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Neuquén: proponen medidas para enfentar la crisis climática

 


El Cambio Climático y sus consecuencias en Neuquén

Fecha de Publicación
: 04/10/2023
Fuente: Diario Río Negro
Provincia/Región: Neuquén


Se busca crear instrumentos financieros y proyectos innovadores que estimulen el flujo de capital hacia actividades que cuiden el medioambiente.
El cambio climático ya no es solo una proyección, sino una realidad palpable en nuestra vida cotidiana. La Organización Meteorológica Mundial (OMM), en representación de las Naciones Unidas, ha declarado oficialmente el fenómeno de “El Niño” a nivel global, lo que pronostica un aumento probable de las temperaturas este año. Esto ocurre en un momento en el que se registran las temperaturas más altas jamás vistas en todo el mundo. Este fenómeno se manifiesta en diversas formas alrededor del planeta, como inundaciones, incendios forestales, altas temperaturas, pérdida significativa de la biodiversidad y derretimiento de los polos con el consiguiente aumento del nivel del mar.
Los eventos que solíamos considerar lejanos ahora ocurren a diario, y la provincia de Neuquén no es ajena a esta realidad. Recientemente, la provincia sufrió una gran inundación como resultado de fuertes tormentas. Las localidades más afectadas fueron San Patricio del Chañar, Vista Alegre, Centenario, Cipolletti, Cinco Saltos y Barda del Medio. Esta inundación se suma a la ocurrida en enero de este año, cuando el personal de compañías petroleras que trabajaba en la zona tuvo que ser rescatado debido a la inundación de la ruta por la que transitaban.
Estos fenómenos, causados por el calentamiento global, generan un gran cambio climático que estamos experimentando y que afecta de manera transversal a toda la sociedad.
– Cómo afecta el cambio climático a la Provincia de Neuquén. Neuquén presenta varios aspectos que deben tenerse en cuenta, ya que el cambio climático puede afectar su funcionamiento normal. Esto no solo se debe a sus industrias, sino también a su densidad y distribución demográfica, así como a su ubicación geográfica.
– Impacto en la industria de la energía: La industria energética de la provincia, encabezada por la explotación de petróleo y gas, es especialmente relevante, considerando que se encuentra la zona de Vaca Muerta, la segunda reserva de gas más importante del mundo. Sin embargo, llegar a las locaciones donde se extrae tanto el gas como el petróleo convencional, como el no convencional, implica transitar largas distancias por carreteras y caminos que, en condiciones normales, son difíciles de recorrer. Si a esto le sumamos las fuertes lluvias que se están registrando, estos caminos se vuelven intransitables, lo que impide que los recursos humanos, equipos e insumos necesarios para la explotación de estos yacimientos lleguen a tiempo, afectando la producción.
El impacto en la industria del petróleo y el gas también alcanza a la incipiente industria de las energías renovables, ya que los lugares donde se instalan parques eólicos o solares se encuentran en el mismo terreno desértico patagónico de Neuquén.
En cuanto a las centrales hidroeléctricas, otra de las grandes industrias energéticas de Neuquén, se pueden ver afectadas por la escasez de agua produciendo grandes pérdidas. Incluso las intensas lluvias, pueden afectar la infraestructura de las mismas.
– Impacto en el turismo: La provincia cuenta con uno de los paisajes más hermosos del mundo, con escenarios naturales únicos y una riqueza inigualable que atrae a miles de turistas cada año, generando un gran impacto económico positivo en la zona. Sin embargo, estos paisajes y atractivos se ven seriamente comprometidos y corren un alto riesgo. En primer lugar, las sequías aumentan fuertemente la probabilidad de incendios forestales, tal como ha ocurrido en años anteriores, causando también que los ríos no tengan suficiente caudal, afectando a los animales, la vegetación y las poblaciones que dependen de ellos para obtener agua dulce potable. En segundo lugar, la crisis climática también provoca fuertes lluvias, causando grandes desastres ecológicos y de infraestructura, como los ocurridos en la provincia el pasado mes de junio.
– Impacto en infraestructura: Las intensas lluvias, las inundaciones, las fuertes nevadas, los deshielos y los deslizamientos de tierra sin duda afectan la infraestructura de la provincia. Estos eventos cortan y destruyen caminos, puentes, líneas eléctricas, sistemas cloacales, entre otros, generando grandes pérdidas económicas y obligando a redirigir recursos e incluso a endeudarse para reparar los daños ocasionados.
– Herramientas y acciones: A nivel Nacional se están llevando a cabo diferentes estrategias y programas para afrontar estas problemáticas. Una de ellas es la Estrategia Nacional de Finanzas Sostenibles (ENFS), que se ha desarrollado en el marco de la Mesa Técnica de Finanzas Sostenibles, en la que participan los principales referentes del sector público en esta materia. Se busca crear instrumentos financieros y proyectos innovadores que estimulen el flujo de capital tanto público como privado, hacia actividades que tengan como objetivo el medioambiente, lo social y de esta forma garantizar una transición justa hacia el cumpliento de los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible). Esta estrategia, se encuentra alineada con los “Principios ASG” (Ambiental, Social y de Gobernanza) desarrollados a nivel mundial, los cuales permiten entre otras cosas “medir el desempeño y la exposición al riesgo de las empresas”.
Es imprescindible la participación de todos los actores de la sociedad en el desarrollo e implementación de políticas orientadas a una estrategia de sostenibilidad de largo plazo que permitan garantizar el crucial protagonismo de la provincia en el crecimiento del país.
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Represas generan tensiones en originarios de Santa Cruz

 


Pueblos originarios piden transición justa para último río glaciar de Argentina

Fecha de Publicación
: 08/09/2023
Fuente: Agencia IPS
Provincia/Región: Agencia IPS


La construcción de las represas hidroeléctricas Cóndor Cliff y La Barrancosa, en el sur de Argentina, interrumpe el cauce del río Santa Cruz desde el glaciar hasta el océano y mutila la espiritualidad de 15 comunidades mapuche, al tiempo que extreman aún más la presencia del ave macá tobiano.
Imagínese sí, de repente, dos megaobras arrasan con un cementerio en el que estaban sus abuelos o padres. Imagínese, además, que el último de los ríos glaciares, que conecta hielos eternos con olas urgentes, se ve mutilado por dos moles que prometen generar energía limpia en un país de raigambre en hidrocarburos.
Por último, imagine que todo eso fue en vano, que las lluvias se retiran, y que el potencial hidroeléctrico imaginado al principio, quede reducido a unas gotas, en gran medida por acción del cambio climático.
Eso es lo que puede ocurrir en el sur de la Patagonia argentina con el río Santa Cruz, el último de los canales glaciares, distinguido por un caudal turquesa que es identidad y fuente de recursos para muchas personas, en particular, 15 comunidades originarias que desde 2017 reclaman la interrupción de las represas Cóndor Cliff y La Barrancosa.
Argentina las levanta con una inversión de 4700 millones de dólares aportados por la empresa china Gezhouba Group, sancionada por el Banco Mundial en 2015 por mala praxis en proyectos de infraestructura sobre agua.
“Hay toda una publicidad acerca del cambio climático. Por un lado, se habla de eso y, por el otro, las políticas que se desarrollan están totalmente de desacuerdo con esa preocupación que tienen todas las personas, incluso también nosotros como pueblos originarios. Y tiene que ver con esta cuestión del extractivismo”.
La que habla es Silvia Saldivia, una de las mapuches que integran la mesa coordinadora conformada tras una demanda ganada por los indígenas en 2017 y que, en teoría, busca que la transición energética no atropelle sus costumbres, economías, formas de vida y espiritualidad. Aunque, de momento, sin resultados.

Transición justa
Comunidades mapuches y tehuelches, junto con otros integrantes de la sociedad civil, demandaron al Estado en 2017 por la ausencia de una consulta previa a la proyección e inicio de las obras, tal como rige en el convenio 169 de la OIT y la Constitución argentina por la construcción de las presas que, en un principio, iban a llamarse Néstor Kirchner y Jorge Cepernik.
El informe Derechos Humanos y actividades empresariales chinas en Latinoamérica advierte que “el proyecto compromete un ecosistema natural de alto valor de preservación, tendrá varios impactos en la vida y cultura de pueblos indígenas tehuelches- mapuches y constituye una amenaza para el acceso al agua de generaciones futuras, además de poner en peligro de extinción a un ave endémica, el macá tobiano”.
También afirma que se vulneró el derecho a la consulta previa de los pueblos indígenas afectados y señala que «aunque la etapa de ejecución de sentencia está vigente la consulta no se ha realizado”.
En la mesa de diálogo “se pensó y se habló de proyectos de desarrollo para las comunidades, en resarcimiento por no haber hecho la consulta previa. Estuvimos como cuatro años escribiendo estos proyectos de desarrollo para cada una de las comunidades y la última respuesta que tuvimos de una autoridad de energía del gobierno nacional fue que lo que nos podían dar eran planes sociales”, relata Silvia.
Y añade: “Deja mucho que desear esta cuestión y no estaba pautada esta forma de trabajo, porque el plan social o el plan que da la nación es insuficiente y es limitado con respecto a lo que piden las comunidades originarias”.
Las consultas a la Secretaría de Estado de Cultura de Santa Cruz, que representa a la provincia en la mesa de diálogo, no pudieron ser resueltas.
Los indígenas reclaman, en primer lugar, acceso a las tierras que ocupan desde tiempos ancestrales, mucho antes del genocidio conocido como “Campaña del Desierto”, que entre 1878 y 1885 anexionó a la República Argentina la extensa Patagonia, cuna productiva de yacimientos hidrocarburíferos, pesca industrial y ganado ovino y caprino.
Poder tener su propio territorio, desarrollar turismo sostenible y producir alimentos sin agroquímicos en sus huertas, son las actividades que las comunidades mapuche y tehuelche quieren realizar en su lugar de pertenencia. Actividades que han ido a contramano de los intereses extractivistas de autoridades y empresas.
En marzo de 2020, la Unión de Asambleas Patagónicas (UAP) y representantes  originarios presentaron una denuncia y solicitaron medidas cautelares a la Convención Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en la que consideran al sistema de cuencas de ríos patagónicos como sujeto de derechos ambientales y humanos.
“La realidad es que siempre la visión que se tiene de pueblos originarios o de la gente indígena es que estamos sumidos en la pobreza. En realidad muchos de nosotros estamos empobrecidos, pero no porque seamos pobres intelectualmente, sino que ha habido un plan sistemático para despojarnos de nuestros lugares, para despojarnos de lo que se llaman ‘recursos naturales’, que para nosotros no solamente son recursos naturales, sino seres vivientes. El agua, el río es un ser viviente, la tierra también”, exclama Saldivia.
El pedido a la CIDH para que ordene la suspensión de las obras que levantan Cóndor Cliff y La Barrancosa solo fue cumplido por una interrupción en los pagos por parte de China, que ya se restablecieron, al punto que en estos días llegará un nuevo desembolso.

Proyecciones climáticas
El río Santa Cruz conforma la tercera cuenca más importante de Argentina, detrás de la cuenca Del Plata y la del Río Negro. Tiene una longitud de 385 kilómetros, aunque sumando a sus afluentes alcanza los 543.
Nace en el desagüe de los lagos Viedma y Argentino y sus aguas son de origen glacial, del deshielo de los ventisqueros del parque nacional Los Glaciares. Desemboca en el océano Atlántico, en un estuario que comparte con el río Chico.
Las construcciones de las represas hidroeléctricas están ubicadas a 150 kilómetros de la ciudad de El Calafate, al este de Santa Cruz. Según los planes de obra, Cóndor Cliff tendrá 68 metros de altura máxima, 1613 metros de longitud y contendrá cinco turbinas que generarán por año 3167 gigavatios- hora (Gwh).
Será una represa de concreto, con materiales sueltos presentes en el entorno del lugar y con pantalla de hormigón.
La Barrancosa, en tanto, tendrá una de 41 metros en su punto máximo, una extensión de 2.445 metros y contará con tres turbinas que abastecerán 1780 Gwh por año. Se generará un lago que conecte a las estructuras cuando comiencen a funcionar.
Si todo sale tal cual la empresa china lo tiene previsto en su plan de acción, en abril de 2024, cuando se instale la última de las ocho turbinas previstas, ambas obras estarán en condiciones de comenzar a proveer energía en su máxima capacidad, equivalente al 4,5 % de la oferta de energía eléctrica nacional, lo cual alcanzaría para abastecer a unas 700 000 familias.
Todo eso, si el clima lo permite. Originalmente, el clima predominante en la región conocida como “fin del mundo” es semidesértico patagónico, con frío seco y vientos constantes procedentes del Pacífico que, en el caso de Santa Cruz, son filtrados por la majestuosa cordillera de los Andes.
Por su abundancia de ríos interiores, América del Sur -y en particular Brasil y Argentina- experimentó la tasa de crecimiento de energía hidroeléctrica más rápida y se convirtió en la región con la segunda mayor capacidad añadida en el mundo.
Según un informe de la Agencia Internacional de Energía (IEA), la energía hidroeléctrica es la principal fuente de generación de electricidad en la mayoría de los países de América Latina y representa 45 % del suministro total de electricidad de la región.
Sin embargo, los impactos del cambio climático podrían perturbar el correcto funcionamiento al aumentar la variabilidad en el caudal, cambiar los caudales estacionales e incrementar las pérdidas por evaporación de los embalses.
Asimismo, la escasez de agua proyectada debido al derretimiento de los glaciares junto con las sequías podría afectar la generación de energía hidroeléctrica en regiones donde las plantas dependen, en gran medida, del agua de los glaciares, como es el caso del río Santa Cruz.
“Los cambios en las precipitaciones también alterarán el potencial, la producción de generación, el nivel máximo y las variaciones estacionales de la energía hidroeléctrica. Los patrones de precipitación erráticos podrían provocar escasez de agua y preocupaciones sobre la interrupción de la generación de energía hidroeléctrica”, indica el informe.
Y hace dudar si la megaobra es o no una buena idea.
En su plan oficial de Transición Energética, con vistas a 2030, Argentina aspira a generar 57 % de su energía eléctrica a partir de fuentes renovables, construir 5000 kilómetros de nuevas líneas de transmisión, y reducir en 8 % la demanda total de energía, entre otras cosas.
Para lograrlo, debe reducir el empleo de combustibles fósiles 35 % antes del final de década por medio de la expansión de las energías renovables, incluida la hidroeléctrica, y en particular la eólica y la solar.
Argentina tiene más de 20 000 megas en proyectos hidroeléctricos y un plan diseñado para que parte de la renta de las hidroeléctricas vaya a un fondo que permita potenciar aún más ese desarrollo.
“Aumentar la capacidad de generación de centrales hidroeléctricas de gran escala (mayores a 50 MW) conectados a la red.
Se trabajará en diversas políticas que incluye la extensión de la vida útil de las centrales existentes, la renovación y modernización de su tecnología con acciones de repotenciación, y el diseño, proyección, construcción y puesta en marcha de nuevos complejos hidroeléctricos, como los aprovechamientos hidroeléctricos del río Santa Cruz, actualmente en construcción”, dice el plan. Y advierte: “Se incluyen proyecciones climáticas para la evaluación de nuevos proyectos hidroeléctricos”.
La disminución general en la disponibilidad de agua en todas las regiones es un impacto también identificado en el Plan de Adaptación al Cambio Climático.
“En todas las regiones se identifica también el riesgo de limitación de la generación hidroeléctrica por disminución en la disponibilidad de agua, que también está relacionado con vulnerabilidades previas existentes como la insuficiente diversificación de fuentes de generación de energía eléctrica y falta de participación provincial en las políticas energéticas nacionales”, aduce el informe.
En diálogo con Climate Tracker, la ministra de Energía de Argentina, Flavia Royon, admite que “el rol de la hidroeléctrica es prioritario y estratégico, porque más allá de la energía limpia que produce la hidroeléctrica, también hoy es fundamental por un tema de gestión del agua. Hoy la gestión del agua es un tema preponderante en la agenda y la energía hidroeléctrica también te posibilita eso”.
El gobierno argentino espera que la primera turbina inicie operaciones en el primer trimestre de 2025, al tiempo que las comunidades afectadas esperan la resolución de las obras y que se les respeten sus peticiones, consagradas en la Justicia.
Ante la consulta sobre si puede llegar a ser una complicación para el futuro del proyecto tener sequías impensadas en Patagonia, la ministra respondió que «en cambio climático, así como hay años de sequía, hay años de inundaciones, entonces lo importante acá es justamente la gestión del recurso».
Es justamente ese recurso, el agua, el que está más que nunca en discusión, a la sombra de la transición energética. Un recurso que para los indígenas es un ser viviente, al igual que la tierra.
Sea en Jujuy, donde le acecha el litio; en la Patagonia norte, con los pozos y las secas de Vaca Muerta; o cerca del fin del mundo, donde navegan los espíritus de nuestros ancestros.
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Novedosa herramienta financiera ambiental en Misiones

 


Tarjeta Verde: de qué se trata la iniciativa que busca financiar proyectos contra el Cambio Climático en Misiones

Fecha de Publicación
: 02/09/2023
Fuente: Portal valorambiental.com.ar
Provincia/Región: Misiones


El Ministerio de Cambio Climático de Misiones dio a conocer una iniciativa que apunta al desarrollo de proyectos sustentables: la tarjeta verde. La misma está destinada a financiar medidas contra el cambio climático y a atraer inversiones hacia la provincia.
En colaboración con el Fondo de Crédito de Misiones, la iniciativa se encamina a establecer una «Banca Verde Sudamericana». Esta entidad financiera aspira a financiar iniciativas que combatan el cambio climático y protejan la biodiversidad, ofreciendo respaldo a emprendedores, empresas y pymes. La estrategia también apunta a captar inversores y compañías con objetivos ecológicos.
A diferencia de los bancos tradicionales, las instituciones bancarias verdes canalizan sus recursos hacia proyectos con impacto positivo en el medio ambiente y la sociedad. Este enfoque contribuye de manera crucial a una economía sostenible y resistente.
La revolucionaria Banca Verde Sudamericana, representa una institución financiera sin igual en la región. Su principal misión es estimular la financiación ecológica y el desarrollo sostenible en Sudamérica.
La base financiera de esta iniciativa se sustenta en las reservas naturales, específicamente en el excedente de más de 4,5 millones de toneladas anuales de CO2 capturadas por la selva misionera. Esta captura se convierte en un activo clave y una reserva para establecer la Banca Verde Sudamericana.
En el contexto del mercado de bonos de carbono y mecanismos de compensación de emisiones, el excedente de CO2 de la selva misionera posee un gran valor financiero. Estas toneladas de CO2 son certificables y comercializables en el mercado voluntario de carbono, generando ingresos que refuerzan la capacidad operativa de la Banca Verde Sudamericana y respaldan proyectos de conservación y desarrollo sostenible. Además, el potencial de crecimiento del excedente de CO2 de la selva misionera es significativo, incrementándose con la adecuada gestión y conservación del ecosistema.
La Banca Verde Sudamericana, mediante la emisión y comercialización de certificados de reducción de emisiones de CO2, generará ingresos destinados a financiar proyectos sostenibles en la región.
Su enfoque central radica en financiar proyectos de energías renovables, eficiencia energética, transporte sostenible, agricultura sostenible, construcción ecológica y conservación ambiental. La emisión de certificados de reducción de emisiones impulsará la adopción de soluciones de bajo carbono y la mitigación del cambio climático en la región.
Además de su financiamiento interno, el banco buscará colaboraciones a nivel regional y global para expandirse y fomentar el desarrollo sostenible. Asociarse con instituciones financieras verdes en otros continentes promoverá la cooperación internacional en la financiación de proyectos sustentables.
La Banca Verde Sudamericana operará en los mercados de activos ambientales, aprovechando oportunidades en el Mercado Voluntario de Chicago y el mercado de cumplimiento de la UE. Estos mercados ofrecen el marco adecuado para la transacción de certificados de reducción de emisiones, permitiendo que el banco monetice los beneficios ecológicos generados por soluciones basadas en la naturaleza y tecnología implementadas en la región. Al participar en estos mercados, la Banca Verde Sudamericana fortalecerá su capacidad financiera y su contribución al desarrollo sostenible.
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Argentina puede sufir escasez de agua

 


Cambio climático: cómo prevenir la escasez de agua y gestionar las sequías

Fecha de Publicación
: 23/08/2023
Fuente: Ambito
Provincia/Región: Nacional


En Argentina no desconocemos las problemáticas de una sequía. El flagelo a la cosecha del sector agropecuario entre fines del año pasado y comienzos de este 2023 derivó en una crisis económica seria para el país. A su vez, las sequías tienen sus coletazos directos en el acceso al agua potable. En lo que respecta a este particular, durante el verano se agravaron las falencias en la distribución del recurso producto de dicha sequía. Los expertos hablan de que no se puede obviar, a esta altura, la relación de estos azotes naturales con el cambio climático.
Según un informe de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), los fenómenos meteorológicos extremos y los choques climáticos se están agravando en América Latina y el Caribe: en los últimos 30 años, las temperaturas se elevaron a un promedio de 0,2 ºC por década, la tasa más alta de la que se tiene constancia.
A su vez, a medida que se aceleran la tendencia al calentamiento a largo plazo y el aumento de nivel del mar, se pondrá cada vez más de relieve un círculo vicioso con impactos negativos sobre los países y las comunidades locales. El estudio concluye que la sequía prolongada derivó en un descenso de la producción hidroeléctrica en amplias zonas de América del Sur, que junto al aumento del nivel del mar, una gran parte de la población que vive en zonas costeras terminó con problemas de escasez de agua, ya que contamina los acuíferos de agua dulce y erosiona las costas.
Uruguay, y especialmente Montevideo, es el caso actual más emblemático de cómo el cambio climático puede producir una sequía atroz que no tiene precedentes en los últimos 70 años. Los niveles extremadamente bajos que alcanzaron las reservas de Paso Severino, la principal fuente de agua dulce para la zona más poblada del país vecino, mantiene en alerta a toda la región.
De vigencia actual, la crisis de Uruguay es parte de un panorama histórico mayor en cuanto a la problemática de la escasez del recurso hídrico. En términos globales, un 26 por ciento de la población no tiene acceso a agua potable, según consignó la Organización de las Naciones Unidas en su más reciente Informe Mundial sobre el Desarrollo de Recursos Hídricos.
Además, la ONU da cuenta de otras cifras, por caso, que 1,4 millones de personas mueren anualmente, al tiempo que otras 74 millones verán acortada su vida a causa de enfermedades vinculadas con agua, saneamiento e higiene deficientes, empujadas indirectamente por fenómenos naturales como sequías o temperaturas extremas.

El impacto de fenómenos climáticos en Argentina
Evidentemente, nunca se puede estar preparado 100% para desastres naturales. Algunas de las dificultades que afronta la región provienen del impacto de “La Niña”, una anomalía climática que tiene lugar desde hace tres años, y que no solo ha afectado a Uruguay, también algunas provincias del norte argentino sufren sus coletazos.
“La Niña” es un patrón climático relacionado con una reducción en la temperatura superficial del mar en el Pacífico que influye en el clima de todo el mundo que afectó la regularidad de las lluvias. La precipitación pluvial total en la zona central de la Argentina fue la más baja registrada en más de medio siglo, por lo que no solo la producción de cultivos cayó drásticamente en regiones agrícolas, el efecto llevó a que algunas provincias norteñas declararon emergencias hídricas en varias áreas.
En conjunto, el cambio climático está provocando escasez de agua. Además, en el norte argentino se añaden factores como temperaturas extremas y focos de incendio que comúnmente agravan el drama de una sequía. En pos de llevar una solución a sus habitantes, actualmente, en las zonas afectadas, se están construyendo grandes reservorios para subsanar los desafíos que plantea la falta del recurso. Tal es el caso de Laguna Yema, en Formosa, donde se puso en marcha un sistema de bombeo artificial para evitar que se seque el Canal El Aibal.
Néstor Álvarez, subadministrador del Ente Nacional de Obras Hídricas y Saneamiento (ENOHSA), organismo que se encuentra a cargo de estos proyectos, sostiene que “el agua potable inocua, la gestión sostenible, el saneamiento y la higiene, y el desarrollo de los recursos hídricos son elementos indispensables para garantizar la seguridad hídrica a nivel global”.
Con esta perspectiva, en Formosa también se avanza con la ejecución de tres obras de provisión de agua, entre ellas el acueducto de agua cruda desde el río Paraguay a Misión Laishí y Mayor Villafañe.
A éste, se suma otro acueducto que llevará agua a Subteniente Perín, Lavalle y Riacho de Oro, así como la construcción de otra planta de tratamiento en esta última localidad, entre otras mejoras que completará el ENOHSA para dar acceso al agua segura a más de 10 mil personas en la provincia.
“Hoy en día, a nivel país, se está trabajando en 1.051 obras de agua y saneamiento”, detalla Álvarez al respecto. Y concluye: “Esperamos que ese número se incremente considerablemente hacia fines del 2023, para alcanzar la ampliación efectiva de cobertura de agua y saneamiento, que es el objetivo que se tiene que plantear el Estado como garante de estos derechos que corresponden a la totalidad de la población”.
En esta línea de acción, el ENOHSA totaliza 63 obras en curso en el norte argentino, con una inversión superior a los 31 millones de pesos y en beneficio de más de 2 millones de personas. Los trabajos se dividen de la siguiente manera: un proyecto en Jujuy, 24 en Formosa y 37 en Salta. Entre todos, generaron más de 2.200 puestos de trabajo.
En cuanto a Jujuy, la obra más destacada es la planta potabilizadora Libertador General San Martín, mientras que en Salta sobresale el reemplazo del acueducto de la planta potabilizadora 1° Etapa de Tartagal. Por último, en Formosa las tareas más importantes se realizan en torno a la emergencia hídrica por bajantes ríos Paraná - Paraguay y Bermejo Resistencia.
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Inundación en el AMBA es una muestra de lo que viene

 


Las lluvias extremas que azotaron el AMBA llegaron para quedarse de la mano de El Niño

Fecha de Publicación: 21/08/2023
Fuente: Télam
Provincia/Región: AMBA


 Luego de las lluvias extremas que afectaron el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), especialistas en meteorología advirtieron que podría ser "una primera manifestación" del fenómeno de El Niño que promueve mayores precipitaciones durante la primavera y explicaron que también el cambio climático provocado por las actividades humanas incrementa la frecuencia e intensidad de las precipitaciones.
"El episodio de lluvias intensas del jueves fue una combinación, lamentablemente, de eventos desafortunados", indicó a Télam Carolina Vera, doctora en Ciencias de la Atmósfera e investigadora del Conicet, y preciso que "el desarrollo de tormentas convectivas, aquellas tormentas en que llueve mucho en poco tiempo, estuvo promovido por el avance de un sistema de baja presión".
 "También favoreció el viento del sudeste que, en el caso de la Ciudad de Buenos Aires y sus alrededores, impide que el agua de la lluvia desagüe hacia el río y, por el contrario, que el agua del río entre", explicó la profesora emérita de la Universidad de Buenos Aires (UBA) y exvicepresidenta del Grupo de Trabajo I del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) de Naciones Unidas.
Además, Vera señaló que "como estamos en un invierno ya influenciado por El Niño, actualmente este fenómeno está promoviendo presiones más bajas que lo normal en el centro-oeste de nuestro país y, por ende, este tipo de situaciones pueden verse más favorecidas".
El Niño es un fenómeno natural caracterizado por el aumento de las temperaturas del océano en la parte central y oriental del Pacífico ecuatorial y trae asociados cambios en la atmósfera.
Durante la primavera y el verano, la región noreste argentino tiende a registrar precipitaciones superiores a las normales durante una fase El Niño, según datos del Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
Si bien las lluvias que ocasiona este fenómeno son más características en septiembre, octubre y noviembre, para la investigadora Matilde Rusticucci las precipitaciones históricas de los últimos días "podrían ser una primera manifestación de El Niño".
 El jueves, en la ciudad de La Plata, se registró la caída de unos 155 milímetros de agua en 24 horas, un fenómeno climático histórico del que no se tiene constancia para el mes de agosto durante los últimos 60 años y que dejó como consecuencia más de mil familias afectadas.
También se batieron récords de lluvia acumulada en 24 horas para el mes de agosto en Aeroparque, con 112 milímetros y en la ciudad de San Fernando, al norte del conurbano bonaerense con 117 milímetros, informó el SMN.
"Llovió en poco tiempo muy fuerte. Fue una lluvia extrema", apuntó a Télam Rusticucci, doctora en Ciencias de la Atmósfera, investigadora del Conicet y profesora de la UBA.
A su vez, precisó que la intensidad de las lluvias se explica porque estábamos dentro de una masa de aire muy caliente: "veníamos con temperaturas muy altas y con un centro de baja presión. Mucha temperatura y mucha humedad provocan estas lluvias extremas que estaban pronosticadas y se emitieron alertas".
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Crisis climática provoca un retroceso del glaciar Perito Moreno


Detectaron un alarmante retroceso del glaciar Perito Moreno y estudian si es una tendencia irreversible

Fecha de Publicación
: 12/08/2023
Fuente: InfoBae
Provincia/Región: Santa Cruz


Como consecuencia del cambio climático, un grupo científico del CONICET halló una pérdida de 700 metros de hielo en los márgenes en los últimos dos años. Continúan estudiando si es un proceso definitivo
Uno de los íconos turísticos de la Argentina muestra algunos cambios preocupantes: un grupo de científicos estudia la pérdida de hielo que se registra en el glaciar Perito Moreno, en Santa Cruz, desde hace cinco años. A pesar de que aún los datos no son suficientes para saber si se trata de una tendencia irreversible, los 350 metros de hielo por año que han perdido los márgenes ponen la lupa en uno de los cuerpos de hielo más estables y equilibrados del planeta.
“Relacionar el cambio climático con el retroceso de los glaciares no es una novedad. Pero el comportamiento que se está registrando desde 2016 en el icónico Perito Moreno es una noticia no sólo para la comunidad glaciológica sino para el público general. Hasta el año pasado todo lo publicado sobre el glaciar mostraba que se mantenía neutro o que estaba cerca del equilibrio (es decir que ganaba la misma masa que perdía, según la estacionalidad)”, indicó a Infobae Lucas Ruiz, glaciólogo investigador del Instituto Argentino de Nivología y Glaciología de la Argentina (Ianigla) y del Conicet.
“Sin embargo, en 2016 mostró un período de cambio de masa en el que la acumulación no compensa la pérdida. Si a eso le sumamos el desprendimiento de témpanos, es notorio el cambio”, sumó Ruiz.
Los cambios, registrados con imágenes satelitales, en colaboración con otros científicos, entre ellos Etienne Bertier, glaciólogo de la Universidad de Toulouse, muestran un retroceso en los márgenes del glaciar de unos 350 metros por año.
La investigación es parte de un convenio entre el Conicet y la empresa estatal Integración Energética Argentina S.A. para obtener fundamentos científicos del impacto que tendrán la construcción y el funcionamiento de dos represas hidroeléctricas en Santa Cruz. El objetivo es ampliar la información sobre los cambios recientes en el Perito Moreno y comprender la variabilidad hidroclimática de la cuenca del río Santa Cruz.
“Venimos analizando los mapas con detenimiento desde 2021. Una de las primeras cosas que nos advirtieron los guías de montaña es que en la margen Norte el glaciar no era el que acostumbraban ver. Analizamos ese sector en particular y se notaba un incipiente cambio en el lugar. Todos los meses tenemos una buena imagen que nos permite monitorear cómo está el frente en su totalidad, no solo en la zona de la pasarela, sino en toda su extensión. Eso nos permite entender si el frente avanzó o retrocedió para entender cuánta masa perdió y los procesos. Nosotros medimos dos veces al año cuánta nieve hay en la zona de acumulación y cuánto hielo se derritió en la superficie en la parte baja del glaciar”, agregó Ruiz.
En distintas expediciones que realizó el científico junto a colegas y guardaparques, se observó que el glaciar retrocedió 700 metros en el margen norte del Canal de los Témpanos durante los últimos dos años, lugar opuesto a donde están las pasarelas. “Es un retroceso fuerte. Si se calcula aproximadamente cuánto se retrajo el glaciar entre 1998 y 2019, podemos decir que fueron 1 o dos metros por año. Además, aumentó la cantidad de témpanos que se desprenden y está ocurriendo un comportamiento similar en la parte sur del Brazo Rico del Lago Argentino”, detalló.
El frente del ventisquero no ha sufrido estos cambios, aclaró el científico argentino: “El frente todavía sigue en contacto con la península de Magallanes. Si hoy medimos cómo cambió desde 2018, es prácticamente nada. Como sigue en contacto con la península no podemos hablar aún de retroceso como pasó en el glaciar Upsala o en el Biedma o en tantos otros. El frente todavía no ha perdido la posición de equilibrio que encontró a principios del siglo pasado”.

La hipótesis de los expertos
Toda esta información obtenida significa un desafío para los investigadores: intentar determinar si ha comenzado la retracción del glaciar. “Nuestra hipótesis de trabajo a futuro es si el Perito Moreno comenzó una nueva etapa de retroceso, no asociada al desprendimiento de témpanos, sino a una disminución de acumulación de masa en la parte alta asociada a un aumento de la temperatura en los últimos veranos y a la falta de precipitación causadas el cambio climático”, explicó Ruiz. El paper de investigación debe ser revisado aún por sus pares (peer review), pero el consenso científico es dar a conocer la información al público en general mientras se desarrolla la investigación.
“Este es un trabajo asociado a entender mejor qué es lo que está pasando con los glaciares no sólo para la comunidad científica, sino para el público en general. Entendemos que el Perito Moreno es un super atractivo turístico que también puede ser una muestra para la toma de conciencia acerca del cambio climático de lo que pasa con otros 16.000 glaciares en el país, que desde hace 100 años están retrocediendo por culpa de la quema de combustibles fósiles”, sostuvo Ruiz quien aseguró que “estamos viviendo un contexto de cambio climático en el que es más probable que tarde o temprano todos los glaciares van a retroceder, porque dependen del clima”
¿Qué pasará con el espectáculo de los rompimientos en este nuevo contexto? “El último puente importante que se formó por su avance contra la península fue en el 2018. Subió sobre el nivel del Brazo Rico del Lago Argentino más de 9 metros. Los rompimientos de la década de 2010 no habían llegado hasta esa altura. Luego tuvo cierres más pequeños. Y en 2022, cerró una semana, producto de este avance estacional. Es probable que vuelva a hacer un cierre pequeño, realmente necesita tener ese frente todo constituido que tenía en 2018. Cabe aclarar que el Perito Moreno va a ser un magnífico glaciar, incluso si retrocede un par de kilómetros, recordemos que tiene 260 kilómetros”, dijo Ruiz.
El imponente ventisquero está en el área que cubre el Parque Nacional Los Glaciares, al sudoeste de la provincia de Santa Cruz, en el límite con Chile. Fue creado en 1937 y declarado Sitio de Patrimonio Mundial por la UNESCO en 1981. Se ubica dentro de lo que se conoce como el Campo de Hielo Patagónico Sur y es la tercera extensión de hielos continentales más grande del planeta, luego de la Antártida y Groenlandia. Allí hay más de 45 glaciares que oscilan entre los 200 y los 1.300 kilómetros cuadrados.
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¿Qué ha hecho Argentina para combatir el cambio climático?

 


¿Qué ha hecho Argentina para combatir el cambio climático?

Fecha de Publicación
: 09/08/2023
Fuente: Portal notaalpie.com.ar
Provincia/Región: Nacional


El Plan Nacional de Adaptación y Mitigación busca limitar las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) ¿Cuánto dinero se invertirá en materia ambiental?
Frente al enorme desafío mundial de tomar acciones ante el cambio climático, Argentina presentó en la 27° Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2022 (COP 27) un plan de acción. En ese sentido, la presentación realizada en Egipto, contiene un conjunto de medidas e instrumentos a ser implementadas desde diciembre del 2022 hasta el año 2030.
Con el objeto de llevar adelante buenas prácticas sustentables y eficientes, el desafío mundial es limitar las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI). Allí, es donde aparecen medidas que se adapten a los territorios, ecosistemas, sectores y comunidades vulnerables.
El calentamiento global es un tema de agenda que mantiene en vilo a todo el mundo. Con un plan al 2030, el compromiso de todos los países para tomar acciones concretas demuestra el interés y el miedo frente a los sucesos que vienen apareciendo.
Desprendimientos en la Antártida, calores extremos, sequías y heladas extremas son algunas de las consecuencias que viene atravesando la naturaleza. Desde Nota al Pie analizaremos la inversión que nuestro país propuso en su plan frente al calentamiento global.
En el caso de Argentina, la presentación estuvo a cargo del Presidente Alberto Fernández. En ese contexto, se presentó el “Plan Nacional de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático al 2030” que expresa la necesidad del país de hacer frente a los desafíos ambientales.
Es por ello que reconoce la necesidad de transitar hacia una economía más verde y sostenible. Por esta Razón, se estableció una serie de objetivos claros y ambiciosos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en los próximos años.

El desafío argentino frente al cambio climático
El plan que presentó nuestro país para cumplimentar con la Ley 27520 sobre Presupuestos Mínimos de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático Global, tiene varias aristas.
Entre ellas se destacan las medidas de adaptación (para prevenir, atenuar o minimizar los daños o impactos asociados al cambio climático) y, las medidas de mitigación (orientadas a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y potenciar, mantener, crear y mejorar sumideros de carbono).
De la misma forma, también se contemplan acciones de pérdidas y daños (costos residuales que no pueden ser evitados por las vías de la adaptación y mitigación).
Cada acción tiene un marco metodológico que comprende una serie de procesos planificados con el fin de lograr el objetivo al 2030. En ese sentido, Argentina se comprometió a no exceder la emisión neta de 359 MtCO2 en el año 2030.
Bajo la misma línea, para llevar a cabo el Plan Nacional de Adaptación y Mitigación al Cambio Climático (PNAyMCC) se dividió en seis medidas estratégicas.
Entre ellas se encuentra la de conservación de la biodiversidad y bienes comunes; gestión sostenible de sistemas alimentarios y bosques; movilidad sostenible; territorios sostenibles y resilientes; transición energética y transición productiva.
Si bien cada acción concreta tiene un costo determinado ¿Cuánto le costará a la Argentina poner en práctica las medidas contra el cambio climático?

El precio del cambio climático
Con las seis medidas estratégicas mencionadas anteriormente, es necesario que las mismas se financien. En ese sentido, el costo para llevar a cabo las 169 medidas dentro de las seis líneas estratégicas es de un total de 296.594, 25 millones de dólares.
Para la línea de “Conservación de la biodiversidad y bienes comunes” se destinará un total de USD 26.062,10 millones. La misma estará orientado a fortalecer y ampliar programas en el marco de políticas públicas vigentes. También, se crearán o ampliarán áreas protegidas como también se abordarán las amenazas como incendios, invasiones biológicas y degradación de tierras.
La línea de “Gestión sostenible de sistemas alimentarios y bosques” tendrá como objetivo la restauración de bosques, la prevención de incendios en bosques nativos y el fomento de prácticas productivas sostenibles.
También, el objetivo será potenciar el consumo de bioinsumos de origen agropecuario, fortalecer organizaciones productivas y crear un registro de productores para la regularización de la tierra, entre otras. Para ello, se destinará un total de USD 6.991,09 Millones.
En cuanto a la “Movilidad sostenible”, la tarea se centrará en el compromiso de sectores públicos como privados. Allí, dichos actores tendrán la tarea de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero que genera la actividad. Para ello, se destinará un total de USD 43.747,49 millones.
De la misma manera, “Territorios sostenibles y resilientes” tendrá una inversión total de USD 117.745,96 Millones. Dentro de los costos se contempla el desarrollo de herramientas e infraestructuras para ciudades.
También, se mejorará la gestión de recursos hídricos, se fortalecerá la planificación del territorio y se consolidarán viviendas sostenibles.

Hacia una transición energética contra el calentamiento global
La Fundación Ambiente y Recursos naturales lanzó un comunicado sobre el calentamiento global y el desafío argentino. La co-coordinadora del área de Política Climática de la fundación, Catalina Gonda advirtió que “En un contexto global de crisis climática que requiere una verdadera transición en dirección contraria […] resulta incierto cómo la expansión de la frontera hidrocarburífera se inserta en una verdadera transformación integral del sector energético”.
“Es la primera vez que un plan nacional vinculado al cambio climático reconoce la importancia de la agroecología, desde sus múltiples dimensiones, para la transformación y resiliencia de los agro ecosistemas extensivos e intensivos”, afirmó Jazmín Rocco Predassi, co-coordinadora del área de Política Climática.
Por otro lado, una de las metas de adaptación que tiene el país es la de construir capacidades, fortalecer la resiliencia y disminuir la vulnerabilidad frente al cambio climático.
Ahora bien, para el desarrollo y el cumplimiento de las medidas, los fondos derivan, en su mayor parte, del tesoro nacional. Esto permitirá ejecutar los planes y los programas de asistencia y apoyo.
Si bien el mundo se está adaptando a nuevas medidas sustentables para combatir el cambio climático, Argentina se propuso varias metas para llegar al 2030. Si bien, el financiamiento no solo proveerá de Tesoro también se maneja la posibilidad de pedir un financiamiento internacional.
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Alertan sobre 'crisis de habitabilidad' por el cambio climático

 


Cómo enfrentar la "crisis de habitabilidad" que ya genera el cambio climático

Fecha de Publicación
: 08/08/2023
Fuente: Télam
Provincia/Región: Nacional


En medio de las olas de calor extremas que afectan al Hemisferio Norte y las temperatura de verano que registró la Argentina esta semana, especialistas advirtieron que el cambio climático genera una "crisis de habitabilidad" y destacaron que deben tomarse medidas urgentes para evitar que más personas se conviertan en "refugiados climáticos", además de incorporar estrategias de arquitectura sustentable.
Entre ellas, mencionaron el diseño bioclimático y contemplar hábitats para la emergencia, como los "centros de enfriamiento" que ya funcionan en algunos países.
Frente a la tendencia global que indica que los eventos meteorológicos extremos como las olas de calor serán cada vez más frecuentes e intensas por la influencia del cambio climático provocado por actividades humanas, surgen alternativas para mantener las viviendas más frescas.
En dialogo con Télam, Adriana Miceli, arquitecta y especialista en gestión ambiental, aseguró que se puede lograr una "vivienda saludable y confortable con estrategias simples" como ventilar, instalar aleros y toldos para frenar el sol, colocar burletes en las ventanas que tapen la entrada de frío o calor, construir con paredes gruesas y utilizar el diseño bioclimático que tiene en cuenta la trayectoria solar sin implicar mayores costos.
"Es lo que se hacía antes de la Revolución Industrial, cuando comenzó una era de las maravillas de la tecnología que aplastó a las técnicas anteriores y negó a la naturaleza", dijo Miceli, directora del posgrado en Arquitectura Sustentable de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo de la Universidad de Buenos Aires (UBA).
En este sentido, la especialista señaló que "la arquitectura actual se maravilla de hacer hormigón y mucho vidrio sin tener en cuenta a la naturaleza".
En cambio, la arquitectura sustentable plantea traer a la actualidad "técnicas más antiguas" que se usaban en casas pequeñas, pero que ahora se pueden aplicar en edificios agregándole tecnología con criterios de eficiencia energética.
"Las paredes de hoy en la ciudad de Buenos Aires son más finitas y menos eficientes que las de los edificios de los años 80. Si bien antes tampoco eran súper eficientes, al calor o al frío le costaba más pasar porque eran más anchas", apuntó Miceli.
Por su parte, María Inés Carabajal, doctora en Antropología y especialista en cambio climático, aseguró a Télam que "las ciudades necesitan empezar a adaptarse a estos eventos que son más intensos y frecuentes que en el pasado".
Un estudio publicado en mayo en la revista científica Nature Sustainability advirtió que el calentamiento global expulsará a miles de millones de personas del "nicho climático humano", que refiere a las zonas del planeta que aún son habitables.
Según la investigación, cerca del 9% de la población mundial, 600 millones de personas, ya fueron expulsadas por el cambio climático y, para finales de siglo, las "políticas actuales que conducen a un calentamiento global de alrededor de los 2,7 grados" podrían dejar a un tercio del mundo, unas 2.000 millones de personas, fuera del nicho con temperaturas anuales promedio superiores a 29 grados.

Relacionadas
"El cambio climático es un proceso que ya está entre nosotros, no es que hay que pensarlo a futuro", advirtió Carabajal, y remarcó que los fenómenos extremos como olas de calor e inundaciones ponen "en peligro la salud de las personas y las formas de vida".
 Según la investigadora del Conicet, esto expone una "crisis de habitabilidad que se ve no sólo a nivel social, sino también en los sistemas naturales" y conlleva problemáticas como la extinción masiva de especies.
"Está tomando más relevancia el concepto de antropoceno que se utiliza para explicar que los seres humanos nos hemos convertido en una de las fuerzas de transformación a escala geológica y planetaria como podrían ser las fuerzas de la naturaleza como la erupción de un volcán y su impacto", detalló la antropóloga miembro de la Subsecretaría de Políticas Ambientales de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA.

Temperaturas extremas
Agosto comenzó con un "calor inusual" en varios países de América del Sur, como Argentina, Brasil, Chile y Uruguay, según reportó la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
El norte y centro de nuestro país alcanzó temperaturas de hasta 38 grados y la ciudad de Buenos Aires tuvo el martes pasado el comienzo de agosto más cálido de los últimos 117 años, con 30,1 grados, según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
En tanto, Europa, América del Norte y China experimentaron en julio temperaturas récord de más de 40 y 50 grados que hubieran sido "casi imposibles" sin la existencia del cambio climático, según el último estudio de atribución del clima de la red World Weather Attribution (WWA).
Por las temperaturas extremas, en EEUU y España se habilitaron "centros de enfriamiento" para que los grupos más vulnerables puedan refugiarse y evitar enfermedades o muertes relacionadas con el calor.
Durante julio, en Nueva York funcionaron más de 500 "centros de enfriamiento" con aire acondicionado calificados como "lugares seguros", que suelen ser edificios públicos como iglesias, centros de visitantes, bibliotecas o escuelas.
Sin embargo, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EEUU, estos centros tienen limitaciones por problemas de accesibilidad, el estigma que los rodea y las dificultades que acompañan dejar el propio hogar.
Sobre esta estrategia, Miceli sostuvo que es algo "muy loco, impensado en otro momento" y dijo que "no es la solución al problema de esa persona, pero es un alivio como hábitat de emergencia".
Por su parte, Carabajal aseguró que "las olas de calor impactan a todas las personas, pero más a los niños, adultos y a las personas con mayores niveles de vulnerabilidad que viven en asentamientos urbanos".
Si bien desde el SMN informaron a Télam que todavía no se pueden realizar proyecciones sobre si las temperaturas infernales del hemisferio norte llegarán a la Argentina el próximo verano, las especialistas consultadas coincidieron que ante las tendencias globales es necesario prepararse para reducir los impactos de estos eventos extremos.
"Tenemos que hacer nuestros esfuerzos de transiciones sostenibles para pensar un futuro más habitable, pero a su vez, esa responsabilidad mayor debe recaer en los países que más contribuyeron a la crisis climática. Los países del sur global no tienen la misma responsabilidad que Europa y EEUU", apuntó Carabajal.
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El cambio climático devoró un glaciar y ahora es lago

 



Cambio climático en Argentina: la historia del lago que nació porque se derritió un glaciar

Fecha de Publicación
: 01/08/2023
Fuente: Clarin
Provincia/Región: Río Negro


En esta historia todo es evidencia y nada es hipótesis. Es pura consecuencia. Donde ahora se ve la superficie espejada de un lago, había antes un glaciar. Un glaciar cubierto por sedimento, que tenía la forma de una escarpada cordillera terrosa. Se llamaba Ventisquero Negro justamente por esa tonalidad. Los turistas que viajaban al Parque Nacional Nahuel Huapi se desplazaban 90 kilómetros para visitarlo. Les parecía asombroso que un glaciar fuera de color negro. Pero no está más. Desapareció. El cambio climático lo devoró.
Es un hallazgo notable de científicos del CONICET, pero sobre todo un elemento que muestra la velocidad con que los ecosistemas están viéndose afectados por el calentamiento global. En un escenario dramático de olas de calor y sequías, en el mes de los récords de temperatura planetarios, la historia del ventisquero negro habla acerca de cómo ningún país puede mantenerse a salvo en la llamada “era de la ebullición”, según definió esta semana el secretario general de la ONU, Antoni Gutiérrez.
Nadie permanece al margen de ese nuevo enemigo global concebido por el afán de progreso de la humanidad, un “Frankenstein” que jaquea de fuego a los europeos y que derrite al mismo tiempo el hielo de la Antártida y los glaciares de Bariloche. La primera fotografía que ilustra este artículo es del verano de 1942. En un playón de estacionamiento se ven varios colectivos que han trasladado viajeros hasta la base misma de la lengua de hielo del Ventisquero Negro. Son los pies del Cerro Tronador, en la zona de Pampa Linda, corazón del Parque Nacional. Es muy nítido que las llamadas “morenas glaciarias” (especie de lomadas) llegan hasta los choferes que posan para la toma.
Para 2009, las formaciones ya no están. En junio de ese año, las lluvias incesantes y la dinámica propia del glaciar provocaron un aluvión descomunal. El casquete de hielo se fracturó, hubo una avalancha que alcanzó zonas pobladas, el lago experimentó primero un vaciamiento y el frente del glaciar se “reacomodó en retroceso”: comenzó una suerte de repliegue. Lo que se ve, entonces, es una fragmentación de pequeños témpanos esparcidos. Pero ya no las inolvidables morenas glaciarias que hasta la década del ’90 los viajeros podían apreciar de cerca.
“El retroceso es muy claro”, dice Beatriz Modenuti, investigadora superior del Conicet. Lidera uno de los equipos de biólogos que lleva adelante investigaciones en la zona. “Las condiciones climáticas fueron cambiando a través de los años. Menos cantidad de precipitaciones y mayor temperatura, en primer lugar. La isoterma del Monte Tronador dejó de estar en 0°, que es el indicador de nieve, y al estar más elevada el ventisquero fue perdiendo capacidad de acumulación de nieve”.
Modenutti es miembro del Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Medioambiente (Inibioma) de la Universidad Nacional del Comahue: "En las regiones montañosas, el signo más evidente del acelere que tiene el cambio climático es la pérdida alarmante de glaciares, que lleva a la pérdida de un ecosistema particular, con un trastorno enorme para la biodiversidad. Los cambios en el glaciar impactan directamente en las condiciones de luz y nutrientes para los organismos biológicos que investigamos", dice.
“Lo que sucede en este momento es que, por efecto del hombre y de países como Estados Unidos y China, se emiten gases de tipo invernadero que provocan este calentamiento que actualmente sufre el planeta. Estamos en un período donde el cambio se ha acelerado y realmente es muy alarmante”, avisa Modenutti. “Sin duda son los gobiernos los que tienen que tomar las medidas más importantes a nivel global”, cierra la experta.
El Instituto Argentino de Nivoligía y Glaciares estudia lo que ocurre en Ventisquero Negro desde 2013. “Hoy en día es un glaciar muy grande en volumen. Tiene todavía mucha reserva de hielo. Pero también es uno de los que más masa está perdiendo”, dice Lucas Ruiz, glaciólogo del Conicet y miembro del IANIGLA.
“Los glaciares son muy sensibles al clima. Dependen del clima. El hielo, el agua, la nieve. Cuanto se derrite un glaciar tiene que ver con la temperatura. Cuánta nieve acumula un glaciar tiene que ver con las lluvias. Es así cómo va modificando su volumen. Uno puede explicar lo que está pasando con los glaciares del Monte Tronador a partir de lo que pasa con el clima en la zona. En los últimos diez años, la pérdida de masa aumentó por veranos muy calurosos. El último verano, de 2022/2023 fue de los más calurosos de la historia en la Patagonia”, revela.
Los científicos explican que para que haya un cambio en los glaciares, tiene que haber siempre un indicio climático. Un disparador. Si eso no pasa, el glaciar no avanza ni retrocede. Ruiz estudió el caso del Perito Moreno, en Santa Cruz. En 2015, el glaciar más famoso de la Argentina, empezó un período de pérdida de masa. “Producto de eso, varios años después el glaciar respondió generando un retroceso de casi 700 metros”, explica Ruiz.
Pero en el caso del Tronador, por las elevadas temperaturas, todo puede tornarse más dramático. Además de ser un sitio bellísimo, el Tronador es una de las montañas más altas de la región. Sus picos son una tentación para los andinistas. Es el lugar de la Patagonia Norte donde pueden encontrarse más cantidad de glaciares. La montaña condensa una superficie de 60 kilómetros de hielo, con glaciares de todo tipo en diferentes orientaciones. Sus nombres son célebres: Manso, Castaño Overo, Frías, Alerce, Ventisquero Negro.
“Ha estado sin cambios durante mucho tiempo -explica Ruiz-. Entre los años 1600 y 1850 tuvo lugar el último gran avance de los glaciares en el planeta. Es una era conocida como la pequeña edad de hielo. Desde entonces, el Ventisquero Negro prácticamente no acusó cambios. Donde está el mirador y paran los turistas, hasta el año 2000 se mantuvo igual. Pero a partir de ahí, todo comienza a cambiar”.
Ruiz enumera hitos. En 2005 se empieza a formar el lago. Primero fueron dos laguitos. Luego uno más grande. Cada vez más profundo. En junio de 2009 ocurre el gran alud, que modifica las condiciones de la zona. “Subió el nivel del lago y los témpanos fueron desplazados en avalancha hacia la embocadura del río. Diez millones de metros cúbicos. A los pocos días, el lago parecía como vacío. Pero el glaciar volvió a generar témpanos y en simultáneo aceleró el retroceso, creció la superficie del lago. Hoy el glaciar es mucho más chico. Está perdiendo masa”, dice Ruiz y advierte: “El peligro de que haya un nuevo aluvión es algo que hay que tener en cuenta. Las autoridades de Parques y los guías deben saber que esto puede volver a pasar”.
Mientras tanto, el turismo sigue. Los viajeros se contentan con el espejo de agua de 70 metros de profundidad atravesado por vientos todavía fríos. Toman fotografías ajenos al drama ambiental y regresan, muchos de ellos, sin advertir que la naturaleza se está modificando, peligrosamente, a pasos agigantados.  
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El FMI reconoce el impacto de la crísis climática en el país

 


El FMI destacó el impacto del cambio climático en Argentina

Fecha de Publicación
: 28/07/2023
Fuente: La Mañana de Neuquén - Más Energía
Provincia/Región: Nacional


Destacó que la crisis financiera se agravó por la feroz sequía que ha reducido las exportaciones agrícolas en unos 20.000 millones de dólares.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) instó hoy a coordinar mejor los esfuerzos para hacer frente a las causas del cambio climático, advirtiendo de que las condiciones meteorológicas extremas plantean riesgos importantes para los países de todo el mundo, especialmente para las economías en desarrollo, ya de por sí muy endeudadas.
El Economista Jefe del FMI, Pierre-Olivier Gourinchas, afirmó que el caso de Argentina, que ha sufrido una prolongada crisis financiera agravada por una feroz sequía que ha reducido las exportaciones agrícolas en unos 20.000 millones de dólares este año, muestra hasta qué punto los fenómenos meteorológicos pueden exacerbar las tensiones existentes.
Argentina fijó ayer nuevos tipos de cambio más débiles en relación con la cotización, mientras se apresuraba a alcanzar un acuerdo con el FMI y adelantar miles de millones de dólares en desembolsos de su programa de 44.000 millones de dólares.
Algunos países estaban encontrando "muy, muy difícil" mantener el acceso al mercado en el entorno actual, con los tipos de interés y los costes del servicio de la deuda subiendo, dijo Gourinchas en una entrevista con Reuters sobre las actualizaciones de las perspectivas globales del FMI.
La entidad financiera mundial elevó ligeramente el martes sus estimaciones de crecimiento mundial para 2023, pero advirtió de que el bajo crecimiento de la productividad y la atonía del comercio significaban que el crecimiento probablemente se estabilizaría en torno a un históricamente bajo 3,0% durante años.
Una gran preocupación, dijo, fue la desaceleración del ritmo al que los países en desarrollo están alcanzando a las economías avanzadas, y su exposición a un mayor riesgo en caso de volatilidad del mercado financiero que podría impulsar aún más el valor del dólar estadounidense.
"En el caso de Argentina, es evidente que una cosa que no ayuda en este momento a las perspectivas de crecimiento es que se enfrentan a una grave sequía que está afectando a la producción agrícola", dijo Gourinchas. "Cuando estás en una situación que es fiscalmente frágil para empezar, en la que no tienes mucho margen, y recibes malas noticias... entonces, por supuesto, la situación se vuelve más difícil".
Gourinchas afirmó que los fenómenos meteorológicos extremos, como las olas de calor que afectan a Europa y otras regiones, y el patrón meteorológico de El Niño de este año, que podría provocar fuertes lluvias o temperaturas, afectarían al rendimiento de las cosechas y a la capacidad de trabajo de la población.
"Es evidente que esta creciente frecuencia de fenómenos meteorológicos extremos (...) hace especialmente urgente que atajemos la causa profunda del cambio climático", afirmó. "Hay que hacer más".
Gourinchas dijo que cualquier fragmentación de la economía mundial en bloques dispares como resultado de la guerra de Rusia en Ucrania sería perturbadora, pero golpearía con especial dureza a las economías de mercados emergentes y en desarrollo.
"Necesitamos un enfoque multilateral del clima que sólo puede abordarse en un sentido global, asegurándonos de que todos los países realizan un esfuerzo proporcional a sus responsabilidades y a sus medios", afirmó, aunque admitió que alcanzar ese objetivo sería complicado.
Gourinchas dijo que las economías de mercado emergentes también se enfrentan a un riesgo "bastante serio" de perturbaciones causadas por una mayor volatilidad de los mercados financieros, o una escalada de la guerra de Rusia en Ucrania.
"Si se produce una fuerte apreciación del dólar, un endurecimiento de las condiciones financieras, una caída del apetito por el riesgo... todo ello podría ser devastador y repercutir en muchos mercados emergentes", afirmó.
El mes pasado, el FMI anunció que había alcanzado su objetivo de poner 100.000 millones de dólares en derechos especiales de giro -la moneda de reserva especial del Fondo- a disposición de los países vulnerables.
Pero los países ricos aún no han cumplido su promesa de movilizar 100.000 millones de dólares al año para la lucha contra el cambio climático, uno de los principales escollos en las negociaciones mundiales sobre el clima.
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Alertan del impacto de la crisis climática en alergias

 


Contaminación y cambio climático: cuatro de cada 10 personas tiene alguna alergia

Fecha de Publicación
: 11/07/2023
Fuente: Télam
Provincia/Región: Nacional


Entre el 30 y el 40% de las personas tiene algún tipo de alergia en el mundo y se espera que esta condición alcance a la mitad de la población para 2050 producto del cambio climático -que entre otras cosas aumenta los períodos de polinización- y la contaminación ambiental, señalaron especialistas en las vísperas del Día Mundial de la Alergia.
"Cuando uno habla de enfermedades alérgicas engloba muchas condiciones como la rinitis alérgica, el asma, la dermatitis atópica, la urticaria, las alergias a medicamentos y a alimentos; es un paraguas que abarca muchas patologías diferentes con un mismo origen", indicó a Télam el médico especialista Pablo Moreno, presidente de la Asociación Argentina de Pacientes con Asma.
En tanto, Raquel Rodríguez, jefa de la división Alergia e Inmunología del Hospital de Clínicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA), dijo que ese origen tiene que ver con "una respuesta exagerada del organismo frente a una sustancia externa, denominada alérgeno, reconocida como dañina cuando entra en contacto con el sistema inmunológico de personas previamente sensibilizadas a ésta; mientras que, para la población en general es habitualmente inofensiva".
Sin embargo, esa "población general" que no está alcanzada por las alergias es cada vez menor: se estima que para 2050 el 50% de la población mundial tendrá algún tipo de alergia.
"En estos últimos 20 años siempre fue en aumento, no hay lugar del mundo donde la prevalencia de las enfermedades alérgicas haya disminuido", apuntó Moreno, quien también es vicepresidente de Fundaler (Fundación para el estudio del asma y otras enfermedades alérgicas) y presidente saliente de la Asociación Argentina de Alergia e Inmunología Clínica (AAAeIC).
A modo de ejemplo, describió que según un estudio realizado por AAAeIC, el 25% de la población del país tiene rinitis alérgica, una enfermedad que se da "a nivel de los senos paranasales donde uno estornuda, tiene moco y picazón de nariz".

El agravante de la contaminación
Por su parte, Rodríguez explicó que el incremento tiene que ver "con la exposición a las condiciones ambientales actuales empeoradas por la contaminación ambiental y la susceptibilidad de las personas".
Respecto a la contaminación del aire, la especialista del Clínicas indicó que está "principalmente generada por las partículas diésel de los vehículos que elevan los niveles de dióxido de nitrógeno, el monóxido de carbono y el ozono, combinados con material particulado de pequeño tamaño, y son capaces de inducir la inflamación y exacerbar los síntomas de las alergias, principalmente respiratorias como la rinitis, la rinoconjuntivitis alérgica y el asma bronquial".
"También aumentan la sensibilidad aeroalergenos y predisponen a infecciones que afectan la vía aérea", añadió.
Sobre esta interacción, describió que "las partículas diésel al asociarse con los pólenes los tornan más alergizantes, con capacidad de sensibilizar a un mayor número de personas e inducir una respuesta alérgica mucho mayor".
Según el trabajo "Rinitis alérgica agravada por contaminantes atmosféricos en América Latina" publicado por la Organización Mundial de la Alergia -que consistió en una revisión de más de 20 investigaciones regionales a agosto de 2021, "aunque la contaminación del aire es un problema mundial, las enfermedades atribuibles a las partículas en el aire predominan en los países de ingresos bajos y medianos".
En las investigaciones, además de los contaminantes externos comunes, como los productos que queman combustibles para vehículos, también se observó contaminación por carbón, por contaminantes de minas de oro y cobre, agroquímicos esparcidos y efectos de las instalaciones de almacenamiento de granos, contaminación petroquímica, asó como productos de la quema de caña de azúcar.

El impacto del cambio climático
En relación al cambio climático, la Organización Mundial de la Alergia recordó que "la temperatura promedio de la superficie de la Tierra actualmente es aproximadamente 1,1 °C más cálida que a finales del siglo XIX (antes de la revolución industrial) y más cálida que en cualquier otro momento de los últimos 100.000 años".
"El aumento de las temperaturas, el calentamiento de los océanos, el aumento del nivel del mar y el derretimiento acelerado de los glaciares son algunos de los efectos medibles del cambio climático, junto con las intensas sequías, aumento de la contaminación del aire, escasez de agua y temporadas de polen más tempranas e intensas, incendios severos, inundaciones, tormentas catastróficas y disminución de la biodiversidad", indicó la organización que nuclea 109 sociedades regionales y nacionales.
Concretamente, el aumento de las temporadas de polinización hace que se desencadenen reacciones alérgicas todo el año, que antes se circunscribían a determinadas estaciones.

Los tratamientos
Sobre los tratamientos, Moreno indicó que "lo primero es saber qué tipo de alergia se tiene y para eso conviene consultar con un especialista".
Como una de cada cuatro personas en la Argentina tiene rinitis pero se estima que sólo la mitad fue diagnosticada, muchas no tienen tratamiento y esto tiene un impacto fuerte en la calidad de vida, añadió.
"Para quienes trabajamos con alergias, lo primero es identificar cuál es el trastorno inmunológico por el cual reacciona el cuerpo en forma indebida e identificar el alérgeno ya que hay tratamientos para la mayoría. En relación a la rinitis, los tratamientos son altamente exitosos porque una vez que se descubre el origen el paciente puede hacer inmunoterapia que son las vacunas de la alergia", describió.
Sobre el asma, detalló que "presenta diferentes grados de severidad (leve, moderado y grave) y para todos existe un tratamiento que mejora la calidad de vida".
En la misma línea, Rodríguez señaló que pese a su alta prevalencia las alergias "enfrentan dos grandes problemas: las diagnosticamos poco y las tratamos poco o de manera inadecuada".
Por eso, "la consulta es clave para identificar el origen (alergeno) y abordar un tratamiento adecuado para prevenir los síntomas y la progresión de la enfermedad".
Pero más allá de los tratamientos de cada paciente, la Organización Mundial de la Alergia señaló que "mitigar los efectos del calentamiento global ayudará a prevenir alergias nuevas o que empeoren los síntomas y mejorar la calidad del aire disminuirá el padecimiento de alergias respiratorias".
"Aprender sobre la relación entre los humanos y la naturaleza y comprender cómo esa relación afecta tanto la salud de los humanos como de los entornos que llamamos hogar puede mejorar la salud de todos", concluyeron.
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Presentaron el lineamiento para la transición energética

 


Gobierno aprobó el documento "Lineamientos y Escenarios para la Transición Energética a 2050"

Fecha de Publicación
: 10/07/2023
Fuente: Ambito
Provincia/Región: Nacional


A través de la Resolución 518/2023 la Secretaría de Energía dio a conocer los objetivos del sector en materia de transición energética para los próximos años.
A través de la Resolución 518/2023, publicada en el Boletín Oficial, la Secretaría de Energía aprobó el documento "Lineamientos y Escenarios para la Transición Energética a 2050".
La aprobación de las dos iniciativas se plasmó en las resoluciones 517/2023 y 518/2023, publicadas hoy en el Boletín Oficial.
El plan a 2030 se presentó en un anexo de 109 páginas en las que se desarrollan las metas específicas a lograr hasta ese año, entre los que se destacan: no exceder la emisión neta de 349 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) para toda la economía; reducir por eficiencia energética y uso responsable de la energía al menos un 8% de la demanda energética y superar el 50% de fuentes renovables en la generación eléctrica.
También se propone alcanzar una penetración de autos eléctricos del 2% del parque de vehículos; alcanzar los 1.000 megavatios (MW) de generación distribuida renovable y aumentar la red de transmisión eléctrica de alta tensión en 5.000 kilómetros de nuevas líneas.
En cuanto a las metas cualitativas, señala crear las condiciones propicias para el desarrollo local de la cadena de valor de tecnologías de energía limpia, incluyendo nuevas tecnologías no convencionales y emergentes; crear nuevos puestos de trabajo locales y sostenibles relacionados con el sector; reducir la pobreza energética según se establezcan las necesidades que conlleva este concepto y facilitar una transición energética justa.
En los lineamientos de cara al 2050 se plantean tres escenarios: uno de base, con una tasa de crecimiento de la demanda moderada y una baja electrificación de nuevos usos, con un impuesto a las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) de US$ 25 por tonelada de CO2 a partir de 2040.
El escenario optimista, mantiene el mismo nivel de impuesto y sumará nuevas acciones y tecnologías relacionadas con la descarbonización del sector energético.
Por último, el escenario ambicioso agrega una incorporación acelerada de tecnologías de descarbonización y una mayor electrificación de nuevos usos, elevando el impuesto a las emisiones a US$ 56 por tonelada de CO2.
En el marco de los compromisos asumidos en el Acuerdo de París, la Argentina presentó en noviembre de 2022 su Estrategia de Desarrollo Resiliente con Bajas Emisiones a Largo plazo a 2050 y presenta regularmente sus Inventarios Nacionales de Gases de Efecto Invernadero (Ingei) que en 2018 mostró un desempeño al del promedio mundial (51% contra 76%).
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Cambio climático y financiación internacional, la estrategia

 


Argentina aprueba su Estrategia Nacional de Financiamiento Climático Internacional: implicancias para la Inclusión Financiera

Fecha de Publicación
: 03/07/2023
Fuente: El Cronista
Provincia/Región: Nacional


En un planeta que cada día se ve más afectado por los devastadores impactos del calentamiento global, contar con una Estrategia integral para dar respuesta a estos desafíos resulta cuando menos esperanzador
Se aprobó y publicó la Estrategia Nacional de Financiamiento Climático Internacional para la República Argentina, y esta nueva estrategia tiene implicancias directas en la inclusión financiera para el desarrollo sostenible, es una noticia celebrada y útil para el país que marcara el rumbo de los compromisos internacionales asumidos en la materia.
En Argentina, y como en todo el mundo, las estrategias de carácter nacional son consideradas instrumentos valiosos que permiten orientan la gestión y las políticas del país hacia el logro de objetivos y metas específicas, en muchas ocasiones el contexto que se describe en las Estrategias es resultado de un diagnóstico que involucra varios actores tanto del sector público como privado, lo que demuestra la importancia de las alianzas para dar cumplimiento a los objetivos de largo plazo.
Nuestro país cuenta con una Estrategia Nacional de Inclusión Financiera y Financiamiento Social, con una reciente Estrategia Nacional de Finanzas Sostenibles y ahora con una Estrategia Nacional que tiene como objetivo central aunar esfuerzos para abordar el enorme desafío del cambio climático. En un planeta que cada día se ve más afectado por los devastadores impactos del calentamiento global, contar con una Estrategia integral para dar respuesta a estos desafíos resulta cuando menos esperanzador respecto de los compromisos asumidos por nuestro país en el Acuerdo de París y la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático. Cabe recordar que Argentina se comprometió a reducir el calentamiento global por debajo de los 2°C, e incluso ha aumentado su ambición al buscar limitar ese aumento a 1,5°C.
Para comprender el impacto de esta Estrategia Nacional es importante revisar los cuatro ejes sobre los cuales desarrolla sus intervenciones:
- Transparencia: Este documento busca mejorar el acceso a la información y a los datos para mejorar el proceso de toma de decisiones sobre acciones de mitigación y adaptación.
- Financiamiento Eficiente: El objetivo es identificar fuentes de financiamiento y a su vez crear las condiciones necesarias para poder garantizar su acceso. Aquí se promueve la integralidad, contar con una mirada macro de proyectos estratégicos que permita una alineación eficiente a los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
- Economía Ecológica: Aborda los desafíos del diseño e implementación de instrumentos financieros que potencien el flujo de capital necesario para crear una economía ecológica, esto es una económica resiliente al clima y baja en emisiones de carbono.
- Ejecutar bien: Este eje se centra en el "lado b" del financiamiento, en la ejecución del mismo y para garantizar un proceso eficiente en términos de plazos y objetivos se requiere fortalecer las capacidades técnicas y de gestión de los sectores que intervengan en el financiamiento climático internacional.
Esta alentadora Estrategia se articula con uno de los desafíos que como país enfrentamos a diario y tiene que ver con la inclusión financiera de nuestra población. Uno de los objetivos de este plan integral está relacionado con la promoción del acceso a fuentes de financiamiento climático relacionados con la mitigación y adaptación al cambio climático. Al potenciar el acceso a estos recursos se promueve la inclusión financiera de diferentes actores como empresas, comunidades, gobiernos locales que desean participar en la implementación de soluciones climáticas o incluso en adaptar sus productos o servicios a la perspectiva del desarrollo sostenible, o la mirada de la protección de la Casa Común, creando una economía ecológica centrada en el planeta y las personas.
Promover el desarrollo económico sostenible desde el financiamiento es un círculo virtuoso que impulsa el trabajo de calidad desde la creación de empleos verdes, hasta la adopción de tecnologías limpias y la promoción de prácticas comerciales sostenibles.
Teléfono para el sistema financiero: dato para los Bancos que se aproximan a la temática, la Estrategia cuenta con una significativa relación con los postulados de la Banca Responsable y crea oportunidades para el fortalecimiento de la resiliencia financiera frente al cambio climático. La Estrategia implica nuevos horizontes de negocio.
La publicación del documento es tan sólo el primer paso, resta el desafío de implementación y seguimiento. Uno de los datos relevantes del documento es el compromiso de actualización, esto resulta fundamental en los ámbitos de gestión y en los operativos también, ya que los contextos se encuentran en constante cambio y transformación, lo cual exige actualización permanente que va mucho más allá de conocer sólo los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030.
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Advierten sobre la crisis climática en las grandes ciudades

 


La drástica advertencia de una especialista en medio ambiente sobre las grandes ciudades del país

Fecha de Publicación
: 24/06/2023
Fuente: MDZ
Provincia/Región: Nacional


El Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec) es una organización sin fines de lucro de Argentina que se dedica a promover políticas públicas efectivas en diversas áreas, incluyendo el medio ambiente.
A través de la investigación rigurosa y el diálogo con actores clave, Cipecc busca generar propuestas basadas en evidencia para abordar desafíos ambientales, como la conservación de recursos naturales, el cambio climático y la promoción de prácticas sostenibles. Para ahondar en el tema medioambiental y la vida urbana, la directora del Programa de Ciudades, María Victoria Boix dialogó con MDZ.

-María Victoria Boix, directora de Programa de Ciudades de Cippec. Gracias por recibirnos para hablar sobre cuestiones referidas al medio ambiente y al urbanismo.
-Muchas gracias Gonzalo por invitarnos a hablar en este espacio.

-¿Cuáles creen que son políticas viables que se puedan hacer en la Ciudad de Buenos Aires para generar una transformación a una ciudad verde?
-Las grandes ciudades, como la Ciudad de Buenos Aires, tienen tres grandes fuentes de emisiones; o sea que sí estamos pensando en eso. Energía, energía de edificios, de hogares y de edificios públicos. Eso explica, en la Ciudad de Buenos Aires, alrededor del 50% de las emisiones. Otro 20% está relacionado con el transporte y un 17%, aproximadamente, de residuos.
Entonces, ahí hay que apuntar un poco los cañones, a esos tres grandes rubros. Creemos que la Ciudad de Buenos Aires ha hecho un recorrido muy importante; por ejemplo, al priorizar el transporte público, en reducir poco lo que es desincentivar el uso de los autos, en generar "microcentralidades" que permitan menos traslados en la vida cotidiana.
Hay que seguir promoviendo esto y también trabajar en algunas estrategias más específicas. Dar el siguiente paso. Algunos de estos pasos pueden ser cómo adecuamos nuestras eficiencias, la eficiencia energética en todos los edificios, tanto públicos como como en los de las viviendas y los hogares de cada uno de nosotros. Entonces ahí hay mucho para hacer. Los códigos no están incentivando necesariamente esto. Hay estrategias a nivel mundial que tienen que ver con con la incorporación de certificaciones de etiquetado energético, de generar también más incentivos para que la gente adopte aires acondicionados, estufas, termotanques mucho más eficientes. Las nuevas tecnologías generan muchísimo menos el gasto y eso redunda en una mejor eficiencia energética.

-En la ciudad, como todo el país, como todas las personas, están atravesando un momento de crisis económica y con una pobreza creciente. ¿Todo esto se puede enfocar de una manera en la que genere menos costo para el Estado, que está necesitado de también cumplir con otras, con otras funciones?
Sí. La eficiencia energética genera obviamente que tengamos menos gasto en el mediano plazo. El problema de muchos ante este tipo de desafíos es que por ahí vas a tener esa ganancia en el mediano plazo y no en el corto. Por eso es muy importante decidir estratégicamente y hacer cosas de forma paulatina.
Esto que te decía de la educación de los edificios, las estrategias de dar en el mundo, no es de decidir de un día para el otro que todos los edificios tienen que ser construidos con certificaciones. No se va haciendo de forma paulatina, se va empezando a mostrar, por ejemplo, a la ciudadanía, a generar demanda en el mercado, y eso empieza a tener también un valor económico.
Se empiezan a diferenciar las marcas también por el "que te da", es ese diferencial energético y en el fondo termina redundando en la mejora de los bolsillos de los ciudadanos y también de los Estados que implementan estas estrategias que, en definitiva, gastan menos en el mediano plazo.

-Argentina, por suerte, porque eso significa desarrollo, tiene un número importante de ciudades, de urbes que tienen un conglomerado urbano alrededor de una gran dimensión ¿Esa contaminación se ve replicada en todo el país o es algo que se presenta principalmente en el AMBA?
La contaminación no solamente en términos de contaminación ambiental. Tenemos contaminación sonora, que eso se da también en todas las todas las grandes urbes, del aire y el agua, principalmente, que en el país es una problemática muy fuerte y no se ve tanto.
En términos de agua, por ejemplo, tenemos 27% de la población que aún no tiene cloacas. No, uno no piensa, no lo asocia rápidamente con contaminación, pero es una fuente de contaminación importante de las napas y eso redunda en nuestra calidad de vida. Y eso se da sobre todo también en provincias del Norte, pero esta distribuido en todo el país, Conurbano también. Después tenés muchos problemas jurisdiccionales, se vierten deshechos desde las industrias a los ríos y demás, y eso requiere una regulación que no es de única jurisdicción.
También tenemos contaminación del aire y ahí hay muchísimo que tiene que ver con lo que te decía recién de las tecnologías de nuestra flota, donde hay tal vez flotas de transporte público y privado muy antiguas. Eso emite muchísimos gases y eso se va mejorando tanto con desincentivar el uso del auto, generar otras opciones de movilidad más sustentable, ciclovías, espacios donde no se pueden ingresar con el auto y mantenés una calidad del ambiente óptima. La infraestructura verde es fundamental para reducir la contaminación, reducir las emisiones de carbono y también para reducir, por ejemplo, el calor. Cuando tenemos una ola de calor o ir atrasando cómo se va filtrando el agua de lluvia y genera menos inundaciones, entonces ese tipo de estrategias te permiten trabajar un poco de forma integral.

-Publicaron hace poco un informe de la ciudad de Mendoza y la ciudad de Rosario como distritos que están impulsando políticas verdes.
Sí, nosotros encontramos que hay 78 ciudades de Argentina que ya tienen, por ejemplo, un plan de acción climática. Entre ellos están Rosario, Mendoza. Cada uno tiene su característica distintiva. Por ejemplo, cómo destacar que Mendoza hoy está trabajando con inteligencia artificial para detectar, por ejemplo, microbasurales. Los los microbasurales o los basurales a cielo abierto son una fuerte fuente de contaminación. Entonces es muy importante que las puedan detectar y no les permitan crecer y están buscando distintos tipos de estrategias, también para avanzar con el uso de tecnología, para trabajar en pos del cambio climático.
Rosario, por ejemplo, es pionero en todo esto de etiquetado de edificios. Es una de las ciudades que ha impulsado esto, pero por ejemplo la ciudad de Santa Fe, ha trabajado muy fuerte en gestión de riesgos. Estos tuvieron una inundación muy importante unos años atrás y han podido trabajar en esta materia, generaron obras específicas e hidráulicas y también un sistema de alerta temprana muy fuerte, con protocolos muy bien estandarizados, que también es parte de lo que es "ser verde", no solamente trabajar para mitigar o reducir las emisiones en el mediano plazo, sin prepararnos. Hay una realidad climática que cambió y nosotros tenemos que estar preparados, porque además las poblaciones más vulnerables, los barrios populares, sobre todo las mujeres y los niños, los adultos mayores, están más expuestos. Entonces es importante trabajar en detectarlos, dónde están los sectores con más vulnerabilidad y poder actuar en consecuencia y generar protocolos.

-¿Hay modelos que se pueden importar a nuestro país sobre el cuidado del medio ambiente?
De hecho, estos planes de acción climática que te comento vienen, por ejemplo, muy impulsados por las redes del C40, que tiene muchísimas ciudades de todo el mundo. Hoy la ciudad de Buenos Aires y la ciudad de Santa Fe hicieron su estrategia de resiliencia urbana que viene de las redes en ciudades resilientes. Hoy por hoy se está trabajando también en estrategias más focalizadas.
Nosotros estamos impulsando en Argentina estrategias que están haciéndose en Santiago de Chile o en ciudades de Estados Unidos, por ejemplo, que se focalizan en el calor urbano. Tuvimos o tenemos olas de calor cada vez más frecuentes, temperaturas más altas que implican un riesgo de vida e implican también una peor calidad de vida en un montón de aspectos.
Se pueden armar acciones concretas, específicas para esto. Hay otro tipo de modelos, por ejemplo, en Francia, en París, adoptaron hace un tiempo la "ciudad de los 15 minutos". Esto que significa tratar de tener todo cerca de tu casa, que no necesites hacer traslados al microcentro o a otro punto lejano de tu ciudad para hacer tus cosas cotidianas.
Eso tiene un montón de beneficios para la ciudad, porque vos no necesitás trasladarte, podés realizar y aprovechar mejor tu tiempo y en términos medioambientales es muy beneficioso porque, sin tener traslados, un montón de estas cuestiones que veníamos conversando.

-¿Por qué crees que el tema de del cambio climático no aparece en la agenda político o en la agenda partidaria?
Bueno, creo que hay algunos factores que lo llevan, depende un poco de también de que cuestiones tengan para mostrar. Pero el cambio climático, como requiere también una mirada muy de largo plazo y de inversión, muchas veces, como vos mencionabas al principio se lo percibe como que no le cambia el metro cuadrado al vecino, a la vecina. Pero como estamos viendo sí lo hace. Pero es algo quizás más difícil de entender que quizás los problemas que estamos viviendo hoy, como la inflación o problemas de empleo.
Son cuestiones que tienen más mediano y largo plazo y creo que también por eso muchas veces no está en nuestra agenda cotidiana, pero por suerte creo que hay una juventud cada vez más comprometida con esta temática que va empujando esto en la agenda pública.

-¿Hay una vuelta atrás del cambio climático?
No, la verdad es que la nueva realidad climática llegó para quedarse. Lo que sí tenemos mucho para hacer es tratar de no superar los umbrales que se consideran más peligrosos y por eso es muy importante que actuemos ya en acciones concretas, porque las ciudades además es donde más se generan.
Los gases de efecto invernadero son 70% más o menos, surge de las ciudades en todo el mundo. Por otro lado, es donde están las soluciones, donde también está la gente viviendo y sufriendo esas consecuencias.

-Argentina, según trascendió, es uno de los países que menos carbono emiten ¿Por qué le dirías a una persona que, a pesar de esto, tenemos que trabajar igual?
Mirá, nosotros somos de los que menos emiten, pero el sur global es donde más se reciben los efectos. Eso también está estudiado. Hay un debate global sobre quién debería pagar por esos daños y perjuicios. Pero este verano tuvimos el verano más caluroso de nuestra historia en por lo menos de lo que se registra y que se tiene registro periódico.
Entonces eso sabemos que existe y ya nos afecta. Entonces ya deberíamos estar trabajando por lo menos para adaptarnos a esta realidad. Entonces sí sabemos que podemos tener lluvias más frecuentes e intensas, sabemos que tenemos olas de calor muy fuertes e intensas. Estás en Mendoza y sabés que tenés problemas con el agua y que encima si no nieva, digamos durante el verano, probablemente tengas más problemas también con el agua, que es de los que ya tenías originalmente.
Necesitamos actuar ya porque nuestra calidad de vida está en riesgo. Sobre todo también, como te decía, quizás hay una parte muy invisibilizada, pero todos los barrios informales que tenemos en nuestro país, más de 5 millones de personas viven ahí. En general, no tienen acceso a la sombra de un árbol, por ejemplo, y eso también es parte de adaptarnos al cambio climático.
Es poder pensar la infraestructura verde donde hoy no llega, donde está atrasada la ciudad, poder acceder a los servicios básicos, la conexión con el agua, las cloacas, estas cuestiones que también son básicas pero son fundamentales para atravesar y prepararnos. Estar bien preparados para cuando tengamos un evento climático extremo.

-En Buenos Aires se está trabajando en obras sobre el Río de la Plata para cambiar la fisionomía de la Costanera, olvidada por el porteño, para que sea habitable y con parques ¿Cuánto puede influir este aumento de metros cuadrados verdes en la ciudad?
Mira, Siempre celebramos primero tener nuevos espacios verdes públicos, que es súper importante y hay muchos estudios que demuestran el impacto que tiene en la calidad de vida de la gente. Lo que tiene la Costanera es que está más alejada de donde hay más densidad poblacional. Entonces ahí lo que tenemos es un desafío de hacer que la gente pueda llegar ahí.
Por ejemplo, barrios como Boedo no tienen plazas. Entonces siempre en estas ciudades tenemos ese tipo de cuestiones y desafíos. Cómo pueden influir igual e ir generando corredores verdes que se van conectando entre sí. Son muy buenos para generar biodiversidad. Entonces en el mediano plazo generan múltiples beneficios para la ciudad en su conjunto. Así que celebramos ese tipo de iniciativas.

-Argentina es un país con grandes reservas de agua dulce. Tiene esa dicha y al mismo tiempo hay una irresponsabilidad en el trato del agua. Es como que "hay tanta que nunca se va acabar" ¿Cuánto le costaría a la Argentina? adaptarse a una nueva realidad del tratamiento del agua.
Eso varía de región a región, un poco como te decía, no es lo mismo el caso de la Ciudad de Buenos Aires, donde tenemos una reserva muy grande versus Mendoza, donde tienen escasez o en varias provincias argentinas donde hay escasez. Entonces yo creo que hay que concentrar los esfuerzos también en donde más lo estamos necesitando. No es ser como apuntar, por ejemplo a la eficiencia energética en las ciudades donde más sea, en toda la ciudad del país, que es lo que estamos necesitando focalizar y quizás en la eficiencia y situación del uso del agua en las provincias donde se necesita, como Córdoba, Mendoza, porque son dos grandes referentes de eso y después creo que tiene mucho que ver con el cambio cultural. Una vez que nosotros somos más conscientes de que los recursos son finitos, podemos ir avanzando en otras direcciones. No me parece que hay que apuntar a todo al mismo tiempo con la misma fuerza, porque justamente primero necesitamos entender por qué es un riesgo para cada uno de nosotros para poder actuar en consecuencia.

-Muchísimas gracias, María.
-Muchas gracias.
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