río Negro, y el director provincial de Producción Agraria de Neuquén, Lucio Illescas; representantes regionales de SENASA e INTA, y productores de la región. Los presentes se turnaron para tomar la palabra y plantear avances y desafíos en materia de mejoras ambientales y productivas para la región.
La intendenta de General Roca celebró el espacio y el trabajo articulado junto a los ministerios de Neuquén y Río Negro y las distintas órbitas estatales, a la vez que resaltó la labor codo a codo no sólo por el medioambiente sino por la producción. “Me parece que éste es el ámbito adecuado”, subrayó Soria.
Asimismo, la intendenta resaltó la reciente entrada en operaciones del Centro de Almacenamiento Transitorio en la localidad, y que desde entonces "se nota la presencia de CampoLimpio en la ciudad, dicho de boca de los productores" y remarcó la tranquilidad que le da a la Dirección de Medioambiente del municipio "que se esté trabajando de esta manera, mucho mejor y más responsable".
Por su parte, el gerente de Relaciones Institucionales de CampoLimpio, Juan Manuel Medina, destacó que el objetivo de estos encuentros tiene que ver con una mirada regional para el abordaje de las problemáticas que visualizamos desde la Asociación, sin dejar de lado que “no queremos que estos espacios de debate estén sujetos exclusivamente a la gestión de envases vacíos de fitosanitarios, sino extenderlo a las problemáticas ambientales en general desde la institucionalidad, y así desde CampoLimpio oficiar como enlace para que nos podamos encontrar y poder seguir pensando y planificando en términos ambientes y de producción”.
La delegación de la Secretaría de Ambiente y Cambio Climático de Río Negro mencionó que, si bien desde 2017 la provincia trabaja en la gestión responsable de recipientes de agroquímicos a través de la realización de campañas de recepción, a partir de la aprobación del plan de gestión de CampoLimpio tomó relevancia la agilización del sistema, el control y la concientización, ya que año tras año se incrementó el compromiso de los productores.
En el caso de Neuquén, la Dirección Provincial de Producción Agraria presente mencionó la creación de políticas de incentivos en la materia como el Premio Estímulo para productores que llevan adelante estrategias vinculadas a la implementación de BPAs. Dentro de estos requisitos, se encuentra la obligatoriedad de mostrar el certificado ambiental de devolución de envases que entrega CampoLimpio.
Durante la jornada surgieron diversas reflexiones en torno a problemáticas regionales para la producción sustentable como el cuidado del agua y la protección del ecosistema. También se reforzó la importancia de la generación de alianzas e iniciativas para promover la sensibilización y conciencia ambiental.
Después de la Mesa Sustentabilidad se realizó la Jornada de actualización técnica y de normativa aplicable, donde CampoLimpio y GlogalG.A.P llevaron adelante una capacitación para técnicos, ingenieros agrónomos, productores e integrantes de empresas certificadoras. Allí se discutieron puntos sobre la Nueva Ley de Agroquímicos N° 5600/22 de la Provincia de Río Negro, las incorporaciones de exigencias ambientales de la Versión 6/GLOBALG.A.P. y el manejo responsable de envases vacíos de fitosanitarios. Formaron parte autoridades de la provincia de Río Negro, Alejandra Pistagnesi de GLOBALGAP y referentes de CampoLimpio y Casafe.
.


La migración de guanacos se reduce cada vez más

 


¿Por qué la migración de guanacos a la Argentina es cada vez menor?

Fecha de Publicación
: 05/07/2023
Fuente: Perfil
Provincia/Región: Patagonia


Si bien históricamente las migraciones de estos animales han sido notables en la región de la Patagonia argentina, hoy el panorama es muy diferente y preocupante a la vez. ¿A qué se debe y cómo evitar este fenómeno?
Las migraciones de animales son mucho más que meras movilizaciones colectivas definidas no por las distancias sino por las necesidades que las impulsan, sino que son viajes asombrosos que tienen lugar en diferentes partes del mundo cuando enormes grupos de animales se desplazan de un lugar hacia otro en masa, ya sea en busca de nuevos hábitats, alimentos o para reproducirse y, así, asegurar el futuro de la especie.
Precisamente, uno de los animales que más ha migrado en Sudamérica es el guanaco, quien lo ha hecho en busca de recursos alimenticios y refugio como consecuencia de los cambios estacionales y de las variaciones en la disponibilidad de agua y pastos, como así también, de la cada vez mayor presión y voracidad de sus depredadores y de otros factores ambientales.
Si bien históricamente las migraciones de guanacos han sido especialmente notables en la región de la Patagonia, tanto en el sur de Argentina como de Chile -donde han tenido una gran importancia cultural para las poblaciones indígenas de la región que han seguido durante siglos sus rutas migratorias, cazándolos para obtener carne y utilizar su fibra para la confección de ropa y de otros productos-, en las últimas décadas las migraciones de guanacos se han visto cada vez más afectadas por la expansión de la actividad humana moderna, incluyendo la agricultura, la ganadería y la urbanización. Todos estos factores han alterado los patrones de migración de los guanacos, provocando una marcada disminución de su población en muchas regiones, entre ellas en la Argentina.
Frente a esa preocupante realidad, Fundación Rewilding Argentina y Freyja Foundation están llevando adelante el monitoreo de 25 ejemplares. a los que se les colocó collares con GPS, con el objetivo central de proteger sus rutas migratorias, y, así, contribuir a un ecosistema completo y funcional en la estepa del Parque Patagonia Argentina y sus alrededores.  
“Existen muchos esfuerzos de conservación para proteger a los guanacos y sus movimientos milenarios, como la creación de reservas naturales y de áreas protegidas y la implementación de medidas para reducir los conflictos con las actividades humanas”, explican desde FRA.
“Estas iniciativas buscan preservar, no solo a los guanacos sino, también, a los ecosistemas en los que habitan y a las tradiciones culturales asociadas a su valiosa presencia”, concluyen los especialistas.
.

El guanaco para frenar la desertificación en la Patagonia

 


El guanaco es una "oportunidad única" para disminuir los procesos de desertificación en la Patagonia

Fecha de Publicación
: 17/04/2023
Fuente: El Chubut
Provincia/Región: Patagonia


Cientos de años de producción ovina en un ambiente árido y frágil, sumada a las malas prácticas de manejo y la introducción de enormes cantidades de ganado ovino, llevaron a que se desertificara y a que se perdieran pasturas y se degradaran los suelos, expresaron desde el Conicet.
El guanaco ofrece una "oportunidad única" al ambiente para disminuir los procesos de desertificación de las tierras áridas en la Patagonia ocasionados por el impacto de "cientos de años de producción ovina en un ambiente frágil", que llevó a la pérdida de pasturas y degradación de los suelos, además de una alternativa económica para productores locales, según Gabriela Lichtenstein, investigadora del Conicet.
El guanaco es una especie protegida y silvestre sudamericana que se distribuye desde Perú a Tierra del Fuego, donde Argentina alberga el 95% de la población mundial de ese camélido, que supo ser clave para los primeros pobladores que habitaron la Patagonia pero que pasó a ser considerada una "plaga" luego de la introducción del ganado ovino.
"Es un herbívoro nativo, esto quiere decir que su presencia en la región es el resultado de procesos naturales sin intervención humana y que posee rasgos evolutivos que resultaron en perfectas adaptaciones al ambiente", explicó a Gabriela Lichtenstein.
Este camélido era "fundamental" para los grupos cazadores recolectores que habitaban Patagonia desde hace más de 10.000 años porque era su fuente de alimentación y abrigo y les facilitaba, entre otras cosas, la materia prima para la elaboración de elementos como tientos y lazos.
Además, la vida sociocultural de los pueblos estaba basada en este animal, en donde en ocasiones seguían migraciones de guanacos entre la costa y la cordillera.
Durante la Campaña del Desierto (1878-1890), conocida por el genocidio a los pueblos originarios, se avanzó con las fronteras del país y "ganar tierras", que luego se utilizaron para introducir ovejas, animal que no era nativo de esa zona.
"Ahí cambia la lógica de uso del ambiente. Se divide el territorio, se construyen estancias, se instalan cercos, alambrados, se introducen millones de ovejas, y los guanacos pasan a ser percibidos como "competencia" de las ovejas porque la producción pasa a ser principalmente ovina", comentó Lichtenstein.
Y agregó que, "cientos de años de producción ovina en un ambiente árido y frágil, sumada a las malas prácticas de manejo y la introducción de enormes cantidades de ganado ovino, llevaron a que se desertificara y a que se perdieran pasturas y se degradaran los suelos".
El guanaco pasó a ser percibido como si fuera "el responsable de competir con la oveja y de la degradación de las pasturas y suelos", pero el problema central para la investigadora es la visión extractivista con la que se encaró la producción ovina en Patagonia, lo que llevó a la consideración del guanaco como una "especie plaga".
"Una especie nativa nunca puede ser una plaga. Para nosotros, investigadores del Conicet e integrantes del Grupo de Especialistas en Camélidos Sudamericanos de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), el guanaco es una oportunidad fantástica porque, junto con las vicuñas, tienen las fibras más finas del mundo", indicó.
En Argentina, investigadores del Conicet desarrollaron metodologías de captura y esquila bajo altos estándares de Bienestar Animal, en donde la cosecha de fibra se realiza mediante arreos a caballo hacia una estructura de captura en forma de embudo -aproximadamente de tres kilómetros de largo de cada lado-, donde los guanacos son dirigidos hacia un galpón de esquila.
La idea, según Lichtenstein, es que haya una "coexistencia entre las dos especies" y un uso sustentable del animal, sin embargo, la explotación de este animal nativo no es tan sencilla ya que los productores ovinos están acostumbrados a trabajar con ovejas, mientras que hacer un arreo de guanacos precisa de cierta inversión e infraestructura específicas.
"Es meterse en algo nuevo que puede ser riesgoso. Capturar guanacos no es tan fácil. Al comenzar la actividad hay incertidumbre sobre cuántos se van a capturar. Por otro lado, implica a los productores abrirse a nuevos mercados con distintas exigencias al de la lana ovina", manifestó.
En ese sentido, la cría de ovejas resulta ser un proceso más estandarizado, en donde los productores tienen conocimiento de la cantidad específica de animales que se encuentran en un corral y cuántas pueden llegar a esquilar.
A pesar de esto, la especialista insistió en que estamos ante una "oportunidad única para el ambiente" porque los guanacos juegan "un rol muy importante en disminuir los procesos de desertificación de los sistemas áridos" presentes en la Patagonia.
Los guanacos se denominan "pastoreadores de bajo impacto" y, a diferencia de las ovejas que "pisotean" el suelo, estos camélidos tienen almohadillas en las patas que hacen que el impacto sobre el suelo y la vegetación no sea tan grande, además, cuando se alimentan las ovejas "arrancan" la vegetación en vez de "cortarla" como hacen los guanacos.
"Son más eficientes que las ovejas a la hora de alimentarse porque digieren mejor los pastos secos, reciclan mejor el nitrógeno y por lo tanto consumen menos alimentos, fundamental durante épocas de sequía", agregó.
Además, debido al desgaste en los suelos en vastos territorios hay cada vez más terrenos abandonados, explicó Lichtenstein, sumado a la escasa presencia de pumas, una especie amenazada por la actividad humana y el principal depredador del guanaco, lo que provoca que haya un aumento en la población de este camélido en la zona.
La situación poblacional del guanaco es muy distinta en las provincias, advirtió la investigadora, y si bien en la actualidad es una especie que se extinguió en muchas regiones con respecto a su área de distribución original, aún continúa siendo abundante en lugares de Patagonia y cordillera.
En ese sentido, Lichtenstein instó a rever el Plan Nacional de Manejo de Guanaco, actualizado en el 2019, para revisar las prácticas de comercialización de fibra de guanaco en donde aseguró que "la venta de fibra de animal muerto atenta contra todos nuestros esfuerzos y la posibilidad de reducir la desertificación en nuestras tierras áridas".
Estos animales pueden ser una alternativa económica para productores locales porque "su fibra tiene un valor superior a la lana ovina".
En un Congreso sobre Conflictos y Coexistencia entre personas y vida silvestre realizado la semana pasada en la ciudad de Oxford, la investigadora presentó su charla plenaria respecto a la relación entre personas y guanacos y la utilización sustentable para la conservación de la especie.
"En el mundo de la moda se tiende cada vez más al 'lujo sustentable' y el guanaco es parte de ese lujo con una fibra de altísima calidad textil que cuenta una historia de antigua coexistencia, conservación, generación de fuentes de empleo locales y cuidado del medio ambiente", manifestó.
"Si te interesa cuidar a los guanacos porque te dan fibra, también cuidas hábitats enormes y sumamente frágiles. Por otro lado, generan valor agregado y fuentes de empleo en comunidades locales. Son proyectos que tienen muchas cosas buenas que están muy buscados en el mundo internacional", concluyó.
.

La Patagonia es la más afectada por mamíferos introducidos

 


Patagonia es la región con más mamíferos introducidos que se volvieron invasores

Fecha de Publicación
: 21/03/2023
Fuente: Diario Río Negro
Provincia/Región: Patagonia


La Sociedad Argentina para el Estudio de los mamíferos publicó el primer libro sobre el problema ambiental. La publicación se baja gratis desde la web.
Patagonia es la ecorregión de la Argentina que ha sido más invadida por los mamíferos introducidos. A nivel provincial, Tierra del Fuego es la jurisdicción que mayor número de especies presenta: 18 en total. Así lo advierte el nuevo libro Mamífero introducidos invasores de Argentina, que se descarga gratis.
Fue publicado por la Sociedad Argentina para el Estudio de los Mamíferos. Los editores fueron Alejandro Valenzuela, Christopher Anderson, Sebastián Ballari, que trabaja en el Parque Nacional “Nahuel Huapi”, y Ricardo Ojeda, del Instituto Argentino de Investigaciones de Zonas Áridas en Mendoza, quienes coordinaron un equipo de 49 autores.
Los mamíferos introducidos invasores son una de las principales causas de pérdida de biodiversidad y de cambio ambiental, tanto a nivel local como global. Son animales que fueron transportados intencionalmente por el ser humano, o involuntariamente por alguna de sus acciones. No solamente producen impactos negativos en las especies nativas y en los procesos ecosistémicos, sino también en la economía, la salud y en otras dimensiones sociales.
“En la Argentina existen 23 especies de mamíferos introducidos invasores que generan distintos impactos nocivos, pero que también poseen una diversidad de valores, percepciones y usos por parte de distintos actores sociales que pueden generar conflictos relacionados con su manejo”, afirmó Alejandro Valenzuela, investigador del Conicet y la Universidad Nacional de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur (UNDTF).
Jabalíes, visones, castores, ciervos, búfalos e incluso perros y gatos son algunos ejemplos de mamíferos que se trajeron a la Argentina con diferentes fines, según se aclaró en el libro que se puede descargar desde la web (https://www.sarem.org.ar/libros/). La caza ha sido identificada como el principal motivo para la introducción de mamíferos que luego se transformaron en invasores.
Otro fue el uso peletero de las especies. También están los animales domésticos que se transforman en silvestres invasores como los perros, los gatos, las vacas, los caballos, los burros, las cabras y los chanchos, que en estado silvestre se los llama jabalíes.  “Otro caso es la ardilla, que se introdujo como mascota por una cuestión estética, y finalmente tenés los que se introdujeron por accidente, como ‘polizones’ en barcos, por ejemplo. En ese grupo están la rata negra, la rata marrón y el ratón de campo o laucha doméstica”, explicó Valenzuela.
.

Estudian el derretimiento acelerado de mantos de nieve

 


Patagonia: investigan con imágenes satelitales el derretimiento acelerado de mantos de nieve

Fecha de Publicación
: 28/11/2022
Fuente: Telam
Provincia/Región: Patagonia


La Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae) del Conicet y de Parques Nacionales buscan generar información sobre el derretimiento acelerado de nieve, por carbono negro.
Investigadores de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae), del Conicet y de Parques Nacionales buscan generar información mediante el procesamiento de imágenes satelitales sobre el derretimiento acelerado de campos de nieve, en especial por carbono negro.
Para ello los científicos combinan muestreos en la Patagonia, análisis de laboratorio, información de los satélites Saocom y Sentinel, y un radiómetro.
El tránsito vehicular y la actividad industrial, provoca un derretimiento acelerado de la nieve y puede impactar sobre los cursos de agua a partir de la primavera, cuando comienza a aumentar la temperatura.
Giuliana Beltramone, becaria doctoral del Conicet en el Instituto Gulich de la Conae dijo a Télam que "elegimos concentrarnos en la nieve de no menos de dos meses y no más de un año porque es la que puede tener incidencias en avalanchas o en los deshielos que entre otras cosas condicionan el suministro de agua”.
La investigadora indicó que “el carbono negro y otras impurezas cuando se posan en la superficie de la nieve, le quita capacidad de reflejar la luz acelerando su derretimiento; por lo que detectar estas partículas es una señal certera de que esa nieve va a tardar menos tiempo en convertirse en agua”.
La científica detalló que, además del carbono negro, existen otros contaminantes que afectan a la nieve como las quemas de bosque nativo, las cenizas de erupciones volcánicas, el polvo, o incluso algas que pueden llegar en patas de animales o botas de visitantes.
Beltramone destacó que si bien se pueden identificar estas partículas "es más difícil evaluar la magnitud de su presencia porque para eso habría que diseñar una misión satelital específica".
Precisó que en el caso de las algas, el polvo o las cenizas volcánicas "son impurezas que siempre estuvieron ahí, pero el carbono negro o el carbono marrón tienen mucho que ver con la acción del hombre, por eso elegimos tomar muestras por un lado en mantos de nieve cercanos a Bariloche y en el Parque Nacional ‘Los Alerces’.
Este tipo de contaminación puede afectar la provisión de agua en las poblaciones y desestabilizar las laderas de las montañas, provocando avalanchas o inundaciones; además, tiene severas implicancias en el cambio climático y en el calentamiento global, lo cual repercute en los servicios ecosistémicos relacionados a la criósfera (áreas terrestres y marinas donde existe nieve o hielo) y sobre aspectos socio-económicos.
“El objetivo final es desarrollar un instrumento satelital para monitorear el oscurecimiento de las nieves a nivel global, capaz de detectar la presencia de contaminantes que absorben la luz y de discriminar las partículas del carbono negro de otras como el carbono marrón (generado por la quema de biomasa), cenizas volcánicas, polvo y algas, que pueden provocar un efecto similar”, sostuvo Beltramone.
La campaña actual sumó el desafío de subir a los cerros con el radiómetro, que pesa unos 15 kilos e incluye una computadora y baterías adicionales, en medio de grandes nevadas y tormentas de viento, que causaron el cierre de los caminos vehiculares.
Además de la información de los satélites Saocom, incorporaron al estudio imágenes ópticas de las misiones Sentinel 1, 2 y 3, de la Agencia Espacial Europea (ESA).
.

Preocupa en Río Negro la presencia de especies invasoras

 


El Río Negro está siendo alterado por el avance de las especies invasoras

Fecha de Publicación
: 24/08/2022
Fuente: Diario Río Negro
Provincia/Región: Patagonia


Un investigador del Conicet describió 7 especies introducidas. Es Cristian Pérez, nacido en Chimpay. Se trata de plantas, carpas, mojarras y almejas que complican a las especies autóctonas
Cristian Pérez nació en la localidad de Chimpay, que está en la margen izquierda del río Negro dentro del Valle Medio. Esa cercanía con el río lo marcó para siempre. A los seis años se mudó a Villa Regina, y hoy vive en Puerto Madryn, Chubut, pero no se olvida del río. Como profesional del Conicet, ya descubrió 7 especies de plantas, peces y crustáceos que se han introducido en la cuenca del Río Negro durante las últimas décadas y están alterando los ecosistemas locales.
Cristian Perez ha dedicado gran parte de su carrera científica a detectar e indagar sobre flora y fauna introducida en Patagonia Norte.
Las especies introducidas son seres vivos que son transportados de manera voluntaria o accidental por los seres humanos fuera de sus áreas naturales. Al cambiar de “lugar de residencia” esas especies pueden aumentar su población y generar severos daños a los ambientes. Son una de las principales causas de pérdida de la biodiversidad en todo el planeta.
El río Negro, con sus más de 635 kilómetros de longitud, no es ajeno a padecer las consecuencias de la introdución de nuevas especies de peces, crustáceos y plantas en su curso. Ese ingreso pone en peligro a ejemplares nativos como el pez puyen chico (Galaxias maculatus) y la almeja patagónica (Anodontites puelchanus), según contó Cristian Pérez al ser entrevistado por RIO NEGRO.
Desde su sitio de trabajo, en el Centro Nacional Patagónico (CENPAT) de Puerto Madryn, el experto se encarga de investigar y publicar sus hallazgos que registran el drástico estado de situación de uno de los cursos de agua más importantes de la región patagónica.
Se recibió de licenciado en Ciencias Biológicas por la Universidad Nacional del Sur y luego se dedicó a participar en campañas de recolección de muestras. Dirigió más su interés a la herpetología, es decir, el estudio de anfibios y reptiles.
Desde finales de la década de los años noventa realizó las publicaciones científicas sobre las especies introducidas en el Río Negro que ha descripto con detalles. Se trata de una tarea que pudo llevar adelante junto al acompañamiento de varios colegas radicados en la provincia, quienes le facilitaron la labor de búsqueda.
“Hay que diferenciar entre especies exóticas, que vienen de otro continente o hemisferio -como ocurre con el pez carpa-; y los traslocados. En este último caso, se trata de especies autóctonas de alguna otra parte de nuestro país que fueron traídas a un área donde no estaban”, aclaró.
En la cuenca rionegrina se han identificado tanto exponentes de exotismos como de traslocaciones. Una especie exótica que se encontró es el pez carpa o carpa común (Cyprinus carpio). Es una especie nativa de las aguas templadas de Europa y Asia. Se desconoce cómo llegó a la Patagonia Norte, pero existen indicios de las primeras poblaciones en el río Negro a comienzos de la década del 2000.
“La carpa posiblemente llegó por alguien con buenas intenciones que la liberó, porque existe la creencia de que controla la vegetación acuática. Sin embargo, esa creencia es falsa. Las carpas tienen una mayor tendencia a comer peces pequeños o huevos”,explicó Peréz. Se trata de especímenes muy invasores y con gran adaptabilidad, por lo cual la carpa es hoy el principal depredador de los peces autóctonos, como la perca o trucha patagónica.
Entre 1995 y 1999 fueron encontradas dos tipos de mojarras originarias de las costas del Río Paraná y de la Plata: el Cheirodon interruptus y el Corydoras paleatus. En 2008 se encontró el primer ejemplar de un Astyanax pampa, otro pez cuya distribución geográfica solo llegaba naturalmente al límite con la provincia de La Pampa.
“Se cree que todas estas especies fueron introducidas por medio de la pesca deportiva al utilizar bolsas de carnada viva. También podría haber sido producto de liberaciones de acuarios particulares”, detalló.
En tanto, en 2016 comenzaron a registrarse pequeñas formaciones esporádicas de Limnobium laevigatum, o como es conocida comúnmente: lentejones de agua. Es una planta flotante acuática nativa del continente americano, aunque tiene un mayor desarrollo en las áreas tropicales. No habitaba en Patagonia.
Su adaptabilidad le permitió desarrollarse en el clima árido de la Patagonia Norte. Se estima que su llegada tuvo que ver con un desprevenido accionar de la ciudadanía que arrojó ejemplares accidentalmente al río. Se trata de una planta ampliamente utilizada para embellecer estanques o acuarios. La proliferación de los lentejones de agua podrían producir efectos tan nocivos como los producidos por los camalotes. Pueden aumentar los niveles de sulfuro de azufre en el agua y una modificación química del oxígeno como consecuencia de su descomposición. Estos fenómenos causarían una pérdida del equilibrio en los ecosistemas.
También la almeja asiática o Corbicula fluminea ingresó accidentalmente al país durante la década de los 60’ y 70’. Estos crustáceos probablemente llegaron desde sus lugares de origen a través del agua de las balsas de los barcos o por la liberación de especímenes vivos que eran utilizados como alimento de los tripulantes. En el Río Negro los primeros registros se remontan a la década de los noventa.
“Esta almeja genera grandes bancos que mueven el fondo natural del río e impide a otras especies desarrollarse. Cuando mueren, generan grandes áreas de conchillas que se degradan y alteran la composición química del agua. Estos parámetros inciden directamente sobre el resto de la flora y fauna autóctona”, aseguró Pérez. Su invasión ya llevó a la reducción de la población de la almeja patagónica.
La almeja asiática ya avanza río arriba lamentablemente. En este caso es transportada en los intestinos de los peces o por adherencia a las patas de las aves acuáticas.
.

Evaluan incendios en la Patagonia por la crisis climática

 


Evalúan los posibles efectos del cambio climático sobre la ocurrencia de incendios en la Patagonia

Fecha de Publicación
: 09/08/2022
Fuente: Conicet
Provincia/Región: Patagonia


Mediante técnicas de inteligencia artificial, especialistas del CONICET cuantificaron la probabilidad de fuego en ecosistemas boscosos de la región en el siglo XXI bajo distintos escenarios climáticos.
Evalúan los posibles efectos del cambio climático sobre la ocurrencia de incendios en la Patagonia Un equipo del Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Medioambiente (INIBIOMA, CONICET-UNCo) entrenó un algoritmo de aprendizaje artificial denominado Random Forest. El mismo permitió obtener una proyección de la probabilidad de incendios y vulnerabilidad de bosques en la región andino patagónica bajo diversos escenarios de cambio climático que se esperan para mediados y fines del siglo XXI. Esta información puede ser de utilidad para proyectar condiciones futuras, concientizar sobre la importancia de la mitigación y planificar acciones de contención frente a escenarios de incendios. El trabajo fue publicado en la revista Science of the Total Environment.
El modelo desarrollado relaciona la ocurrencia de incendios históricos en la Patagonia andina durante veintitrés años con variables biofísicas, antrópicas y meteorológicas históricas que influyeron en ignición y propagación de dichos fuegos. Una vez parametrizado el modelo, se estimaron las probabilidades de incendio futuras; para ello se ingresaron datos de proyecciones de condiciones meteorológicas bajo diversos escenarios de emisión de gases de efecto invernadero (GEI), denominados modelos de circulación general (GCM) que fueron desarrollados por el Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC). A su vez, la magnitud de cambio en la recurrencia de incendios estimada permitió ranquear la vulnerabilidad de diversos ecosistemas boscosos frente a estas alteraciones futuras.
El articulo reporta que bajo los diferentes escenarios de emisión de GEI plausibles, las probabilidades de incendios forestales a escala regional se incrementarán hacia mediados de siglo XXI y la situación empeorará para fines de siglo. Estos aumentos se darían de un modo relativamente homogéneo y afectarían tanto a bosques productivos como a estepas menos productivas. Bajo los escenarios climáticos más pesimistas, el modelo estima que la probabilidad histórica de incendios se duplicará o triplicará para mediados de siglo XXI, mientras que para fines de siglo, la probabilidad de incendios será entre siete y ocho veces mayor a la histórica. Aún para escenarios de emisión más plausibles, el modelo predice una duplicación de los incendios para mitad de siglo y una triplicación o cuadruplicación al terminar el siglo XXI.
“Los modelos empíricos nos indican un panorama poco alentador. Si bien esperábamos aumentos en las probabilidades de incendio para la región, lo que nos sorprendió más es la magnitud de los cambios que se esperan aún bajo escenarios de emisión relativamente optimistas. Esto implica que incendios de gran magnitud, como los ocurridos en lago Mascardi en 1999, el lago Cholila en 2015 o el de este año en el lago Steffen-Martin, en vez de ocurrir una vez por década aproximadamente podrían repetirse en la región cada cinco o cada dos años dependiendo del escenario climático esperado. Patagonia es un sistema muy sensible a la variación climática y vamos a tener aumento de temperatura y disminución de las precipitaciones, dos condimentos que son perfectos para el fuego”, señala Thomas Kitzberger, investigador del CONICET en el INIBIOMA y primer autor del estudio.
En el trabajo también se aborda la vulnerabilidad de los ecosistemas naturales, la cual refleja la falta de capacidad adaptativa de las especies que lo conforman frente a estas alteraciones en la frecuencia de incendios. Se analizaron tres tipos de bosques diferentes: los secos, dominados por ciprés o araucaria; los subalpinos, por lenga; y los húmedos, por coihue. Cada especie de árbol tiene diferente capacidad de regeneración según la frecuencia en la que se enfrenten a incendios; es por ello que su aumento ocasiona que muchos de estos bosques no puedan regenerarse y que sean reemplazados por matorrales. En el caso de los bosques húmedos de coihue, la proyección de incendios cada vez más frecuente dificultaría su regeneración; esto también afectaría a los bosques secos, aunque en menor medida. No obstante, los sistemas más vulnerables son los bosques subalpinos que tendrían más dificultades para regenerarse.
El estudio indica que bajo un escenario probable de emisión de GEI, para fines del siglo XXI los bosques subalpinos sufrirían marcadas retracciones, mientras que las pérdidas de bosques húmedos y secos serían más moderadas. Sin embargo, en escenarios de cambio climático más pesimistas los tres tipos de bosque se convertirían paulatinamente en matorrales o pastizales. Este reemplazo de bosque impacta en la pérdida de biodiversidad y en los servicios ecosistémicos que brindan a los seres humanos, como la regulación climática e hidrológica y la absorción de dióxido de carbono.
“Otro factor que tenemos que tener en cuenta ante el aumento de la probabilidad de incendios es la vulnerabilidad social, vamos a estar sometidos a una mayor exposición al riesgo y depende de la adaptabilidad que tengamos como sociedad el grado de la misma” expresa Kitzberger. “Tenemos dos cosas para hacer frente al cambio climático: la mitigación y la adaptación. La primera implica disminuir las causas, hay que revertir la matriz energética y nuestros hábitos cotidianos. La adaptación conlleva a prepararnos para lo que viene, por ejemplo, haciéndonos más resilientes como sociedades contra el fuego, tener sistemas más eficientes de combate de incendios, desde la logística, tecnología, prevención y vigilancia”, concluye el investigador.
.

Intentarán salvar los Huemules en un centro de cría

 


Huemules en peligro de extinción: intentan capturarlos para trasladarlos a un centro de cría

Fecha de Publicación
: 21/07/2022
Fuente: Diario Río Negro
Provincia/Región: Nacional


Quedan entre 300 y 350 en el país. La especie fue declarada Monumento Natural Nacional pero el plan de conservación avanza lentamente.
Entre 350 y 500 huemules se estima que sobreviven hoy en Argentina. Esta especie en peligro de extinción fue declarada Monumento Natural Nacional pero el plan de conservación avanza lentamente.
«Hay otros 1.000 ejemplares del otro lado de la cordillera. Los 1500 animales en ambos países están separados en más de 100 grupos distribuidos en las zonas montañosas. Se estima que, en el pasado, había 2 millones de ejemplares», explicó el investigador del Conicet, Werner Flueck.
La cacería histórica fue la principal causa de exterminio de las grandes poblaciones de huemules. Muy pocos animales lograron sobrevivir y se recluyeron en la alta montaña, modificando sus prácticas alimentarias, las tasas de reproducción y alterando su salud.
Flueck, doctor en Biología suizo nacionalizado argentino, aseguró que el huemul es uno de los pocos animales que no tiene miedo al hombre. «Si uno anda en la montaña y ve, de lejos, un ciervo colorado hay que tener cuidado. Si olfatea o te ve de cientos de metros se aleja. Un huemul se acerca al humano para olfatearlo. Estuvo muy expuesto a la presencia humana», subrayó.
Contó que esta especie solía tener costumbres migratorias (ciclo cultural de traslado en las invernadas y veranadas), pero las actividades humanas la fueron expulsando y la obligaron a refugiarse en el bosque andino alto para sobrevivir.
“Es todo un proceso: si la madre migra, la cría la sigue y aprende. Pero la actividad humana le quitó esa costumbre. Entonces los huemules que hoy viven en estas montañas residen ahí todo el año. Es el único cérvido conocido que, en lugar de usar las cordilleras montañosas sólo en verano, las habita durante todo el año debido a las actividades antropogénicas«, puntualizó.
Al perder su tradición migratoria y, por ende, el acceso a diversos hábitats como praderas y valles -donde tienen a disposición vegetación con mayor concentración de minerales-, los huemules fueron modificando sus prácticas alimentarias y eso redundó en distintos problemas de salud.
«En las invernadas los animales recuperan los minerales que no tuvieron en la veranada. Con lo que comen arriba todo el año, hemos podido ver que se debilitan. Padecen enfermedades óseas, se afecta su esqueleto. Esto incide en la dentadura. Al perder dientes cuando son muy jóvenes, no pueden comer y también los debilita», especificó Flueck.
Los investigadores colocaron radiocollares a seis huemules del Parque Protegido Shoonem, del sector lago La Plata, para estudiar sus movimientos entre 2017 y 2022. Comprobaron que prácticamente no se desplazaron.
La mayoría muere muy joven, cuando un animal debería llegar a los 20 años. «En esta zona hicimos un estudio concreto y un animal no sobrepasa los 5 años», alertó el investigador y agregó: «La producción por madre está muy por debajo de las poblaciones que llegan a la edad normal. Cuando tienen dos años, suelen tener la primera cría. Si la cosa anda bien, luego tendrán una por año. Pero si mueren con cinco años, se termina el ciclo».
A nivel mundial sólo existe el Centro de Conservación Huilo Huilo, en Chile, donde se crían huemules para aumentar las poblaciones y luego, se los libera en «las zonas más fértiles».
Gracias a una donación de la fundación suiza Erlenmeyer, Flueck y sus colegas completaron la construcción de la estación de recría, ubicada en unas 100 hectáreas de campo natural cercado con alambrados especiales, al sur de Chubut. «Es el primer y único centro de cría y reintroducción del huemul en Argentina. La idea es capturar animales para trasladarlos a ese lugar. Lo esencial es es encontrar dueños de estancias dispuestos a acompañar», dijo.
El desafío es aprovechar este invierno para capturar algunos ejemplares afectados, poder trasladarlos a ese lugar para curarlos y rehabilitarlos.

Múltiples causas
El biólogo Hernán Pastore, director Regional de Patagonia Norte, aseguró que, en la historia reciente, son múltiples las causas respecto a la escasa población de huemules.
“La cacería fue un motivo fuerte en el pasado. Hoy existe la caza furtiva pero no es habitual. Por eso, los problemas están más asociados al mal uso de la tierra, la ganadería extensiva y las malas prácticas ganaderas», aseguró el referente del huemul en la Administración de Parques Nacionales.
Apuntó a los perros que se emplean para arriar a las vacas en la montaña. “Son cazadores. Corren solos por el monte y si se cruzan con fauna nativa la liquidan. Son una amenaza para el huemul“, indicó.
Mencionó que, a través de la ganadería extensiva se contagiaron enfermedades al huemul. En Neuquén, por ejemplo, se cree que la principal causa de extinción del huemul fue un brote de aftosa.
.

La Patagonia sigue sufriendo los incendios forestales

 


Los incendios forestales en la Patagonia no dan tregua y varias provincias continúan con focos activos

Fecha de Publicación
: 27/12/2021
Fuente: Ambito
Provincia/Región: Patagonia


El reporte diario del Ministerio de Ambiente mostró la situación en Neuquén, Río Negro y Chubut. Las cenizas complican la visibilidad a los que viajan por las rutas locales.
Autoridades del Ministerio de Ambiente informaron que los focos de incendio en la Patagonia se mantienen activos, en una situación preocupante por el avance sostenido de las llamas. Varias provincias pusieron a disposición sus recursos para apagar las llamas. Las cenizas complican la visibilidad en varias zonas aledañas a los incidentes.
El reporte del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible precisó que permanecen activos los focos en el lago Aluminé, en la provincia de Neuquén, y en zonas cercanas a Bariloche, en Río Negro. Las autoridades recomiendan no salir, dado que la Ruta Nacional 40 se encuentra afectada por las cenizas, que complican la visibilidad para los vehículos.
También continúan activos los incendios forestales en los departamentos de Tehuelches, Río Senguer y Cushamen en la provincia de Chubut. cientos de usuarios compartieron fotos del cielo en esta Navidad afectado por el humo y las cenizas, que se esparcen debido a los graves incendios que se registran en estas provincias.
La situación en Neuquén generó la intervención de un total de 190 personas, entre brigadistas nacionales y provinciales, personal de la Administración de Parques Nacionales y de logística, junto al apoyo aéreo de tres helicópteros y un avión hidrante pertenecientes al Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF).
En tanto, en la provincia de Río Negro operaron el director nacional del Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF), Alberto Suefferheld y el coordinador de la Regional Patagonia, Ariel Amthauer, junto a brigadas nacionales y provinciales, señaló un comunicado oficial.
Por su parte, en Chubut trabajan un total de 69 brigadistas, sumando personal de logística y personal de comunicaciones pertenecientes a los equipos nacionales y provinciales. Allí el apoyo aéreo fue de 5 aviones hidrantes, un avión hidrante anfibio y dos helicópteros pertenecientes al SNMF.
Asimismo el Ministerio de Ambiente informó que envío los medios aéreos requeridos por las provincias, "que se encuentran operativos, y puso a disposición más recursos aéreos y personal para combatir el fuego".
Por último, respecto a los focos de incendio activos en otras partes del país, el informa indicó cuál es el estado de situación de los focos en Entre Ríos, Misiones, Buenos Aires, Santa Fe y Santa Fe.
En Entre Ríos, sigue activo el foco en Concordia II y controlado Concordia I, en tanto se sumó en Misiones hubo un incendio en El Soberbio. Allí, está controlado el fuego en Garuhapé y Candelaria. Por otra parte, los focos en Buenos Aires, Santa Fe y Tierra del Fuego ya fueron controlados.
.

Despliegue de recursos en Patagonia ante posibles incendios

 


Ante la temporada de incendios forestales, Nación despliega medios aéreos en la Patagonia

Fecha de Publicación
: 09/12/2021
Fuente: Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible
Provincia/Región: Patagonia


Es parte de las acciones de prevención que encara la cartera de Ambiente nacional. Las aeronaves tendrán base en San Martín de los Andes y Bariloche, y servirán para dar respuesta al ataque inicial en Parques Nacionales y otras jurisdicciones. Además está a disposición la Brigada Nacional Sur.
 Ante la temporada de incendios forestales, Nación despliega medios aéreos en la Patagonia El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, a través del Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF), envió medios aéreos a la Patagonia de cara a la temporada de peligrosidad de incendios forestales durante el verano. Gracias a una importante inversión de recursos, se desplegó un avión hidrante y un helicóptero que harán base en el Regimiento de Caballería del Ejército Argentino en San Martín de los Andes, provincia de Neuquén, y un avión hidrante y un helicóptero para la localidad rionegrina de San Carlos de Bariloche.
Asimismo, se encuentra disponible la Brigada Nacional Sur con base en Las Golondrinas, provincia de Chubut, conformada por 60 brigadistas que realizan tareas de capacitación, asistencia y apoyo técnico para las coordinaciones regionales del SNMF, las provincias y la Administración de Parques Nacionales.
El Ministerio que conduce Juan Cabandié organizó también jornadas de integración, entrenamiento y talleres para brigadas de incendios forestales de los sistemas provinciales de manejo del fuego de las provincias de Río Negro y Chubut, y del Parque Nacional Lago Puelo.
De acuerdo a un informe del Servicio Meteorológico Nacional, para los meses de diciembre, enero y febrero se anticipan condiciones adversas: el desarrollo del fenómeno “La Niña” dará lugar a temperaturas por sobre el promedio y a precipitaciones por debajo de la media sobre varios sectores de Argentina, en especial en la Patagonia. Por este motivo, sumado a la falta de lluvia y nieve que se produjo en el invierno, se registra mayor disponibilidad de combustible superior a lo normal, factores que facilitan la ocurrencia de incendios de acuerdo a la evaluación del Ministerio de Ambiente.
Las acciones que lleva adelante la cartera ambiental nacional forman parte de una política de prevención de incendios forestales en todo el país, para la que se ha profundizado el financiamiento. A partir de la creación de un fideicomiso con alícuota del tres por mil de pólizas de seguro, se incrementó el financiamiento del Servicio Nacional de Manejo del Fuego en $ 2.640 millones. Dicha suma se añade al presupuesto 2021, que contempla para el área $ 418 millones, por lo que la inversión total asciende a más de $ 3.000 millones. De esta manera, el presupuesto disponible para el año en curso es siete veces mayor que lo ejecutado el año pasado.
Cabe destacar que la Nación toma intervención luego de cumplirse los primeros niveles de actuación ante incendios forestales. En primer lugar comienza la responsabilidad jurisdiccional, donde las provincias y los parques nacionales responden de manera inmediata y actúan sobre los focos ígneos. En un segundo momento, de ser necesario, la jurisdicción coordina el pedido de colaboración al resto de la región. Y, por último, en el tercer nivel, si la magnitud del incendio supera el apoyo regional, se pide colaboración a otras regiones con la coordinación del Servicio Nacional de Manejo del Fuego.
El 95 % de los incendios forestales son producidos por intervenciones humanas. Entre las primeras causas se encuentra el uso del fuego para la preparación de áreas de pastoreo. Otras causas que prevalecen son el abandono de tierras, las fogatas y las colillas de cigarrillos mal apagadas. Los factores climáticos, como la falta de precipitaciones, las temperaturas elevadas, el bajo porcentaje de humedad, las heladas constantes y los vientos fuertes, inciden en la propagación del fuego. Vale resaltar que, frente a la presencia de estas condiciones, deben extremarse las precauciones.
.

Preocupa la presencia de alga invasora en el sur


Didymo: la especie invasora que amenaza ríos y lagos en la Patagonia

Fecha de Publicación
: 12/11/2021
Fuente: La Nación
Provincia/Región: Patagonia

 

Un equipo de la Universidad Nacional de Río Negro está desarrollando una estrategia para el monitoreo y la contención en aguas del país y Chile
Un equipo de la Universidad Nacional de Río Negro (UNRN) está investigando el poder invasor y el impacto ecológico del alga didymo en los ríos y los lagos de la Argentina y Chile para diseñar una estrategia que facilite su contención y su monitoreo.
Es la primera vez, según afirman los investigadores del Instituto de Investigación en Paleobiología y Geología (IIPG), que se analiza de manera integrada “el potencial invasor de la especie, la susceptibilidad del ecosistema de ser invadido o su grado de receptividad y los impactos del ambiente, incluido el conjunto de organismos vivos”, definieron a través de un comunicado.
El didymo, más popularmente conocido como “moco de roca” (Didymosphenia geminata), se identificó por primera vez en el país hace dos décadas. Fue en 2010 en el río Futaleufú, Chubut. A través de un comunicado, los investigadores explicaron que se trata de una “microalga con alto poder de propagación y elevada capacidad invasiva en cortos periodos de tiempo”.
La mayoría de las especies exóticas invasoras (EEI), que pueden ser animales, plantas, hongos o microorganismos, aparecen en áreas ajenas a su lugar de distribución natural por la actividad humana, ya sea de manera intencional o accidental. Son, de acuerdo con el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, la segunda causa de la pérdida de la biodiversidad del planeta; los más afectados son los ecosistemas acuáticos. En 2016, según publicó LA NACIÓN, habían 654 EEI identificadas en el país, y la lista oficial, que incluye el alga que estudia el equipo de la UNRN, se puede consultar aquí.

Agua y hábitat
El equipo que coordina Pablo Macchi, del IIPG de la UNRN, está estudiando el avance del didymo. “Su presencia masiva en aguas dulces de América del Sur produce cambios en la calidad del agua y alteración del hábitat existente, afectando la biodiversidad”, indicaron a través de un comunicado.
A la vez, según señalaron, la invasión “impide el crecimiento de otras algas, disminuye o hace desaparecer marcoinvertebrados (insectos, crustáceos y caracoles acuáticos, entre otros) y afecta las áreas de alimentación y reproducción de peces”. También, afecta el aspecto visual de los ambientes acuáticos y, por lo tanto, la actividad turística y económica de la zona.
“La principal preocupación socioeconómica actual para la región es el desarrollo de floraciones en ríos y lagos, donde se realiza la pesca deportiva de salmónidos, por sus efectos en los ecosistemas”, indica Macchi, docente e investigador del IIPG de la Sede Alto Valle y Valle Medio de la universidad, en General Roca.
Sin embargo, el equipo apunta que el impacto del alga didymo fue “poco investigado en la Argentina”. Las investigaciones disponibles, de acuerdo con los científicos, “no tienen en cuenta otros aspectos clave en la propagación del alga, como la invasividad y la invasibilidad”.
“El conocimiento integrado de la invasión posibilitará elaborar e implementar mejores estrategias de gestión y gobernanza, centradas en prioridades bien definidas, que permitan el desarrollo de programas de bioseguridad de especies invasoras”, dijo Macchi.
.

Señalan que la silvicultura se concentra en las exóticas

 


El potencial de las especies forestales nativas en los bosques patagónicos

Fecha de Publicación
: 07/08/2021
Fuente: Diario Río Negro
Provincia/Región: Nacional


Raulí, ciprés de la cordillera, roble pellín, lenga, ñire, araucaria y sauce criollo son opciones viables. Se avanza en la definición de ‘áreas productoras de semilla’ en el bosque natural y en la creación de ‘huertos semilleros’ para producción de plantines.
La silvicultura de implantación en el mundo entero, se concentra en un puñado de especies y deja de lado el potencial de los árboles nativos.
Según datos de la Dirección Nacional de Desarrollo Foresto Industrial, de los 1,3 millones de hectáreas forestadas en la Argentina, el 63 % son pinos, el 25 % eucaliptos y el 6 % álamos y sauces y apenas unas 72.000 hectáreas plantadas escapan a estos géneros exóticos.
En la Región Patagónica se repite el mismo panorama: de las 119.000 hectáreas implantadas, el 89,5 % son pinos y el 5,7 % álamos.
Para el grupo de Genética Forestal del INTA Bariloche las especies nativas de los bosques patagónicos (como el raulí, ciprés de la cordillera, roble pellín, lenga, ñire, araucaria y sauce criollo) producen madera de destacables cualidades tecnológicas y estéticas y, frecuentemente, más altas que la de las exóticas alternativas para el mismo sitio de cultivo.
“Las tasas de crecimiento pueden ser menores, pero el mercado de hoy está dispuesto a pagar más del doble por la madera del ciprés de la cordillera que por la de pino ponderosa”, indicó Mario Pastorino –investigador del INTA Bariloche–.
Las plantaciones de autóctonas con fines productivos contribuirían a evitar la sobre-explotación de los bosques naturales que hoy son la exclusiva fuente de provisión de sus maderas. Así, el mercado podría proveerse en las plantaciones y destinar los bosques a la provisión de servicios ecosistémicos no destructivos.
Cualquier especie utilizada en una plantación productiva provocará un impacto en el ambiente. “Esto es debido a su regularidad y homogeneidad, junto al manejo necesario como desmalezado, poda y raleo, que determinan condiciones distintas a las de un ecosistema natural. Sin embargo, el impacto sería mayor si se realizara con una especie exótica”, mencionó María Marta Azpilicueta –investigadora del INTA Bariloche–.
Asimismo, la recuperación de bosques degradados por el mal uso o destruidos por catástrofes como los incendios, sólo puede realizarse utilizando especies nativas, ya que el uso de exóticas implicaría una transformación antes que una restauración.
Para poder utilizarlas en plantaciones a gran escala, tanto con fines productivos como de restauración ecológica, “primero es necesario desarrollar una tecnología especie-específica, de eso se trata la domesticación de especies forestales nativas”, dijo Pastorino.
El ajuste de tecnologías va desde la elección del acervo genético adecuado para cada sitio, hasta el manejo de la plantación instalada. Para Alejandro Aparicio –investigador en genética y adaptación de árboles nativos del INTA Bariloche– “domesticar una especie es sacarla de su estado natural, salvaje, para conducirla hacia un sistema ordenado, regulado, o sea un sistema de cultivo”.
Desde mediados de los ’90, el INTA Bariloche y el INTA Esquel se dedican a la domesticación de especies forestales autóctonas, por su buena potencialidad productiva y relevante valor ecológico, comenzando por el estudio de los patrones de variación genética.
“Al inicio, ni siquiera se sabía con precisión la distribución de cada una de estas especies, hoy ya sabemos, por ejemplo, que hay 18 acervos genéticos (zonas genéticas) diferenciales de la lenga en Argentina”, agregó Aparicio. Esta información de base, que es esencial para la toma de decisiones, ha demandado años de estudios en laboratorio, en el vivero y en campo con ensayos de adaptación y crecimiento.
El INTA también generó información sobre las semillas de estas especies para su uso en la producción de plantines. La necesidad de asegurar la provisión y una cierta calidad genética, llevó a la definición de Áreas Productoras de Semilla en el bosque natural y la creación de Huertos Semilleros, es decir, plantaciones con el fin exclusivo de producir semillas para la producción de plantines.
“Ya hemos creado 15 áreas semilleras para forestales nativas de Patagonia, y siete de ellas ya están inscriptas en el Instituto Nacional de Semillas”, detalló Pastorino.
Estos avances permitieron que el Estado Nacional incluyera en su cartilla a varias especies patagónicas para el pago de aportes no reintegrables que apoyan las plantaciones productivas según la Ley 25.080.
“En los últimos años hemos entrado en la etapa de puesta a prueba de estas especies, es decir, ver cómo se comportan en plantaciones a escala”, explicó Azpilicueta. Los ensayos de campo van desde el norte de Neuquén hasta el sur de Santa Cruz. Los resultados sirven para identificar errores y ajustar variables como los sitios y fecha de plantación, cuidados iniciales, tipo y calidad de plantín.
.

Advierten de incendios más frecuentes en la Patagonia

 


Cambio climático e incendios en la región: “Habrá más fuego, más severo y más frecuente”

Fecha de Publicación
: 13/07/2021
Fuente: El Cordillerano
Provincia/Región: Patagonia


“Punto de quiebre, de no retorno”. Eso significa que, aunque suceda un acuerdo serio de los países de emitir menos gases de efecto invernadero, arribamos a niveles de cambios que no son reversibles. Y ese punto de “no retorno” sucederá en esta década. Resulta evidente que el cambio climático ya está entre nosotros.
“El punto de quiebre significa que vamos a tener una atmósfera con una concentración de dióxido de carbono, metano y gases tales que el planeta no va poder enfriarse con la velocidad suficiente y se va a producir un efecto de retroalimentación”, explicó el investigador de CONICET en INIBIOMA, Thomas Kitzberger, en el programa GPS de El Cordillerano Radio.
Agregó que las alteraciones climáticas van a ser disruptivas a los ecosistemas y a las sociedades humanas. “Habrá migraciones, es una crisis subyacente muy grave”, dijo.
El cambio climático ya no es una cuestión del futuro. El licenciado en Ciencias Biológicas señaló que se confirmaron las primeras tendencias que los modelos predecían a principios de 2000. No nos queda otra, observó, que mitigarlo y, además, adaptarnos a nuevas realidades. “Esa realidad en la región es más fuego, más grande, más severo y más frecuente”, destacó con preocupación.
La forma en la que vivimos tendrá que cambiar. Se tendrá en cuenta la vegetación alrededor de las viviendas, cómo crecen las ciudades, si los núcleos urbanos son más resilientes al fuego. “No es solo un problema ecológico, es un problema socioecológico. Aumentan los riesgos de vidas humanas, pérdidas materiales, económicas…”, advirtió.
Y los modelos climáticos no son promisorios para la región porque indican un decremento en las precipitaciones que cargan las napas profundas, que se dan principalmente en invierno y primavera. Junto a un aumento de la temperatura en verano. Esto significa, explica Thomas, más combustibles -ramas, hojas- y más secos.
Otro tema que se suma a este preocupante escenario es el de las tormentas eléctricas. Cada vez son más frecuentes por el cambio climático. Aseguró que “confluyen datos que nos deben movilizar para avanzar en cambios estructurales”. Y Argentina no está cumpliendo los objetivos como se había comprometido. “Está en el segundo cuarto más bajo en el ranking de países”, apuntó.
Thomas trabaja en el desarrollo de un modelo empírico que toma los datos reunidos en 23 años sobre cómo se produjeron los incendios. “Y a partir de entender las condiciones en las que se generaron los incendios, aprender a predecir cuándo va a suceder un incendio en la región, explicó y agregó que a este modelo le incorporaron las condiciones que predicen los modelos de cambio climático.
Los resultados son preocupantes. En un escenario intermedio, para fines del siglo XXI, tendremos un 250% de aumento de la probabilidad de incendio. En un escenario pesimista, un 700% de aumento. Hoy la probabilidad que un incendio vuelva al mismo lugar es de 1.000 años. Con estas proyecciones, se reduce a 150 años. Esto significa -subrayó- que vamos a ver cambios muy importantes en nuestros paisajes.
El investigador comentó que la posición del ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de negarse a firmar el tratado de París fue “una de las peores cosas”. Porque junto con China e India, es uno de los principales países emisores de gases de efecto invernadero. Esa política ralentizó las medidas para llegar a un balance neto cero de emisiones. “Fue lamentable”, dijo y mencionó que después atravesamos la pandemia que frenó las emisiones, aunque hubo un efecto de rebote económico y China -por caso- ya compensó las emisiones que había dejado de emitir durante la cuarentena.
.

Matar a la Patagonia para darle vida a la vaca

 


Matar a la Patagonia para darle vida a la vaca

Fecha de Publicación
: 07/06/2021
Fuente: Sudestada
Provincia/Región: Patagonia


Sismo mediante, la expansión del “fracking” alienta el desastre ambiental en Vaca Muerta. Una historia de contaminación, saqueo del agua y metales pesados.
Hasta ahora van 9.
El año pasado sumaron 37.
El anterior, 36.
Puestos así, sin aclaración, contexto o historicidad, los números no dicen mucho. Pero la perspectiva cambia en cuanto se aclara que recién en 2015 se registró el primero. Previo a ese momento, a lo largo de 100 años de seguimiento, el fenómeno jamás había sido constatado en la zona donde hoy la rareza es, justamente, aquella quietud que reinó durante al menos un siglo.
¿Qué fue lo que cambió hace seis años? Una técnica cuestionada en la mayor parte del mundo por provocar, vaya casualidad, el desastre que se transita ahora, comenzaba a emplearse en un área específica de Neuquén: la fractura hidráulica, conocida a nivel global como “fracking”.  
Se desplegó sobre Vaca Muerta, un reservorio de hidrocarburos no convencionales que viene siendo promocionado por los últimos tres gobiernos como la gran carta del extractivismo energético que hará de la Argentina una eventual potencia mundial.
Tan grandilocuente como falso.
Hasta ahora, las estimaciones gubernamentales dan un resultado distinto: total de 222 al día de hoy, fecha en que se publica esta columna. Pero no estoy hablando de los oficialmente pretendidos –y nunca desembolsados– miles de millones de dólares, inversores que arriban en manada o guarismos de récords economicistas: los 222 que acabo de mencionar, distribuidos en los últimos 6 años, dan cuenta de otra cosa.
Se trata de sismos.
Refiere a temblores.
Que no están solos, claro. Vienen acompañados de otros aspectos. Por ejemplo, un volumen anual de “flowback”, esto es, agua con químicos y otros residuos industriales que devuelve cada perforación, equivalente a algo más de 500 piletas olímpicas de 50 metros de largo.
Los sismos también están secundados por la rotura de rocas subterráneas mediante explosivos, una inyección de agua que promedia los 35 millones de litros por pozo y una batería de hasta 500 químicos y aditivos que le añaden toxicidad al escenario de desastre patagónico.
El “fracking” combina lo más nefasto de la mega minería con lo peor de la extracción petrolera.
Dilapida recursos esenciales, pone en estado de inestabilidad a toda la estructura geológica de la región donde se realiza, incluso trae a la superficie materiales radiactivos con atributos para instalar una contaminación permanente.
“No sabemos que están extrayendo, los lodos de perforación pueden traer radiación y metales pesados”, me comenta Martín Álvarez Mullally, investigador del Observatorio Petrolero Sur.
En una de sus investigaciones, esta organización señaló que el proceso de fractura hidráulica suele traer a la superficie “sustancias alojadas en subsuelo, como materiales radiactivos de origen natural -uranio, torio, radio y radón- o metales pesados -mercurio, cromo, plomo, cadmio, arsénico…”.
“Si, por poner un caso testigo, medís en camiones todos los insumos que demandó la puesta en marcha de un pozo en Fortín de Piedra, área cuyo dueño es Paolo Rocca (Tecpetrol), estamos hablando de una hilera ininterrumpida de 45 kilómetros. Esa extensión de vehículos cargados con agua, arena, químicos, es lo que consumió su desarrollo”, dice Álvarez Mullally.
Sólo en lo que va del año, las petroleras que controlan Vaca Muerta perforaron 217 nuevos pozos –algunos con procesos de hasta 60 fracturas–.

Los nombres del desastre
La estatal YPF es la gran protagonista de esta historia de terror. Aunque no se quedan atrás otras compañías con ADN argentino.
Pan American Energy –con participación de Bulgheroni–, Pampa Energía –Mindlin–, Tecpetrol –Paolo Rocca, alias Techint– y Pluspletrol –familia Rey–, son los principales nombres compatriotas.
También está Vista, con partida de nacimiento firmada en México por una mera cuestión de aportantes iniciales. La lidera Miguel Galuccio, CEO de YPF durante la nacionalización de 2012 y dueño, desde entonces, del apelativo “Mago” por su habilidad para, entre otros trucos, imponer la engañosa idea de que Vaca Muerta es la última oportunidad para alcanzar el desarrollo local.
Párrafo aparte para su capacidad de transformar en negocio propio la información privilegiada, hija de la inversión de fondos públicos, a la que accedió durante sus años al frente de YPF. Vista es el mejor ejemplo de ello.
Porque no todas las vaquitas son ajenas. Menos aún en ese apartado de la Patagonia.
Por supuesto que también están Shell y Chevron. Y hasta un fondo de inversión suizo, de nombre Mercuria, que nunca antes pisó el mercado del gas y el petróleo y acá lo hace desde hace algunos años de la mano de los inefables Vila-Manzano.
“YPF es la empresa más importante de las integradas que están en Vaca Muerta. Maneja desde la extracción de hidrocarburos hasta la venta de nafta en las estaciones de servicio. Si bien retrajo un poco su actividad durante el macrismo, que benefició con subsidios a las privadas bajo control de Paolo Rocca y Marcelo Mindlin, no deja de ser la protagonista. También, a partir de las asociaciones que fue cerrando con empresas como Dow Chemical, Chevron, Equinor, Shell y Petronas”, señala Martín Álvarez Mullally.
La expansión de las compañías que apelan a la fractura hidráulica es inseparable del problema sísmico que atraviesan las poblaciones que habitan el suelo sobre el reservorio de los no convencionales.
Ese aspecto me devuelve a los números del principio. Y me conecta con Javier Grosso, investigador del Departamento de Geografía de la Universidad Nacional del Comahue y el analista que mejor viene documentando los problemas que engendra el “fracking” en ese apartado de la cuenca neuquina.
“Las empresas que más han perforado entre 2020 y 2021, según datos de la Secretaría de Energía, son YPF, con 91 pozos, Shell, con 40, Pan American Energy, con 21, y Vista, con un número similar. De los 9 sismos registrados este año, 3 ocurrieron en torno a las zonas donde fracturan YPF y Chevron, y otros 3 en las tierras bajo control de Pluspetrol. También se registraron temblores en torno a los pozos de Shell y Vista”, detalla.
Grosso me hace una aclaración respecto de los movimientos constatados: “El INPRES –sigla que refiere al Instituto Nacional de Prevención Sísmica– sólo deja asentados los sismos que suceden por encima de los 2,5 grados en la escala de Richter. Eso significa que todos los que ocurren por debajo de esa marca no son reconocidos como tales, aunque sucedan. La realidad es que la Red Geocientífica de Chile, que mide con mayor precisión, siempre constata un número superior de temblores a los que reporta el organismo argentino”.
El INPRES reconoce 88 sismos ocurridos en Vaca Muerta desde 2015 a la fecha. La organización chilena da cuenta de 222. En un trabajo reciente, Grosso sistematizó el archivo de mediciones del INPRES para confirmar que entre 1901 –inicio de los primeros registros, efectuados por distintos actores– y 2015 los movimientos en Vaca Muerta fueron prácticamente nulos.

Ver la nota completa
.

Planifican la recuperación de la Comarca Andina

 


Recuperar la Comarca Andina

Fecha de Publicación
: 16/04/2021
Fuente: Diario Río Negro
Provincia/Región: Patagonia


Equipos del INTA realizaron un relevamiento de los daños por los incendios forestales ocurridos durante entre enero y marzo en la Patagonia. Además de la asistencia técnica, avanzan en un plan de acción para la recuperación productiva.
Según el Servicio Nacional de Manejo del Fuego, en los primeros 50 días del año se quemaron más de 60.000 hectáreas, principalmente en la Patagonia. El primer incendio ocurrido en Cuesta del Ternero –El Bolsón – afectó unas 6.300 ha y el segundo que afectó mayormente a parajes de la provincia de Chubut alcanzó unas 3.864 hectáreas de bosque patagónico.
Además de las inconmensurables pérdidas de especies vegetales, los incendios ocasionaron daños en establecimientos productivos de la zona. Es por ello que un equipo interinstitucional realizó un relevamiento a campo para contabilizar su impacto y brindar asistencia inmediata a los productores.
Con las imágenes satelitales y los archivos catastrales del paraje Cuesta del Ternero, los técnicos advirtieron que el fuego afectó en promedio un 60% de la superficie predial de los productores, aunque en 4 casos el fuego arrasó más del 90% del campo. Los pobladores afectados por el incendio en La Cuesta de El Ternero son 35 familias y 14 familias integrantes de la Comunidad Rinconada de Nahuel-pan. Todas ellas dedicadas a la producción ganadera que poseen entre 5 y 50 vacas y hasta 100 ovejas.
El stock ganadero afectado es de 7.307 UGO (Unidad Ganadera Ovina: equivale a un ovino de 40 kilos de peso vivo que consume 365 kg de forraje seco en un año) de los cuales el 54 % son vacunos, 19% ovinos, 18% equinos y el 9% caprinos.
Según Raul Reuque – técnico de la agencia del INTA El Bolsón–, los productores perdieron alrededor de 90 kilómetros de alambrados prediales, se quemaron galpones de acopio, una vivienda familiar, una cabaña destinada a emprendimientos de turismo rural, instalaciones de ponedoras, un tractor, un aserradero portátil y unos 10.600 metros de mangueras para abastecer de agua para uso doméstico, para riego y bebida de los animales.
Por su parte, Guillermo Carbajal – técnico de la Secretaría de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena– indicó que se avanzó en la declaración de stock ganadero en la zona para calcular el balance de los requerimientos forrajeros de los próximos meses.
Hasta el momento, la provincia de Rio Negro entregó forraje –fardos y granos- para atender la demanda urgente de alimento para los primeros meses y se espera obtener más recursos a partir de la declaración de Emergencia y Desastre Agropecuario y Forestal para el departamento de Bariloche.
Para Reuque, es fundamental planificar las acciones a corto y mediano plazo frente a la escasez de áreas de pastoreo y la disponibilidad de forraje “Hay productores que tienen margen para decidir si van a seguir suplementando a los animales o los van a vender. En otros casos, se verán obligados a priorizar aquellos con buena condición corporal y buena sanidad que tengan más posibilidad de sobrevivir en el invierno”. En el caso de mantenerse la dotación ganadera actual, la demanda forrajera de mantenimiento será de unos 5300 fardos al mes y a partir del mediados de abril esta demanda se incrementará a unos 9300 fardos mensuales. Si, bien estos requerimientos en parte pueden ser cubiertos con el pastoreo de las áreas no quemadas, es fundamental que las mismas, reciban un uso muy limitado para evitar el sobre pastoreo y la consecuente degradación de este recurso. “Es preciso contemplar que la recuperación del pastizal del área quemada será gradual, en por lo menos dos o tres temporadas”, especificó.
En el último relevamiento sobre el incendio que comenzó el 9 de marzo, hasta el momento, se contabilizaron aproximadamente 90 familias afectadas en El Hoyo y 500 familias de Lago Puelo de los parajes de Las Golondrinas y Cerro Radal. Por su parte, la localidad de El Maitén cuenta con 10 establecimientos con daños.
En este caso se registró la caída de un sinnúmero de transformadores y postes de luz, lo que generó problemas adicionales a la cosecha y poscosecha de la fruta fina, por la demanda de las cámaras de frío. Además, se desintegraron las mangueras de toma de agua para riego y consumo animal.
La provincia de Chubut, gestionó 10 grupos electrógenos de diferentes dimensiones y características y que se pusieron a disposición de los productores. Esto se suma a dos cámaras de frío en el municipio de El Hoyo para que puedan llevar su cosecha y congelarla para no perderla.
En este contexto, técnicos del INTA brindan asistencia veterinaria inmediata a grandes y pequeños animales y desde la agencia del INTA en esa localidad se entregaron en Cholila cajones de crías de pollitas bebé que serán distribuidas entre productores afectados por el incendio, así como alimento balanceado, comederos y bebederos.
De acuerdo con Andrea Cardozo, jefa de la agencia del INTA El Bolsón, “Desde ambas agencias del INTA estamos colaborando con los Municipios de los distintos parajes afectados. Ahora comienza el trabajo desde la mesa interinstitucional con instituciones de ambas provincias para diseñar el plan de acción que brinde asistencia a los productores, y una estrategia a mediano plazo que contemple un manejo socio ambiental para recuperar los bosques”.
.

Fuego en la Patagonia, logran controlarlo tras 27 días

 


Tras 27 días de combate, lograron controlar los incendios en la Cordillera

Fecha de Publicación
: 07/04/2021
Fuente: Diario Río Negro
Provincia/Región: Patagonia


Así lo informó el director nacional del Servicio Nacional de Manejo del Fuego, Alberto Seufferheld. Aún no se saben las causas que originaron los focos, que arrasaron con más de 500 viviendas en Las Golondrinas, Lago Puelo y El Hoyo y causaron la muerte de tres personas.
La batalla contra el fuego entró en la etapa final. Tras 27 días de combate, los brigadistas lograron en las horas últimas controlar los focos que quedaban activos de los incendios interfase, que se habían iniciado el 9 de marzo pasado en Lago Puelo, Las Golondrinas y El Hoyo.
El director nacional del Servicio Nacional de Manejo del Fuego, Alberto Seufferheld, informó este lunes a RÍO NEGRO que “todo el incendio estaba controlado”. Destacó que se había logrado el domingo el control de todos los focos pendientes.
Explicó que como el incendio total se pudo controlar, “eso significa que ya no puede volver a estar activo”. “Ahora, se empieza con la etapa de la extinción del incendio”, informó Seufferheld.
Recordó que el fuego afectó alrededor de 13.000 hectáreas en la Comarca Andina y recordó que se tuvo que luchar en una zona montañosa. Aseveró que el control del incendio se alcanzó por el esfuerzo de un enorme grupo de personas que trabajaron en la zona. Estimó que hubo cerca de 500 personas, entre la parte logística y brigadistas, en el combate contra el fuego.
El primer foco se originó la tarde del 9 de marzo pasado en el sector conocido como Las Golondrinas, en Lago Puelo. Después, surgió otro foco en cercanías del Cerro Radal, en Lago Puelo. Ambos avanzaron impulsados por ráfagas de hasta 80 kilómetros en la hora. Las dos columnas siguieron hacia El Hoyo y otra se desprendió en dirección a El Maitén.
El fuego arrasó en pocas horas con más de 500 viviendas, decenas de chacras en producción y emprendimientos. Los incendios dejaron a más de un millar de personas sin nada y redujeron a cenizas y escombros muchos sueños y proyectos. Y causaron la muerte de Sixto Garcés, María Briones y José Luis Rivero y dejaron decenas de personas con quemaduras.
El fuego destruyó además decenas de vehículos, galpones y la subcentral Las Golondrinas del servicio provincial de manejo del fuego. Cuando estaba casi todo perdido, porque los bomberos y brigadistas estaban sobrepasados por la magnitud de los incendios, una lluvia cayó la madrugada del 10 de marzo y detuvo el avance arrollador del fuego. Esa madrugada nadie durmió en Lago Puelo y El Hoyo, donde el fuego llegó casi hasta el centro y causó pánico.
Horas después, las imágenes de la devastación que causaron los incendios estremecieron a la región cordillerana. El fuego afectó la prestación de servicios básicos como la luz, el agua potable y el gas natural domiciliario. Hasta hoy decenas de familias siguen sin servicios. Otras luchan por levantar viviendas antes de que lleguen las bajas temperaturas del invierno.
La investigación en marcha todavía no pudo establecer las causas de los incendios. Aunque, la principal sospecha apunta a la intervención del hombre ya sea por negligencia o de manera intencional.
Los peritos de la Superintendencia de Bomberos y División Siniestros de la Policía Federal finalizaron a finales de marzo último los peritajes en los sectores donde se presume que se originaron los incendios. El equipo regresó a la ciudad de Buenos Aires y todavía no envió el informe con las conclusiones, informó este domingo a RÍO NEGRO el fiscal general de Lago Puelo, Carlos Díaz Mayer, a cargo de la investigación.
.

Siguen los pedidos tras los incendios intencionales

 


Senadores patagónicos pidieron tipificar delitos contra el ambiente

Fecha de Publicación
: 17/03/2021
Fuente: mejorinformado.com
Provincia/Región: Patagonia - Nacional


Pretenden, además, declarar zona de desastre y de emergencia económica y social
Senadores patagónicos propusieron tipificar los delitos contra el Medio Ambiente y pidieron declarar zona de desastre a la región afectada por los incendios. Las iniciativas fueron presentadas por Alfredo Luenzo, Silvina García Larraburu, Nancy González, Mario País, Alberto Weretilneck y Claudio Doñate.
García Larraburu preciso que “buscamos declarar la zona de desastre y de emergencia económica, social y productiva, con el objeto de incrementar las partidas presupuestarias, la asistencia a la región y otorgar beneficios impositivos que ayuden a sobrellevar las consecuencias económicas del incendio”
“Con el propósito de impedir que estos hechos queden impunes, presentamos un Proyecto de Ley que incorpora en el Código Penal el delito contra el Ambiente y la Naturaleza y establece las penas para quienes los cometan. De esta manera, estaremos por primera vez protegiendo de manera directa el Ambiente”, argumentó.
García Larraburu reconoció a los brigadistas que combatieron el fuego en la cordillera y señaló que este año volvió a presentar un proyecto que establece un régimen previsional diferencial para combatientes de incendios forestales y rurales.
.

Patagonia: dos especies en peligro y su estado

 


El huemul y el huillín, en peligro de extinción ¿cómo podemos contribuir a su conservación?

Fecha de Publicación: 07/10/2020
Fuente: El Cordillerano
Provincia/Región: Patagonia

En la actualidad, estas dos especies que se encuentran altamente amenazadas por la actividad humana. Si bien existen persistentes trabajos de Parques Nacionales para garantizar su conservación, es fundamental conocer qué acciones concretas, individuales y colectivas, son necesarias para evitar su desaparición.
La bióloga Carla Pozzi, del Departamento de Conservación y Educación Ambiental del Parque Nacional Nahuel Huapi, dialogó con este medio sobre estos temas y señaló que existen decisiones puntuales que modifican el buen vivir de estos animales.
Según comentó Pozzi, el huemul y el huillín son dos especies fundamentales para la biodiversidad de la zona. El huemul es un tipo de ciervo andino, herbívoro, presa del puma. Por su parte, el huillín es lo que se conoce como predador tope, es decir que se encuentra arriba de la cadena trófica de los ecosistemas acuáticos de la zona, cumpliendo una función similar a la del puma en los ambientes terrestre. Por este motivo, se encarga de equilibrar a las demás especies: “su pérdida generaría un enorme descalabro, sería tremendo” señaló Pozzi.
Con todo esto, hoy por hoy las problemáticas de conservación que enfrentan estas especies están directamente relacionadas con la actividad humana. Según explicó la bióloga, en el caso del huemul, esta especie “vive en el ambiente alto andino en verano, y en invierno tiene que bajar a los valles porque arriba de las montañas no tienen vegetación para alimentarse al estar todo tapado de nieve. Este movimiento altitudinal que ellos hacían naturalmente hoy se ve amenazado porque en los valles hay personas asentadas, hay perros, y alambrados que no pueden pasar. Por esto estamos trabajando en el Manso para recuperar corredores de huemul, para que estos animales puedan bajar sin tanto peligro, porque mientras no lo hagan van a quedar arriba de la montaña y van a morir de hambre porque no tienen que comer”.
Por esta razón, Pozzi destacó que una de las principales acciones para no contribuir a la desaparición del huemul consiste en, principalmente en las zonas del Manso o Ñirihuau, “bajar la altura de alambrados, manejar al ganado, controlar a los perros, que no estén libres, si son de trabajo que estén con la persona que trabajan y no sueltos. Es imprescindible la tenencia responsable de los perros, porque forman jaurías que corren a los huemules y los matan”.
Ahora bien, en el caso del huillín, dado que se trata de una especie de nutria, que puede encontrarse en diversas zonas del lago, así como también en arroyos urbanos, el principal problema que encuentra en estos momentos es la pérdida del hábitat costero. “Un gran obstáculo para el desarrollo de la vida del huillín son las personas que hacen playas privadas cuando compran lotes con costa de lago. Lo primero que se hace es sacar la vegetación costera, poner banquitos o pastos para tomar sol, y estos animales necesitan de esto para ubicar ahí los descansaderos” explicó la bióloga.
De esta manera, es necesario “no retirar vegetación costera de ningún tipo, no dejar basura. Si uno compra un lote con costa de lago dejar la vegetación como esta, naturalmente, porque las plantas nativas, las raíces, los troncos caídos y el suelo generan refugios para los huillines, y eso permite que la especie pueda seguir estando la especie y nosotros también lo vamos a ver más seguido”.
Actualmente, según comentó Carla Pozzi, Parques Nacionales está llevando a cabo junto a vecinos y autoridades mesas territoriales que buscan aliviar estos problemas: “muchas veces no es fácil de resolver, ahora estamos trabajando a escalas de pequeños sitios, donde sabemos que la especie está, entonces buscamos aliviarles el problema. Pero cuesta mucho, porque las gestiones no se hacen solo con investigadores, sino directamente con las personas, que por medio de gestiones y decisiones podemos ir resolviendo estos problemas”.
En síntesis, Pozzi señaló que “está de la mano de la gente el cambio, sabiendo lo que necesita una especie, se puede mejorar generando un cambio”.
.

Blog Archive

Temas

Archivo de Blogs