Se perdió un tercio de las reservas de energía

Energía: En 10 años, se perdió un tercio de las reservas de petróleo y gas

Fecha de Publicación: 08/08/2010
Fuente: Clarín
Provincia/Región: Nacional


Es producto de la caída de inversiones. Que se suma al incremento de la demanda y a los subsidios sin control. El país consumió sin reponer combustibles por 150.000 millones de dólares. Es una crisis que heredará el próximo Gobierno.
El Distrito Federal de México tiene una curiosa característica. A simple vista, presenta un aspecto sólido y atractivo. Pero a medida que se va conociendo su historia queda al descubierto que su suelo se va hundiendo unos 40 centímetros por año.
Al igual que la capital azteca, el sistema energético argentino también enfrenta un serio problema estructural que va carcomiendo las reservas de hidrocarburos y de generación eléctrica.
Incremento del consumo interno, inversiones insuficientes, tarifas semicongeladas, subsidios sin control, contratos pendientes de renegociación, incumplimiento de normas regulatorias y falta de planificación oficial conforman el crítico panorama que viene afrontando el sector energético desde 2003 hasta ahora.
Más allá del discurso oficial que se empeña en negar los problemas, la realidad demuestra que la caída de las reservas energéticas no cesa y va camino a convertirse en una bomba de tiempo para el próximo gobierno.
De acuerdo con el último informe del Instituto Argentino de la Energía (IAE) “General Mosconi”, las reservas comprobadas de hidrocarburos (que abarcan petróleo y gas) registraro n en 2009 una caída interanual del 2,8% y totalizaron 665 millones de Tep (toneladas equivalentes de petróleo).
En el año 2000, las reservas totales eran de 1.070 millones de Tep, con lo cual ahora el país tiene un 38% menos de hidrocarburos disponibles que hace una década .
En el caso específico del gas natural, el trabajo del IAE puso sobre el tapete el siguiente panorama: Las reservas de gas llegaron en 2009 a 378.862 miles de millones (MM) de metros cúbicos, con una baja interanual del 4,9%.
Comparada con la situación de hace 10 años, las reservas actuales son poco menos de la mitad de los 777.609 MM de metros cúbicos que se registraron en el 2000, el año en que se alcanzó el máximo histórico de las reservas gasíferas del país.
Medido en años, el horizonte de reservas de gas natural bajó drásticamente de los 17,2 que había a principios del nuevo siglo a sólo 7,8 años en 2009.
Durante la última década, se verificó una marcada reducción de las reservas comprobadas que se encuentran en las principales cuencas gasíferas (Noroeste, Cuyana, Neuquina, Austral y Golfo San Jorge) que aportan el 80% de la producción total. Entre 2005 y 2009, la caída total de las reservas en esas cuencas fue del 14%.
La declinación de las reservas se ve agravada por el incremento del consumo interno . Salvo la leve caída registrada en 2009 por el impacto de la crisis económica, la demanda doméstica de gas no se detiene y hace más evidente el problema de las reservas y la falta de resultados del programa “Gas Plus” que instrumentó el Gobierno con el fin de elevar la producción y el horizonte de reservas.
Por el lado del s ector petrolero , la situación es la siguiente: Las reservas comprobadas de petróleo en 2009 se situaron en 398.213 millones de metros cúbicos, un 0,6 % menos que el nivel registrado en 2008.
Las reservas actuales muestran una caída de casi 16% respecto a las que había en el año 2000.
Tras haber tenido un horizonte de reserva de casi 20 años en la década del 90, en el período 2000-2009 ese parámetro se redujo a un promedio de 10 años .
En los últimos años, el nivel de reservas se mantuvo relativamente estable debido a la caída que se registró en el nivel de producción que pasó de 43.243 millones de metros cúbicos en el 2.000 a 36.163 millones de metros cúbicos en 2009.
La caída de las reservas se explica básicamente por la falta de inversión en exploración y explotación. En la década del 80, se habían incorporado unos 1.026 nuevos pozos de exploración. Entre 1990 y 1999, la cantidad de pozos terminados llegó a 989. Y en los últimos diez años, sólo se activaron un total de 484 pozos exploratorios.
En materia de energía eléctrica, la caída de las reservas se aprecia en la cantidad de MW excedentes que tiene el sector para poder cubrir los picos de mayor demanda. Técnicamente se considera que el sistema eléctrico debe tener un nivel de reserva equivalente al 10% la demanda nacional.
En el 2001, el nivel de reserva era del 15%, ya que el consumo máximo de energía de ese año había alcanzado al 85% de la capacidad instalada del parque de generación.
Cuatro años después, en 2005, la demanda pico trepó al 92% y dejó al sistema con una reserva disponible d e sólo un 8%.
A partir de 2007, la demanda máxima se ubicó en torno del 100% de la capacidad instalada de generación. Desde entonces, el sistema ha comenzado a operar al límite técnico y sin márgenes de reservas e n los períodos de mayor consumo. Ante esa situación, el Gobierno ha tenido que recurrir a la importación de entre 1.000 y 1.500 MW diarios de Brasil para poder reforzar la generación en los días más críticos.
La reducción de las reservas eléctricas responde, básicamente, a dos causas relevantes . En primer lugar, una insuficiente inversión en nuevas usinas: desde 2003 la demanda acumuló un crecimiento del 40% que no fue acompañado por la capacidad de generación que sólo se elevó un 18,2%. Y en segundo lugar, aparece el i ncremento de la indisponibilidad de las máquinas térmicas por la falta de mantenimiento y pérdida de eficiencia por el uso de fuel oil y gasoil en lugar de gas natural.
Según el ex secretario de Energía, Alieto Guadagni la “descapitalización energética” registrada durante las administraciones kirchneristas por la pérdida de reservas y las inversiones mínimas que no se realizaron asciende a un total de US$ 146.000 millones.
En el caso del gas, las reservas que se gastaron y no se repusieron equivalen a unos 313.000 MM de metros cúbicos que a los precios actuales significan US$ 82.000 millones.
En el sector petrolero, los números indican que las reservas consumidas llegan a 100.000 millones de metros cúbicos y representan otros US$ 50.000 millones . Y en generación eléctrica, el déficit de los MW que no se incorporaron para sostener la suba del consumo dejó un bache de US$ 14.000 millones.
“El monto total en juego por la descapitalización energética equivale casi al 42% del PBI y todo indica que será uno de los principales desafíos de inversión que tendrá que resolver el próximo gobierno”, advirtió Guadagni.


0 comentarios:

Blog Archive

Temas

Archivo de Blogs