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El 'productivismo' por sobre lo ambiental

 


Advierten por la ley sobre humedales que impulsa el oficialismo: por qué es un riesgo para la producción

Fecha de Publicación
: 27/09/2022
Fuente: Clarín
Provincia/Región: Nacional


El El experto Manuel Chiappe remarcó que podrían afectarse varias actividades agropecuarias.
“Los humedales hoy están protegidos por ley”. Con esta enfática afirmación, Manuel Chiappe, quien es ingeniero ambiental y director General de la Fundación Barbechando, advirtió sobre los proyectos de ley que está tratando de impulsar el oficialismo en la Cámara de Diputados con la excusa de los incendios que se están dando en el Delta del Paraná.
Según explicó, los humedales están protegidos por la Convención sobre los Humedales, también conocida como Convención de Ramsar (ley 25335), que es un convenio internacional que Argentina se adhirió.
Además, ya hay dos normas para proteger los humedales de los incendios. La Ley 26815 -Manejo del Fuego- y la ley 26562 -Presupuestos Mínimos para Quemas Controladas.
"Tal vez se establece esta leyes no están bien redactadas o no son efectivas o no tienen la planificación suficiente para combatir los incendios. Ahí está la falla y no hay que generar otra legislación. Esto no quiere decir que hay que oponerse a una nueva ley de humedales porque son ambientes muy diversos y fundamentales para el desarrollo de la humanidad. pero tampoco engañar a la sociedad que con una nueva ley de humedales se van a apagar los incendios”, disparó el especialista.
“Sí creemos que con una nueva ley de humedales se van a apagar los incendios, no va a ocurrir. Ahora, diputados insisten en una nueva ley de humedales que ninguno de los proyectos habla específicamente de combatir incendios”, agregó el directivo de Barbechando que viene siguiendo el tema desde muy cerca.
De acuerdo con el mapa que publicó el INTA esta semana, la superficie de humedales en la Argentina alcanza a casi 277 mil kilómetros cuadrados, el 9,5 % de la superficie del país. En gran parte del territorio nacional se realizan diversas actividades productivas entre las que se destacan la ganadería, la producción forestal, la frutícola y agrícola.
 En este contexto, hay varios proyectos sobre humedales pero el trabajo que más difusión tiene es el de Leonardo Grosso, diputado del Frente de Todos y presidente de la Comisión de Ambiente de la Cámara de Diputados, que según alertó Chiappe, tiene varios artículos conflictivos.
Entre los puntos más polémicos para la producción, el directivo de Barbechando indicó que hay un artículo que prohíbe la liberación de sustancias químicas y fumigación terrestre o aérea.
A su vez, detalló que en otro de los artículos se especifica que el que produzca monocultivo, cultivo intensivo o agricultura industrial, necesita hacer un estudio de impacto ambiental autorizada por la autoridad de aplicación.
“Además de ser un problema productivo, es un problema socio-económico porque hay muchas familias que viven en el humedal, hay mucho trabajo. Esto genera un impacto que no lo están evaluando”, apuntó
Chiappe estimó, aunque son muy preliminares, que por lo menos un 20% a 30% de las exportaciones del país serán impactadas y un 3% del empleo que aportan las cadenas agroindustriales..
“Hay riesgo de las actividades socioeconómicas que se desarrollan en los humedales”, advirtió. “Tenemos que tener en cuenta la variable socioeconómica, además del ambiental, y nosotros vemos que está variable en algunos proyectos no está contemplada”, cerró.
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Nuevo relevamiento de residuos en playas bonaerenses

 


Residuos playeros: realizan un nuevo censo en la costa bonaerense

Fecha de Publicación
: 27/09/2022
Fuente: La Nueva
Provincia/Región: Buenos Aires


Se llevará a cabo hoy en distintas localidades del Sudoeste Bonaerense. El plástico sigue siendo el principal material que se encuentra tirado en nuestras playas.
Cinco gramos de microplástico. De acuerdo a los informes que llevan a cabo entidades vinculadas a la protección del medio ambiente, esa es la cantidad que consume un habitante de nuestra zona por semana, debido a los residuos plásticos que se encuentran en las costas bonaerenses y argentinas que, posteriormente, terminarán siendo ingeridas por animales acuáticos antes de llegar al ser humano.
El estudio y estas cifras, que en su momento publicó la organización Vida Silvestre, terminan configurando un alerta sobre la necesidad de cuidar y respetar nuestros ambientes costeros, limitando y eliminando cualquier tipo de residuos que se pueda generar en su entorno.
Por esta razón, durante la jornada de hoy se llevará a cabo una nueva edición del Censo de Residuos  Playeros, que se realizará en toda la costa bonaerense, en 21 localidades entre las que están comprendidas varios balnearios de nuestra zona.
El relevamiento, el sexto que se llevará a cabo en los últimos años, busca clasificar la basura que queda o se puede encontrar en las playas de nuestra región y, en algunos casos, también recogerla para disponerla posteriormente en un lugar más acorde.
“Nuestro objetivo es conocer el estado de las playas, qué cantidad de residuos hay en ellas, cómo están clasificados y qué materiales predominan. Históricamente, lo que más encontramos son plásticos”, cuenta Guadalupe Alvarez, de la ONG HAPIC (Humedal Arroyo Pareja-Isla Cantarelli).
Los datos que se obtengan en toda la provincia serán analizados por la fundación Vida Silvestre, que luego los divulgará y realizará las estadísticas comparativas.
“El conteo lo hacemos en una hora aproximadamente y los resultados tardarán un poco en aparecer; normalmente el censo se lleva a cabo entre septiembre y octubre, y estimamos que para noviembre o diciembre ya deberían estar los números finales”, aclara.
Durante el censo que se llevó a cabo el año pasado, el material predominante encontrado fue el plástico, con un 85% de presencia en toda la costa. En nuestra zona, como por ejemplo Coronel Rosales, ese porcentaje trepó al 96%.
“Dentro de ese porcentaje se incluyen las colillas de cigarrillo, porque el filtro está hecho de celulosa. Si bien no las podemos contabilizar porque no las vemos, ya que en la costa hay unos residuos vegetales que impide que las observemos, sí contamos a montones botellas tipo pet, bolsas y residuos de pesca”, advierte.
En ese sentido, un informe presentado en los últimos meses, indicó que en las costas de la provincia de Buenos Aires, los contaminantes más comunes en las playas bonaerenses son las colillas de cigarrillo (27,3%), fragmentos plásticos (20,6%), telgopor (8,6%), envoltorios plásticos (8,1%), botellas y otros envases (6,9%), bolsas plásticas (6,2%) y tapitas (6,2%).
“A nivel local vemos que hay mucho plástico y seguimos encontrando un montón, sobre todo botellas pets. Por esto es que debe darse un cambio de mentalidad, ya que como consumidores tenemos poder de decisión y eso terminaría repercutiendo en el ambiente”, señala.
Sin embargo, lamenta, la cantidad de basura que se encuentra en la costa y en las playas bonaerenses no disminuye.
“Todavía hay un montón de residuos y cada vez aparecen más. Además, con el paso del tiempo el plástico se va acumulando, fragmentando y quedando en el ambiente.
Hoy tenemos un montón de microplásticos en la playa -NdR: se trata de fragmentos menores a 5 milímetros, que se clasifican como micro-. La costa está llena, los animales los ingieren y por las redes tróficas llegan hasta nosotros”, explica.
Alvarez reconoce que esos 5 gramos semanales de microplásticos que ingerimos en forma semanal es prácticamente lo mismo que comer una lapicera o una tarjeta de crédito.
“Este tema es muy grave. La mortandad de animales está asociada a la ingestión y al entrampamiento, ya sea con redes de pesca y anzuelos que quedan en la playa. Hemos encontrado individuos atrapados”, explica.
En cuanto a la ingestión, detalla que es un proceso interno que le provoca al animal un debilitamiento progresivo en el tiempo, en que deja de cazar porque tiene el estómago lleno de plástico.
“Se mueren porque comen tanto plástico que se inmunodeprimen, dejan de incorporar la cantidad de calorías que deben y después no pueden cazar”, sostiene.
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Se agudiza el conflicto por incendios en el Delta

 


Un clima irrespirable en Rosario

Fecha de Publicación
: 19/09/2022
Fuente: Página 12
Provincia/Región: Nacional - Santa Fe - Entre Ríos


La que está terminando es la semana de mayor efervescencia política desde que comenzó el conflicto por los incendios en el Delta del Paraná. Tras la protesta de intendentes de la región en el Obelisco y sus reuniones con autoridades y diputados nacionales, el ministro de Ambiente, Juan Cabandié, se dirigió este viernes a la base operativa de Alvear, desde donde reclamó a la Justicia que metiera "a alguien en cana" y pidió mayor compromiso al gobierno de Entre Ríos. Pero el humo no cesa y el clima social sigue siendo de malestar y desconfianza. En este marco, más de 500 agrupaciones realizarán este fin de semana una Acción Plurinacional por los Humedales. Con protestas en todo el país, comenzará el sábado con una marcha con corte en el Puente Rosario-Victoria que, acampe mediante, concluirá el domingo. La principal --e histórica-- demanda es la Ley de Humedales. El jueves comenzará un nuevo debate en comisiones en torno a este proyecto en la Cámara Baja.
"Hoy está lindo", expresa un rosarino, pero sin tono de festejo. No se refiere al clima, sino al hecho de que este viernes se puede medianamente respirar. No fue así el lunes ni el martes ni el miércoles, cuando el balcón de su departamento se cubrió de cenizas. Cuenta que la pequeña hija de una pasajera suya --es remisero--, asmática, se desmayó dos veces. Se llegaron a prohibir las actividades físicas al aire libre; el gobierno provincial pidió el uso del barbijo incluso estando afuera; se incrementaron las consultas médicas; hubo accidentes por la falta de visibilidad agravada por la niebla. La paradoja es que ese "hoy está lindo" remite sólo a la repercusión perceptible del humo en el cuerpo. Porque humo hay. Los jóvenes con sus skates, los que se besan, los que toman mate, y los hombres que pescan en la zona del Parque España, en la costanera, lo tienen frente a sus narices. Al sur, una enorme nube negra. Al norte, otra más pequeña. Uno de los incendios más impresionantes se ubica en la localidad de San Lorenzo. Se supo por un video que circuló a la noche.
"Los focos son gravísimos", sentenció el intendente rosarino, Pablo Javkin, en diálogo con Página/12. Y explicó lo que todos explican en esta ciudad hace ya dos años y medio: que respirar bien depende de la dirección del viento. "En las islas, sólo frente a Rosario, se están quemando en este momento 6 mil hectáreas", detalló. El jueves encabezó una protesta de intendentes de la región hacia Buenos Aires para "visibilizar el conflicto". El pedido concreto fue la presencia permanente de las Fuerzas Armadas en el territorio para controlar los incendios. Se lo hicieron al ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, e indicaron que recibieron compromiso del Estado Nacional para avanzar en la coordinación de una estrategia federal. Después fueron recibidos por diputados nacionales. Tras la reunión, se supo que el jueves un plenario de comisiones del cuerpo legislativo debatirá la Ley de Humedales, demanda histórica de las organizaciones, cuyo tratamiento cayó tres veces en la historia argentina.
Javkin hace un balance "positivo" del paso por Buenos Aires. En un primer momento hubo cruces con el viceministro de Ambiente, Sergio Federovisky, pero quedaron saldados al desenvolverse las reuniones. "Hasta acá teníamos todos los recursos para apagar el fuego, pero no para evitar que se prendiera. El planteo del Gobierno era que instalar a las Fuerzas en Entre Ríos requería un mecanismo de solicitud del gobernador (Gustavo) Bordet. Hasta acá no se había dado. Hoy (por el viernes) aparentemente se dio", explicó el intendente. El Ejército intervino hace 20 días por primera vez en el conflicto. Retomó la tarea el miércoles tras haberse retirado. El director del Observatorio Ambiental de la Universidad Nacional de Rosario, Matías de Bueno, hace tiempo viene insistiendo en la creación de una policía de humedales, de carácter interjurisdiccional:  "Cuando el fuego se enciende el daño ambiental se produce, es enorme, y el costo de apagar el fuego es mucho mayor que el de prevenirlo", argumentó.
A Bordet, en la mira desde diversos lados por su inacción, y en tensión hace rato con la cartera de Ambiente, apuntó Cabandié tras visitar la base de Alvear junto a Federovisky y otros funcionarios provinciales, y antes de sobrevolar las zonas afectadas. En rueda de prensa contó que el gobernador había sido invitado a la base: "Las autoridades de su gobierno deberían estar acá". Medios locales publicaron que Bordet solicitó la presencia de las Fuerzas Armadas en el Delta y que acordó con Aníbal Fernández operativos con el Grupo Albatros. El discurso del ministro estuvo orientado además a la Justicia federal para que investigue los casos de quemas de pastizales en los humedales.
No solamente los intendentes llevaron el conflicto a Buenos Aires. El Concejo Municipal votó el jueves por unanimidad una resolución para que el presidente Alberto Fernández y todo el Gabinete se instalen en Rosario, con el fin de que los funcionarios "conozcan de forma directa y sin intermediaciones los efectos de la crisis de violencia y ambiental" que atraviesa la ciudad, en palabras de Juan Monteverde, concejal de Ciudad Futura, uno de los bloques que impulsó el proyecto.
En las calles, a pesar de que se disfruta del día "lindo", el clima es de malestar por lo vivido en los últimos días y de desconfianza hacia los movimientos políticos que hubo. Hay enojo por los daños sobre la salud y también sobre el ecosistema, prima la sensación de que los políticos se "pasan la pelota".
Jésica Fernández Bruera, de la Multisectorial Humedales, una de las organizaciones que convocan a la Acción Plurinacional, considera que las expectativas de la sociedad están puestas, ante todo, en el debate en comisiones de la Ley de Humedales. "Es un avance. No salimos a festejar porque sabemos que el trayecto es largo. Lo que sí, no nos da lo mismo cualquier ley", dijo. De los distintos proyectos que hay en danza, sólo uno cuenta con el aval de las organizaciones ambientalistas y los científicos que vienen luchando por ella. "Es triste y altamente simbólico el hecho de que los intendentes se hayan movilizado a Buenos Aires y hayan abierto carteles cual ciudadanos comunes. Detrás de esto hay un uso político. La gente, de todas formas, no se está sintiendo representada en ninguna de estas acciones. Cabandié llegó hoy, pero previamente, sólo se había manifestado en un tuit. Lo más potente es que se haya avanzado para el plenario. Pero nada de lo que estuvo ocurriendo hace que la gente sienta que la están mirando y escuchando. Sigue habiendo una sensación de que no hay interés por resolver esto", concluye, en la previa del corte del puente, una acción que la Multisectorial emprende desde agosto de 2020, cuando el humo llegó para quedarse.
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Los glaciares de Tierra del Fuego con el tiempo contado

 


Alarma por el dramático fenómeno que pondrá fin a los glaciares de Tierra del Fuego: para cuándo se prevé

Fecha de Publicación
: 19/09/2022
Fuente: La Nación
Provincia/Región: Tierra del Fuego


Los especialistas sostienen que los “glaciares de circo”, característicos de aquella provincia, se encuentran en retroceso por el cambio climático
En un diagnóstico desolador, los científicos advierten que a los glaciares de Tierra del Fuego les restan entre 40 y 60 años antes de desaparecer. Los especialistas sostienen que los “glaciares de circo”, característicos de aquella provincia, se encuentran en retroceso por el cambio climático. Las altas temperaturas –como efecto del calentamiento global– están acelerando los deshielos y redujeron un tercio de su masa en los últimos 20 años.
El fenómeno afecta en especial al Martial, un emblema natural de Ushuaia que se partió en tres fragmentos. La ciudad depende casi en su totalidad del glaciar para el suministro de agua potable y, de continuar la tendencia, podría entrar en estado de emergencia. El pronóstico es pesimista, pero no irreversible si se adoptan acciones inmediatas. La posibilidad de recuperarlos, según consignan, será un proceso lento en el que tengan que registrarse varias décadas con temperaturas por debajo de las actuales que permitan una acumulación de capas de nieve para nutrir nuevamente a los cuerpos de hielo.
El problema fue advertido con crudeza en Hostil, un documental de producción argentina enfocado en los glaciares del archipiélago fueguino y su relación directa con las turberas, que son humedales milenarios que dependen del agua dulce para que su ecosistema no colapse. El documental contó con la colaboración y los estudios de científicos del Centro Austral de Investigaciones Científicas (Cadic) del Conicet. Además colaboró la empresa tecnológica Google, que aportó una cámara especial que permitió a los realizadores mapear los rincones más inhóspitos de la provincia del sur argentino y registrar en una expedición osada cómo el hielo cede por la intensidad solar y el impacto de la actividad humana.
Los especialistas destacan la necesidad de que a futuro se declare a la Península Mitre área protegida. El sitio alberga glaciares, una fauna y flora diversas, y contiene el 84% de las turberas del país, un activo natural que es clave para evitar la liberación de carbono en la atmósfera.
“Si se mantiene la tendencia climática, de temperaturas elevadas y cada vez menos precipitaciones, los glaciares de circo de Tierra del Fuego van a desaparecer en los próximos 40 a 60 años. La mayoría están retrocediendo de forma muy acelerada, sobre todo en los últimos cinco años, que coinciden con el incremento alto de las temperaturas registradas en ese período. Revertir la situación climática va a ser muy difícil”, dice a LA NACION Juan Federico Ponce, geólogo investigador del Conicet y profesor de la Universidad Nacional de Tierra del Fuego.
Los glaciares de circo son un tipo más pequeño de estas formaciones. Se ubican en las cabeceras de los valles recluidos en los picos de las montañas. Al no tener una altura muy elevada respecto del nivel del mar, son muy sensibles al aumento de las temperaturas en el planeta. Son los que predominan en la provincia y hay relevados alrededor de 110 en la cordillera fueguina, aunque el número es actualizado cada año por los investigadores, con una tendencia descendente.
El fenómeno de retroceso es explícito en el glaciar Martial, que está ubicado en Ushuaia y puede ser avistado desde casi cualquier punto de la ciudad. Por el adelgazamiento de su masa terminó por fragmentarse. “Con el correr del tiempo, por reducción de la superficie se dividió en tres cuerpos más pequeños”, dice el glaciólogo. Y agrega: “La posibilidad de recuperar los glaciares es un proceso lento. Tienen que haber varias décadas con una temperatura por debajo de la actual para que se estabilicen primero y dejen de retroceder. La formación de hielo se hace a través de la acumulación de nieve en la superficie. Los glaciares se alimentan de nieve que queda allí, y tiene que aguantar todo un verano sin derretirse para que sobre ella caiga más nieve y se forme el hielo”.
La problemática no se limita a los glaciares toda vez que, como cuerpos de agua, están asociados a los arroyos que alimentan ríos y lagos. También de ellos dependen las turberas, que son ecosistemas sensibles con abundante vegetación en los valles de Tierra del Fuego. Estos ambientes formados hace más de 19.000 años funcionan como “aspiradoras de carbono” y necesitan de mucha humedad y frío para seguir existiendo. “La desaparición de los glaciares corta el suministro de agua que les llega. Son humedales que sirven de reservorios de carbono porque evitan que los gases de la descomposición orgánica se libere en la atmósfera”, detalla Ponce.
Las turberas de Tierra del Fuego son lugares prácticamente vírgenes y únicos en el mundo. En la antigüedad las tribus yámanas habitaron esas regiones, pero mantuvieron una relación con la naturaleza que no dejó huellas en el ecosistema y se mantienen en la forma natural que fueron generadas. Tienen una superficie con vegetación viva, principalmente musgos y a medida que la flora muere se acumula en su fondo. Tienen una estructura fibrosa y retienen mucha agua. Alcanzan hasta 16 metros de profundidad y sirven, a la vez, de archivo geológico vivo porque con el estudio de sus capas se puede conocer cuál era el clima en la época de cada una de ellas.
Antes de que se tomara conciencia, se explotaban por su gran poder calorífico. Los panes de turba eran extraídos por el hombre, se drenaba el agua y se usaban para calentar salamandras y chimeneas. La actividad aprovechaba la energía de las turberas, pero paralelamente aceleraba la liberación de carbono en la atmósfera, por lo que comenzó a limitarse.

La travesía
Llevar los papers y las advertencias científicas al campo real les requirió a los realizadores de Hostil viajar al corazón del problema. Un grupo de jóvenes se aventuró en una travesía de un mes por las montañas para documentar el estado de los glaciares de circo –entre ellos, el Martial y El Ojo del Albino– y las turberas. Finalmente se embarcaron en velero y navegaron las aguas heladas del canal de Beagle hasta alcanzar las profundidades de la Península Mitre, una región de 2400 kilómetros cuadrados de sierras, faldas, valles, bosques, lagunas y ríos. La zona vista desde un mapa es la punta oriental del triángulo que representa Tierra del Fuego.
“Está invisibilizado lo que sucede en los glaciares de Tierra del Fuego y queremos que la gente tome conciencia de lo que está sucediendo. Documentamos con un registro fotográfico que sirve a las próximas generaciones para que entiendan cómo estaba la isla en ese momento específico del tiempo. Google se interesó mucho en el proyecto y nos prestaron la cámara que utilizan para mapear el Google Maps”, dice a LA NACION Fernando Urdapilleta, director del documental.
La empresa tecnológica aportó la cámara Google Trekker, que es una una mochila pesada que fotografía en 360 grados con alta resolución. Luego las imágenes fueron subidas al Google Street View para que cualquier persona pueda recorrerlas con una computadora. El ambientalista Alexis Caporale y Federico Frigerio, diputado nacional de Tierra del Fuego y productor del documental, se encargaron de llevar el dispositivo de 15 lentes para registrar las cumbres de los glaciares y los senderos de la Península Mitre.
“La película es un llamado a la reflexión de esta realidad y a la acción de proteger los ecosistemas. La ciudad de Ushuaia se nutre de agua dulce exclusivamente del glaciar Martial, cuando desaparezca se va a tener que preparar para la emergencia. Se pueden tomar distintas medidas para ralentizar el retroceso, pero la realidad es que nos tenemos que hacer la idea de que Tierra del Fuego se va a quedar sin glaciares. Somos la última generación que los va a ver en la isla, es dramático”, denuncia Urdapilleta.
Después agrega: “Las turberas están íntimamente vinculadas con los glaciares y son casi el único ambiente que podemos proteger ahora de forma activa. Son aspiradoras de carbono que absorben las emisiones de los autos, las fábricas y todos los gases de efecto invernadero que producen el aumento de las temperaturas y el consecuente derretimiento de los glaciares. Protegiendo la turba se protegen los glaciares”.
La expedición a los glaciares fue liderada por el alpinista Leandro Hernández, experto en travesías por hielo continental. No fueron pocos los contratiempos presentes al mapear la zona. En un ascenso, uno de los drones que los acompañaba perdió señal en la altura e impactó contra una montaña. Por otro lado, tuvieron que sortear las grietas escondidas en la nieve, un riesgo que aumentaba por el peso de las cámaras y los equipos que transportaban, en especial el del Trekker. “Podés caer y quedar atrapado en una gruta. Los glaciares de circo están a medio derretir y podés dar un paso en falso en un lugar que parece firme, pero abajo hay una cueva. Arriba del glaciar se produce un microclima distinto y tenés que estar siempre en movimiento por el peligro de congelarte”, describió Urdapilleta.
De acuerdo con Frigerio, el objetivo del documental fue amplificar y visibilizar lo que los científicos vienen advirtiendo hace más de 50 años en estudios e investigaciones irrefutables sobre el problema. “Lugares como Península Mitre quedan muy pocos en la Tierra. Por la hostilidad del clima se cuidó sola durante miles de años. Lo inhóspito y hostil del clima expulsó cualquier intento del hombre de establecerse ahí”, detalla Frigerio.
Luego advierte: “Pero indefectiblemente el hombre, el turismo y la tecnología avanzan, y cada vez hay más visitantes en esa zona. Hoy es una anarquía. Si no se planifican los senderos, el mantenimiento y se protege el área, puede destruirse. Hay que evitarlo”.
Existe actualmente un proyecto de ley en la legislatura de Tierra del Fuego para declarar la Península Mitre área protegida y convertirla en un parque provincial. La iniciativa busca proteger el ecosistema de los glaciares, las turberas, la flora y la fauna, y un bosque de macroalgas. A tres años de su presentación todavía no fue tratado en el recinto.
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Salta busca una nueva ley de bosques, pero 'productivista'

 


El acuerdo, casi imposible, que se busca para la ley de bosques

Fecha de Publicación: 14/09/2022
Fuente: El Tribuno
Provincia/Región: Salta


Insisten en que el ordenamiento habilite nuevas áreas de producción. Buscan conciliar con una mediación posturas productivistas y conservadoras.
La intención del Gobierno provincial es que antes de fin de año esté terminada la primera revisión del mapa de ordenamiento territorial de los bosques nativos (OTBN) de Salta, que ya viene con un retraso de 9 años, de acuerdo a lo que marca la ley nacional de bosques (Ley 26.331). Sin embargo, el proceso participativo requerido para su aprobación se enfrenta a una disyuntiva entre los sectores, que se podrían reducir como "productivistas" y "conservadores" o ambientalistas. Esas posturas, autoimpuestas como contrarias, ya hicieron fracasar en otras oportunidades la posibilidad de ordenar de manera eficaz las zonas en las que se pueda, justamente, producir (agricultura y ganadería) y proteger el medio ambiente en Salta. Dos visiones que no se cumplen en gran parte del territorio salteño.
Como dio a conocer la semana pasada El Tribuno, en la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Provincia, que es donde se encara la revisión del OTBN, buscarán contrartar un servicio de mediación para tratar de conciliar a las partes.
La coordinadora del proceso, María Gil, explicó en esa oportunidad que el trabajo que están realizando no apunta a reducir las áreas protegidas, categorizadas en rojo, amarillo y verde. Cada color restringe o habilita la utilización productiva de tierras de acuerdo a un valor ambiental asignado.
Consultados para esta nota, dirigentes del campo salteño insistieron en la posibilidad de desarrollo que tiene la provincia si se permite un uso de suelo diferente al actual. Es en referencia a la superficie pintada de amarillo donde solo se puede producir sin afectar el bosque nativo (sin desmontes). Especialmente a las dos millones de hectáreas que corresponden a gran parte de Rivadavia y el este de San Martín, sectores que figuran entre los más afectados por la pobreza en el país.
"Lo que nadie dice es de qué va a vivir la gente del Chaco salteño, que está con esa limitación de poder producir. Seguirá viviendo del asistencialismo como ocurre hasta ahora y en la indigencia en la que vive actualmente", dijo Carlos Segón, presidente de la Sociedad Rural Salteña.
"En la medida que el ordenamiento territorial signifique mayores limitaciones a la actividad productiva el sector no va acompañar esa revisión del mapa de ordenamiento territorial", fijó postura el dirigente.
Lucas Norris, titular de la Asociación de Productores de Granos del Norte (Prograno), sostuvo, en tanto, que en las discusiones por el OTBN "no haya una cuestión de ideología".
"Tenemos que pensar con el desarrollo qué es lo se puede hacer, que nos dejen hacerlo o habilitarlo y que no haya una cuestión de ideología que diga que no se puede hacer nada", señaló Norris.
"Es positivo que el gobernador se haya manifestado a favor de una provincia productiva, porque en definitiva es lo que necesitamos, hay que ver cómo logramos hacerlo y que no quede en palabras", agregó.

Acciones
El trabajo de revisión del mapa se realiza desde el año pasado. Al proceso participativo de consulta lo integran especialistas de las universidades locales, científicos del Conicet y miembros de diferentes instituciones relacionadas con la temática.
Según adelantaron a este diario desde la Secretaría de Ambiente, en los próximos días se publicarán en la página web del organismo los distintos documentos, mapas y estudios técnicos que se elaboraron y desarrollaron para el OTBN de Salta.
El nuevo mapa estaría listo a fines de noviembre o en diciembre. El trabajo será elevado, luego, a la Legislatura para su tratamiento. Ese último paso se realizaría el año próximo.
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Gualeguaychú y un barrio privado que deberá desmantelarse

 


Barrio privado provoca inundaciones y debe pagar $200.000 de multa por día

Fecha de Publicación
: 13/09/2022
Fuente: Tiempo Argentino
Provincia/Región: Entre Ríos


La Municipalidad de Gualeguaychú había pedido hace tres años la "paralización y demolición" del barrio "Amarras", ya que las obras de elevación de la tierra habían provocado la crecida del río y "la evacuación de más de 150 personas" en varias ocasiones.
Un juez de Entre Ríos ordenó que la empresa Altos de Unzué, de la provincia de Entre Ríos y el municipio entrerriano de Pueblo General Belgrano, deberán pagar $200.000 de multa por cada día en el que no se avance en los trabajos para desmantelar un barrio privado donde las obras generaron la crecida del río e inundaciones, informaron fuentes judiciales. La Municipalidad de Gualeguaychú había pedido hace tres años la «paralización y demolición» del barrio, ya que las obras de elevación de la tierra habían provocado la crecida del río y «la evacuación de más de 150 personas» en varias ocasiones.
De acuerdo a esa denuncia, la crecida repentina también generó que lugares emblemáticos, como el Parque Unzué, la costanera, caminos turísticos, clubes, playas, campos y barrios de la zona de la costanera y el puerto, quedaran bajo agua. Además, el barrio náutico Amarras «era el único lugar no inundado de toda la zona» y «el agua que desplazaba ingresaba profundamente en el casco urbano, afectando zonas densamente pobladas», según la denuncia.

Un barrio privado problemático
En julio del 2021, la Corte Suprema de Justicia de la Nación (CSJN) había dejado sin efecto una sentencia provincial que permitía continuar los trabajos y en octubre de ese año, el Superior Tribunal de Justicia entrerriano (STJER) debió realizar un nuevo fallo. Un mes más tarde, la CSJN rechazó el recurso extraordinario interpuesto por ese municipio, la provincia de Entre Ríos, y la empresa constructora del barrio náutico «Amarras», y mantuvo en pie la nueva decisión. En esa sentencia, el STJER ordenó la «demolición y desmantelamiento y recomposición del ambiente, volviendo las cosas a su estado anterior» a la construcción del barrio, tras detectar «la alteración negativa del medio ambiente».
Los jueces entrerrianos señalaron que quedó «efectivamente patentizada la existencia de una alteración negativa del medio ambiente», y la decisión se basa en «la prevención del daño futuro», en «la recomposición de la polución ambiental ya causada» y en generar «un resarcimiento pecuniario» por los «daños irreversibles». Por ende, la empresa «Altos de Unzué» encargada de la construcción y la Municipalidad de Pueblo General Belgrano, donde se construyó el barrio privado, tenían 180 días para el desmantelamiento de la zona.
Aún así, no se detectaron cambios ni ninguna actividad que dé cuenta de que la empresa «tenga voluntad de cumplir» con la sentencia, según se indicó. Por eso, ayer el juez civil y comercial de Gualeguaychú Javier Mudrovici estableció llevar adelante el desmantelamiento e impuso una multa de $200.000 a la empresa, el municipio y la provincia como «multa o astreintes» por cada día de atraso en cumplir con el fallo.
Desde 2015 se realizaron charlas, marchas, y presentaciones del documental con testimonios de lugareños, abogados, ambientalistas, especialistas profesionales que realizaron estudios en la zona. Además, más de 2.000 vecinos y vecinas de Gualeguaychú adhirieron a las demandas municipales.
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Se quemó el 10% de Córdoba en 20 años

 


Incendios en Córdoba: en los últimos 20 años se quemó el equivalente al 10% de la provincia

Fecha de Publicación
: 09/09/2022
Fuente: La Voz del Interior
Provincia/Región: Córdoba


Entre 2001 y 2020 el fuego arrasó con 1,6 millones de hectáreas del territorio provincial. Las sierras son el sector más afectado, pero los Bañados del Río Dulce muestran más recurrencia de las llamas.
Córdoba es territorio de fuego. Entre 2001 y 2020 se quemaron 1,6 millones de hectáreas, lo que equivale al 10% del territorio provincial.
Un relevamiento reciente, realizado por investigadores de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), indica que en ese período ocurrieron 1.418 eventos de incendios de más de 14 hectáreas. El 2020 fue el año con más superficie afectada con cerca de 300 mil hectáreas. Muchos lugares fueron víctimas de las llamas varias veces durante esos 20 años.
El trabajo encontró una relación significativa entre la situación de sequía y la posibilidad de incendios. Sofía Sánchez, una de las autoras del trabajo y estudiante del doctorado en Ciencias Agronómicas de la UNC, advierte: “La sequía ayuda a que los incendios se propaguen, pero no es la variable determinante para la ocurrencia y, menos aún, la extensión de los incendios”.
Los otros autores del trabajo son Mariano Grilli, Marcos Karlin, Romina Fachinetti y Andrés Ravelo.
El estudio dividió a la provincia en cinco regiones. En las sierras se registraron un mayor número de incendios y de área quemada, cuando la condición de sequía actual y a corto plazo fueron mayores. Fueron más de 900 mil hectáreas de la zona serrana incendiadas en dos décadas, esto es, más de un tercio de esa región. Fue el sector más afectado.
Según Sánchez, en la zona de las sierras la alta frecuencia de incendios de las últimas dos décadas no estaría tan vinculada a la sequía, sino a otros factores como negligencias, aumento poblacional en áreas de interfase urbano-rural, basurales a cielo abierto y otros conflictos en el territorio.
“Todas estas variables, sumadas a las condiciones ambientales de finales de invierno y principios de primavera, hacen que la frecuencia de incendios sea alta”, asegura.

En los Bañados del Río Dulce, mas focos
Los Bañados del Río Dulce, en el noreste provincial, fue el sector como mayor cantidad de incendios: 516. Se quemaron 309 mil hectáreas, el 72% de la región. En general, cada evento no superó las mil hectáreas con varias repeticiones a lo largo de los 20 años. Algunos sitios se quemaron hasta 11 veces.
En esta zona, al norte de la laguna Mar Chiquita, los productores utilizan el fuego para provocar el rebrote de pastura con el que alimentan el ganado. Por ello, las condiciones de sequía no son un factor de fuerte incidencia.
Ahora este sector forma parte de la Reserva Nacional Ansenuza. Para la Administración de Parques Nacionales (APN) será un desafío trabajar con estas comunidades campesinas que viven hace décadas en esa región y que utilizan el fuego como una práctica de subsistencia.
La APN utiliza el fuego en varias áreas protegidas para bajar la biomasa y prevenir incendios más graves. Son los casos de Quebrada del Condorito (en Córdoba), Mburucuyá y Pilcomayo (en otras provincias). Las quemas controladas se practican en sitios donde hay escasez de grandes herbívoros que ayudan a mantener el equilibro ecológico.
Parques Nacionales está realizando un relevamiento socioambiental en la comunidad de los Bañados del Río Dulce para conocer las inquietudes y prácticas de los campesinos que viven desde hace décadas en el lugar.

Fuego en otras regiones de Córdoba
Otra región muy castigada por el fuego en esta provincia es la llanura chaqueña, la franja central del norte cordobés. Fueron 162 incendios y 67 mil hectáreas afectadas entre 2001 y 2020.
El extremo noroeste (definido en el trabajo como bolsón serrano) recibió solo 25 incendios y 16 mil hectáreas quemadas en dos décadas. Fue el menos afectado.
La extensa región pampeana (10 millones de hectáreas) fue foco de 391 fuegos y 260 mil hectáreas afectadas (2,5% de ese sector). En este lugar lo que se quema son restos secos de cultivos y pastizales, ya que queda muy poco bosque nativo.

Evitar la fuente de ignición
Sánchez explica que las personas no podemos modificar las condiciones climáticas pero sí podemos prevenir el fuego si controlamos la fuente de ignición.
“Debemos eliminar los focos de ignición de origen antrópico como quemas intencionales y accidentes domésticos, entre otros. Hay que generar conciencia en la sociedad y hacer uso de las herramientas de ordenamiento territorial, como la ley provincial de Manejo del Fuego (8751) y la de Ordenamiento Territorial del Bosque Nativo (9814) que prohíben encender fuego”, detalla.
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Inician el debate del proyecto sobre humedales

 


Ley de humedales: diputados vienen a Rosario a iniciar el debate del proyecto

Fecha de Publicación
: 08/09/2022
Fuente: La Capital
Provincia/Región: Nacional


Será el viernes en el Concejo, en el marco de una reunión de trabajo de la comisión de Recursos Naturales y Conservación del Ambiente Humano
 Los diputados integrantes de la comisión de Recursos Naturales y Conservación del Ambiente Humano desarrollarán una reunión de trabajo en la ciudad, en el marco del comienzo del debate sobre los distintos proyectos de ley de humedales que fueron presentados en el Congreso nacional y que tienen los giros para ser tratados. Será el viernes, desde las 11, en el Concejo Municipal. Actualmente hay 12 proyectos girados a comisiones: ocho se presentaron en diputados y cuatro en la Cámara de Senadores. El encuentro se da luego de que en agosto llegara casi a cuadruplicarse la cantidad de focos de calor en el Delta del Paraná en comparación con enero, que era el peor de los meses del 2022 en ese sentido.
En lo que va desde período legislativo, se presentaron 12 proyectos: ocho en diputados y cuatro en senadores.
En la Cámara de Diputados fueron ocho las iniciativas para la ley de humedales presentadas que cuentan con estado parlamentario, expuestas por los legisladores Leonardo Grosso (Frente de Todos, provincia de Buenos Aires), Jorge Vara (Unión Cívica Radical, Corrientes), Enrique Estévez (Socialistas, Santa Fe), Alicia Aparicio (Frente de Todos, provincia de Buenos Aires), Diego Sartori (Frente de la Concordia Misionero, Misiones), Graciela Camaño (Identidad Bonaerense, provincia de Buenos Aires), Hernán Pérez Araujo (Frente de Todos, La Pampa) y Gabriela Lena (Unión Cívica Radical, Entre Ríos).
En tanto, en la Cámara de Senadores hay cuatro proyectos de ley de humedales que cuentan con estado parlamentario. Las iniciativas fueron presentadas por José Antonio Rodas (Frente de Todos, Chaco), José María Torello (Cambiemos, provincia de Buenos Aires), María Clara Vega (Cambiemos, La Rioja) y Marcelo Lewandowski (Frente de Todos, Santa Fe). Todos tienen giros a las comisiones de Agricultura, Ganadería y Pesca, Ambiente Y Desarrollo Sustentable, y Presupuesto y Hacienda.
El foco estuvo puesto todo el año sobre la presentación del diputado Leonardo Grosso, quien encabezará la reunión del viernes en Rosario, ya que la iniciativa cuenta con el consenso de organizaciones ambientalistas, especialistas y científicos, y el texto del proyecto toma el dictamen unificado que aprobó la misma comisión de Recursos Naturales y Conservación del Ambiente Humano en 2020. La iniciativa obtuvo el giro a esta comisión, además de las de Agricultura y Ganadería y de Presupuesto cinco meses después de su presentación.
Con septiembre ya iniciado, con menos de tres meses de actividad legislativa y a las puertas de un año electoral, desde las organizaciones exigen celeridad a los legisladores para tratar los proyectos para que se consiga el dictamen para que el proyecto de ley de humedales pueda llegar al recinto de la Cámara de Diputados y, así, tratarlo lo antes posible.

Agosto récord
El comienzo de las reuniones de trabajo sobre los proyectos de ley de humedales se da luego de conocerse que agosto fue el mes que más focos de calor se detectaron en el Delta del Paraná, según datos del Museo Regional de Ciencias Naturales Antonio Scasso, de San Nicolás, que lleva un relevamiento semanal sobre esta problemática desde hace años.
Los datos concluyentes de agosto refieren que la cantidad de focos de calor detectados en el territorio Piecas (que comprende un tramo de islas del Paraná Medio a la altura de las ciudades de Paraná y Santa Fe, y el Delta del Paraná, en una superficie aproximada de 2.300.000 hectáreas, de las cuales un 8% corresponde a Santa Fe, un 16% a Buenos Aires y el 66% restante a Entre Ríos) fue casi cuatro veces superior a los que se detectaron en enero, mes que se presentaba como el peor en lo que va del año: mientras que en enero se registraron 2.487 focos, el mes pasado se detectaron 8.890. A su vez, la cifra de agosto triplica al promedio para este mismo mes en los últimos diez años.
La cantidad de focos que se detectaron en lo que va de 2022 ya superó a todo 2021: ya se quemaron 220.000 hectáreas en lo que va del año, más de un cuarto de lo que ya se quemó desde que comenzaron los incendios sin control en febrero de 2020 (unas 800.000 hectáreas).

Reprogramación del acampe
Por su parte, las organizaciones ambientalistas enmarcadas en la Acción Plurinacional por los Humedales llevan adelante distintas asambleas para definir la nueva fecha en que realizarán el corte y acampe sobre el puente Rosario-Victoria, tras la suspensión de este fin de semana a raíz del intento de magnicidio contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
La manifestación tiene como eje el pedido de celeridad de tratamiento de los proyectos de ley de humedales en comisiones para que pueda tratarse la iniciativa en el recinto de la Cámara de Diputados.

Lanzan el Día B
Con la presencia del intendente Pablo Javkin y otras destacadas autoridades locales, hoy, a las 13, se realizará una conferencia de prensa para presentar el “Día B 2022”, en el Galpón 11, en la Franja Joven que bordea el río.
Se trata del encuentro nacional del Movimiento Global B, que reúne a actores clave para acelerar las nuevas economías en Argentina; que activan el ecosistema nacional y potencian el local; que inspiran promoviendo agentes de cambio; y también nutren de experiencias y aprendizajes para lograr mayores y mejores soluciones a las problemáticas sociales y ambientales.
Bajo el lema “Aceleremos el Impacto”, el Día B busca impulsar las mejores soluciones a las problemáticas sociales y ambientales más urgentes. Será un evento innovador y motivante, combinando inspiración y acción, que se desarrollará en Rosario, el próximo 4 de noviembre.
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En Argentina ya perdimos la mitad de los boques

 


Bosques nativos: ya se perdieron la mitad de los que había en el país

Fecha de Publicación
: 31/08/2022
Fuente: El Auditor
Provincia/Región: Nacional


Si bien una ley procura su conservación, los desmontes e incendios arrasan con la superficie boscosa. La Auditoría General de la Nación advirtió las fallas para implementar la norma.
Cada 29 de agosto, desde 1901, se celebra en nuestro país el Día del Árbol. La fecha fue establecida por el Consejo Nacional de Educación con el objetivo de concientizar sobre el cuidado y la protección de las superficies arboladas. Sin embargo, Argentina ya perdió más de la mitad de sus bosques nativos, una tendencia que se replica en el mundo, donde desaparecen anualmente 13 millones de hectáreas.
Entre 2010 y 2020 América del Sur perdió 26 millones de hectáreas de bosques, la segunda tasa más alta del mundo después de África, según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), desde donde posicionaron a la Argentina entre los 10 países con más desmontes.
Según el Ministerio de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, entre 1998 y 2018 se perdieron 6,5 millones de hectáreas de la superficie boscosa. Si bien desde 2007 nuestro país cuenta con la Ley 26.331 de Bosques Nativos que busca protegerlos, al año se siguen desmontando unas 200.000 hectáreas según aseguraron desde Greenpeace. “Desde la Ley bajaron los niveles de deforestación pero siguen siendo altos y más de la mitad de los desmontes son ilegales”, mencionó Hernán Giardini, coordinador de la campaña de Bosques de Greenpeace en diálogo con El Auditor.info.
“La Ley se cumple a medias ya que se sigue desmontando donde no se puede y las multas que se aplican son bajas o terminan judicializadas. Esto nos preocupa, la destrucción de bosques debería convertirse en un delito penal”, alertó Giardini. Las causas de pérdida de masa boscosa son los incendios, los desarrollos agrícolas, ganaderos o inmobiliarios “como sucedió en la Patagonia y en Córdoba con los incendios forestales”, señaló.
Los bosques son los ecosistemas terrestres que albergan más biodiversidad. "Son claves en la regulación hídrica y para la crisis climática que se da por la quema de combustibles fósiles pero el segundo motivo es por deforestación”, destacó Giardini en relación a la importancia en cuanto a su protección y conservación.

Control ambiental y auditorías
En 2021 la Auditoría General de la Nación (AGN) observó dificultades para implementar la Ley de Bosques, señalando la falta de reglamentación de metas e indicadores de la normativa como una de las razones. Además el organismo relevó que 16 provincias tienen sus ordenamientos territoriales desactualizados. Por otro lado, detectó incongruencias normativas en varias jurisdicciones. Asimismo, observaron la falta de actualización del inventario y alertaron por la tendencia creciente en la pérdida de bosques nativos. Este no fue el único informe en la materia, ya que regularmente, la AGN controla estos recursos.
“La AGN controla la materia bosques previo a tener una Ley 26.331 de Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental de Bosques Nativos al igual que la actualización del Ordenamiento Territorial de los Bosques Nativos (OTBN) y la actualización del Inventario Nacional de Bosques Nativos”, indicó Sol Klas, integrante de la AGN, secretaria de Ambiente de la Asociación de Personal de Organismos de Control (APOC) y referente del Frente Sindical de Acción Climática.
La importancia de auditar la implementación de la Ley de bosques “es clave”, aseguró Klas, ya que permite identificar “cuáles son las causas que generan el incumplimiento de la norma o determinar cómo o por qué las políticas públicas de protección de bosques no pueden ser eficaces, eficientes o efectivas. De ahí la importancia de las auditorías de seguimiento de las recomendaciones, que nos permiten evaluar el grado de avance sobre las sugerencias efectuadas por los equipos de auditoría”, añadió Klas quien remarcó que los bosques son parte de la Agenda 2030, contemplados en el Objetivo de Desarrollo Sostenible Nº 15.

El norte del país, la región más afectada
Según los últimos datos del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible en 2020 se perdieron 333.222 hectáreas en nuestro país de bosque, de los cuales el 80% de la deforestación la concentran cuatro provincias en el norte del país. Este año, Greenpeace publicó un informe donde aseguraban que durante 2021 se deforestaron 110.180 hectáreas en el norte argentino, de las cuales 52.290 corresponden a la provincia de Santiago del Estero; 29.165 a Formosa; 18.068 a Chaco y 10.657 a Salta.
Ignacio Goytia es el director General de Planificación Territorial de la Secretaría de Ambiente de Salta y en comunicación con este medio aseguró que la provincia disminuyó sus desmontes: “ahora estamos en el quinto lugar, bajaron mucho los desmontes ilegales. Hicimos un gran esfuerzo para evitarlos promocionando otras prácticas y usos sostenible”. Por año, representan unas 1.600 a 2.000 hectáreas las afectadas por talas ilegales.
Siguiendo los datos que enviaron desde la dirección, para 2022 se autorizan desmontes en unas 19.678 hectáreas, una proporción superior a lo desmontado el año pasado. "Es superior porque en 2020 y 2021 por la pandemia no estuvo funcionando el área que autoriza, y por eso fueron menos. Una vez que se autoriza tienen hasta 5 años para efectuar el desmonte, entonces muchas veces hay un desfase”, explicó.
Actualmente se encuentran trabajando en una propuesta de Ordenamiento Territorial, el cual está vencido desde 2014. “Estamos en un proceso clave, convocamos al Consejo Asesor y a especialistas, para definir los posibles mapas, si todo sale bien a fin de año lo tendríamos aprobado”, informó el funcionario.

El fuego y los incendios
Otra de las grandes causas de pérdida de bosques son los incendios. En 2021 el Ministerio de Ambiente registró 330 mil hectáreas afectadas por el fuego, pero solo a principios de 2022 se quemaron 800 mil hectáreas. “El clima está jugando en contra de los bosques nativos. En todo el territorio venimos de una sequía de dos años, con una bajante del Río Paraná que impactó en toda la cuenca y generó un alto riesgo de incendios. Están ocurriendo algunos de gran gravedad como los de Corrientes, Misiones y Formosa, donde se perdieron muchas hectáreas y también en la Patagonia”, alarmó Naguel Schenone, investigador e integrante de la Fundación Bosques Nativos.
Recuperar estos bosques puede llevar 100 años y con los fenómenos climáticos cada vez más extremos, hay mayores riesgos y amenazas. “Se genera un ciclo que es contraproducente porque cada vez que se quema un bosque, se emite más dióxido de carbono a la atmósfera y continuamos en una generación de calentamiento atmosférico. Esto está pasando a nivel global”, expresó Schenone quien detalló que el mal manejo de las tierras, el descuido y las prácticas indebidas son un factor que hacen que el riesgo escale.
Desde Bosques Nativos trabajan en diferentes proyectos en Misiones, en zonas incendiadas en Chubut, junto a comunidades Huarpes recuperando bosques de algarrobo en Mendoza, en Jujuy con modelos de ganadería, en la provincia de Buenos Aires y en Formosa. Su objetivo es recuperar y restaurar los sistemas boscosos que han sufrido incendios, desmontes o sobrepastoreo. Hasta la fecha llevan plantados más de 200.000 árboles nativos y una de las piezas fundamentales en esta tarea, son las comunidades.
“Muchísimas personas viven en los montes, en los bosques. Comunidades originarias como los Qom, Pilagá, Wichí lo habitan, lo usan, es su medio de vida, tienen un vínculo muy fuerte y su día a día transcurre con el bosque como elemento”, aseveró Schenon integrante de la fundación con la cual se puede colaborar. Más de 300 millones de personas en todo el mundo habitan los bosques de todas las latitudes y unos 1.600 millones dependen directamente de ellos para su sustento. En Argentina no se sabe con exactitud cuántos habitantes tienen estos ecosistemas.

Vivir en la selva misionera
Patricia Araya vive en la selva misionera desde hace 13 años en unos de los proyectos de reforestación de la Fundación Bosques Nativos, junto a su marido y sus tres hijos, en una chacra que comparten con otras familias. “Nos dedicamos a la reforestación de los montes nativos. Para nosotros es sumamente importante recuperar los animales que se fueron perdiendo por la deforestación. Conocer la riqueza que tenemos nos da el valor necesario para cuidarlo”, reflexionó.
Junto a su esposo son los encargados de hacer plantines, armar el vivero, juntar semillas, sembrar y plantar. “Trabajamos con otras familias y la comunidad inculcándoles conocimientos como el cuidado del agua a quienes tienen ganado, todo lo que se puede hacer para cuidar el medio ambiente, lo hacemos”, describió. Del monte nativo extraen frutas para producción de mermeladas, madera, pastizal para los animales y productos como la mandioca. “Para nosotros es nuestro hogar, nuestro ritmo de vida. Me gustaría incentivar a las personas a cuidar la naturaleza, los recursos que tenemos, pero entiendo que para ver lo que nosotros vemos, al monte hay que vivirlo”, finalizó Araya.
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La situación en el Delta sigue siendo crítica y el peligro seguirá

 


Récord de incendios: por qué se queman los humedales y qué tan frecuente será respirar humo

Fecha de Publicación
: 30/08/2022
Fuente: Clarín
Provincia/Región: Litoral Argentino


Las condiciones para que haya nuevos focos aumentan. La Justicia no halla responsables. Y la ley de protección de los ecosistemas brilla por su ausencia.
El miércoles pasado el intendente de Rosario, Pablo Javkin, atendió por teléfono a Clarín. Fue un llamado breve. Estaba cruzando el puente que une la ciudad santafecina con la localidad de Victoria, en la provincia de Entre Ríos. Iba acompañado por otros jefes comunales de la región para entrevistarse con funcionarios judiciales por los incendios que no cesan y el humo que no se disipa. Lo inmediato es detener el avance de las llamas en el Delta del Paraná, esa vasta zona que toma parte de Santa Fe, de Entre Ríos y el norte de Buenos Aires. Pero nadie ofrece por ahora soluciones concretas. Sólo las lluvias.
Se habla de focos intencionales, pero no aparecen los responsables. Desde que la seguidilla comenzó, hace ya más de dos meses, sólo hubo tres detenidos, que fueron liberados. Se defendieron diciendo que no estaban prendiendo fuego, sino creando cortafuegos para frenar el desastre. Aún así, de haber sido culpables, hubieran sido demasiado pocos para tanta quema: una superficie arrasada equivalente hasta ahora a 112 veces la Ciudad de Buenos Aires, según estimaciones de la Justicia.
Han aparecido denuncias contra el ministro de Medio Ambiente, Juan Cabandié, por la crisis ecológica. Cabandié ha señalado por las llamas a los productores. El humo ha llegado al centro porteño. El Ejército se metió en las tareas de lucha contra la catástrofe, por pedido de los gobernadores. Hay brigadistas provenientes del sur del país trabajando ahora mismo en terreno. Pero la amenaza no cede, el suelo está caliente, la humedad es cero y el campo científico viene vaticinando que todo va a empeorar.
En la última semana se conocieron dos informes que señalan que el aire de Rosario, la ciudad más densamente poblada frente a las columnas de humo, es seis veces más tóxico que el de otras grandes urbes. Hablan de niveles alarmantes para la salud de la población.
De acuerdo a los relevamientos del Observatorio Ambiental de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) y la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) el aire presenta entre 6 y 9 veces mayor concentración de material particulado de alto volumen capaz de provocar enfermedades respiratorias, cardíacas y cáncer.
Pero más allá de las consecuencias y los posibles responsables (algo que está por verse en una causa federal que tiene a varios actores como querellantes), los fuegos del Delta no están desanclados de la crisis climática. Están alentados por una de las sequías más grandes de los últimos años.
“La sequía del año 2019 extendida al 2022, el nivel más bajo del río que amenaza el abastecimiento hídrico para consumo y el uso del fuego para eliminar los pastos nativos están provocando cifras récord de incendios en el Delta del Paraná”, afirman los expertos de la Universidad de Rosario.
La aseveración se ve respaldada por otros datos del sector agropecuario. En el corazón agrícola de la Argentina, en lo que va del año apenas cayeron 196 mm de lluvias. A igual fecha del año pasado, habían caído 564 mm. Esa “seca”, como la llaman los productores, no sólo genera un tremendo problema económico, sino que adquiere la forma de combustible en la zona de humedales. La tragedia es completa si se confirman las sospechas de operaciones inmobiliarias detrás del fuego, algo que el kirchnerismo suele denunciar a menudo pero que hasta ahora no se ha podido demostrar.
Lo que sí es concreto es que debido a las actividades humanas, los niveles de CO2 en la atmósfera son ya un 50 % más altos que en la época preindustrial, a pesar de una reducción momentánea en las emisiones de gases de efecto invernadero durante la pandemia. Como resultado, el mundo ya se ha calentado 1,1 °C en promedio, y estudios recientes indican que estamos en camino hacia los 2,7 °C de calentamiento para finales de este siglo.
Los últimos informes del IPCC (el Panel Intergubernamental de Cambio Climático de la ONU), señalan que a medida que el clima se calienta, los episodios de sequía, altas temperaturas y baja humedad se volverán más frecuentes y extremos. Además de tener importantes impactos en la sociedad, la producción de alimentos y la economía, estos fenómenos meteorológicos también elevan el riesgo de incendios forestales. “Eso se está advirtiendo en Sudamérica y Australia, del mismo o peor que lo que se ve que ocurre por estos días en Europa”.
Sin ley de humedales, una norma prometida que debería existir para alentar el cuidado de la vegetación, el enemigo intangible del calentamiento seguirá ejerciendo su oficio sobre el paisaje: hubo 20 proyectos de ley y los 20 se cayeron, sin siquiera llegar a discutirse.
Y las cuentas en Rosario, dicen que se trata del noveno mega incendio que se desata frente a la ciudad en los últimos dos años. Los funcionarios del equipo del Intendente Javkin lo afirman: “A este ritmo y sin soluciones ni jurídicas ni parlamentarias, el desastre podrá apagarse por un tiempo pero sabemos que más temprano que tarde, el fuego volverá”.
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Preocupa incendio forestal en zona de Yungas

 


Se incendió uno de los lugares de mayor biodiversidad en el país y hay preocupación

Fecha de Publicación
: 26/08/2022
Fuente: La Nación
Provincia/Región: Salta


Desde el jueves pasado, un foco que se habría originado en la zona suburbana de Colonia Santa Rosa, en Salta, afectó a la región de Las Yungas
Desde hace una semana, los vecinos de Colonia Santa Rosa, en Salta, denuncian un foco de incendio que comenzó a arrasar con una buena parte de la Reserva de la Biosfera de Las Yungas. En concreto, calculan que van más de 5000 hectáreas consumidas por el fuego y temen que los resultados sean catastróficos para la fauna silvestre.
Joaquín Fernández Ullivarri es ingeniero agrónomo y vecino de la ciudad, y explicó que desde hace varios días la ciudad está envuelta en una intensa capa de humo que imposibilita la visión. Más precisamente, los incendios comenzaron el jueves pasado en la zona urbana, por lo que los vecinos creen que, si bien no habrían sido intencionales, sí “fueron provocados”.
“El jueves cuando empezó el incendio, justo hubo un cambio del viento, del norte”, comenzó a relatar el hombre que trabaja para una firma relacionada con el agro. Además, lamentó que estos focos se den precisamente en “un año que pinta extremadamente seco” y helado.
“En toda la zona periférica hubo focos y eso saltó a la selva, a Las Yungas, que es inmenso. Hay más de 5000 hectáreas afectadas de selva en ese lugar y las temperaturas vienen en ascenso”, añadió el agrónomo. También lamentó que el incendio tenga tan poca repercusión y contó que recién ayer la provincia se comprometió a mandar una delegación para tratar de apagar los focos. “Es una selva con una importancia intangible. Ahora, el fuego arrasó con toda una parte que es muy linda”, amplió.
Por otra parte, agregó que el foco que desencadenó el incendio se dio en una zona lindera con áreas urbanas y rurales: “Todo tiene una relación, porque no se prendió solo”. Fernández Ullivarri alertó que “hay una costumbre de prender las hojas o la basura”.
Fernández Ullivarri contó que los focos comenzaron a esparcirse en la región y han provocado destrozos para la flora y fauna de los bosques subtropicales, también conocidos como bosques nubosos. “En el satélite se vio que el fuego lo inició la mano del hombre, por como se inicia: comenzó en una zona donde hay fincas, movimiento de personas y se metió a donde hay cerros, montañas con selvas. A medida que vas viendo las fotos de los satélites se nota que empezó en la zona suburbana y se esparció hacia adentro de la selva”, describió.
El agrónomo narró que la superficie que puede llegar a consumirse de la selva con estos focos es infinita, por lo que pidió que se comiencen a tomar medidas para contener los incendios. “Puntualmente, el poblado desde hace tres días amanece envuelto en un manto de humo. Es importante darle relevancia a esto, por el valor que generan Las Yungas para la región, de alguna manera es algo importante lo que se está quemando”, indicó.
La región de Las Yungas, en las provincias norteñas de Salta y Jujuy, es uno de los lugares de mayor biodiversidad del país, y fue reconocido como patrimonio natural y cultural del mundo por la Organización de las Naciones Unidas dentro del programa “El hombre y la biosfera” de la Unesco en diciembre de 2002. Con esta declaración, Las Yungas en este momento forma parte de la Red Mundial de reservas de biosfera de la Unesco y por consiguiente de la Argentina.
En rigor, según Ledesma, Las Yungas superan los 4 millones de hectáreas de bosques que representan el 2% del área continental del país, que mantienen el 50% de su biodiversidad. En esa selva actualmente habitan alrededor de 500 especies de aves, otras 200 especies de árboles nativos de la región, 80 variedades de helechos y 30 especies de anfibios.
“Los bomberos voluntarios están trabajando en total escasez, estaban viendo de pedir una motobomba y buscando gente de bomberos y de Defensa Civil para ver que se puedan frenar los focos”, agregó el ingeniero agrónomo. Agregó que aún esperan el accionar del intendente Jorge Guerra. “El norte argentino es tierra de nadie”, sintetizó.
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Ahora, por las movilizaciones, se mueve la Ley de Humedales

 


Ley de Humedales: luego de cinco meses de su presentación el proyecto fue girado a comisiones

Fecha de Publicación: 15/08/2022
Fuente: Página 12
Provincia/Región: Nacional


Tres veces se truncó su tratamiento en el Congreso en la Argentina. Es una demanda que tiene diez años. Esta tarde, en Rosario, la comunidad cortará el puente Rosario-Victoria y esa es una de sus demandas.
A cinco meses de su presentación en el Congreso, el proyecto de Ley de Humedales fue girado a comisiones. Es una demanda de diez años en la Argentina, cuyo tratamiento se truncó tres veces en el Congreso por un fuerte lobby. La noticia se conoció este viernes, después de que entre 5 y 7 mil personas se movilizaran en Rosario por no poder respirar. Este sábado por la tarde habrá un corte en el puente Rosario-Victoria. Ambas convocatorias surgieron de la sociedad de manera espontánea.
El proyecto de Ley de Humedales pasará por tres espacios de debate: Recursos Naturales y Ambiente, Agricultura y Presupuesto. No son cuatro como la última vez que perdió estado parlamentario. Las organizaciones ambientalistas pedirán mediante una nota que se desarrolle un plenario de comisiones para "presionar un poco el proceso", dijo Jésica Fernández Bruera, integrante de la Multisectorial de Humedales, conformada en 2020 por esta misma problemática.
El proyecto es el que presentó el diputado Leonardo Grosso en marzo. Tiene consenso de la comunidad científica y las organizaciones socioambientales, a diferencia del que armaron después el Consejo Federal de Humedales (Cofema) y el Ministerio de Ambiente. Propone penalizar los incendios intencionales en humedales, regula la aplicación de sustancias contaminantes, productos químicos o residuos y crea un inventario, entre otras cosas. El presidente de la comisión de Recursos Naturales consideró, en diálogo con este diario, que "el debate institucional está agotado", por lo que también espera un tratamiento conjunto de las comisiones. Hay una "deuda del Congreso", y este momento exige "celeridad".

Los proyectos en el Congreso
Se trata de una demanda que lleva más de diez años en la Argentina. En 2013 y 2016 proyectos de espíritu similar habían perdido estado parlamentario. Lo mismo ocurrió en 2021, cuando siquiera llegó a la media sanción. Para algunos de los que la defienden y militan, todo se truncó por un triple lobby ejercido por sectores de la agroganadería, la megaminería y la explotación inmobiliaria.
El primer proyecto fue presentado por la exsenadora por Entre Ríos Elsa Ruiz Días (Frente para la Victoria) en abril de 2013. En septiembre del mismo año, el exsenador Rubén Gustiniani (Partido Socialista) presentó otro con el mismo fin. Se unificaron los textos y el debate llegó al Senado. La iniciativa obtuvo media sanción. La Cámara de Diputados nunca la trató y perdió estado parlamentario en 2015. Fernando "Pino" Solanas volvió a impulsarla en 2016. La misma historia: media sanción, pérdida de estado parlamentario en 2018.
En agosto de 2021, con el proyecto estancado en Ganadería y Agricultura, la Multisectorial de Humedales realizó la "Travesía por los humedales", un recorrido en kayak desde Rosario hasta Buenos Aires para exigir su tratamiento en plenario de comisiones frente al Congreso de la Nación. Durante ese mes el tema se instaló en los medios a propósito de la aparición de los carpinchos en Nordelta. Nada alcanzó: hubo petitorios, festivales, tuitazos, marchas, entre otras movidas de la sociedad civil.
Al perder estado parlamentario la propuesta se encontraba en Agricultura y Ganadería. Debía ser tratada por otras dos comisiones: Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios y Presupuesto y Hacienda. El hecho generó una gran desilusión en las organizaciones, sobre todo porque se trataba de un lema de campaña. En Rosario, en los últimos días, ardieron más de 10 mil hectáreas. En ese marco se conoció la noticia del giro a comisiones.
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Lo urgente (económico) tapa lo importante (lo ambiental)

 


Las leyes ambientales que están demoradas por la crisis argentina

Fecha de Publicación: 06/08/2022
Fuente: La Voz del Interior
Provincia/Región: Nacional


La urgencia económica paraliza el impulso en el Congreso Nacional de temas vitales para el ambiente, como la protección de los humedales, la movilidad sustentable o la regulación de los envases y el plástico.
Por la crisis política y económica que atraviesa Argentina, las miradas y los flashes están concentrados exclusivamente en las decisiones que tomará Sergio Massa y las reacciones del resto del arco político, aliados y opositores.
La sensación es que esta urgencia paraliza el impulso de temas de vital importancia para el futuro. Mientras el Ejecutivo se focaliza en la coyuntura, quizá el Congreso de la Nación debería oficiar de brújula para evitar perder el rumbo en el mediano plazo. Y en materia ambiental tiene varios pendientes.

Ley de humedales
Un pasivo normativo que ya tiene más de una década y varios intentos fallidos de sanción es la ley de humedales. “Nos preocupa que en el escenario del Congreso Nacional no está presente la agenda ambiental. No obstante, seguiremos presionando ante distintos organismos para generar conciencia de que necesitamos con urgencia una ley de humedades”, indicó Ana Di Pangracio, directora ejecutiva de Fundación Ambiente y Recursos Naturales (Farn), a la agencia de noticias científicas TSS.
El Consejo Federal del Medio Ambiente (Cofema), integrado por las autoridades ambientales de todas las provincias, consensuó un anteproyecto. Pero este texto fue criticado por ambientalistas y por científicos, ya que –afirman– degrada la definición de lo que es un humedal y habilita actividades antrópicas sin necesidad de una evaluación de impacto ambiental.

Ley de movilidad sustentable
Otra ley pendiente es la de movilidad sustentable. La semana que viene comenzaría el debate del proyecto, con la participación de varios sectores involucrados. La principal crítica al texto propuesto es que se focaliza sólo en los vehículos motores que utilizan combustibles “verdes”, electricidad e hidrógeno.
Así, deja de lado otros aspectos clave, como promover el uso de bicicletas, la peatonalización, el transporte público y el ordenamiento del espacio urbano. La movilidad sustentable no sólo ayuda a mitigar el cambio climático, sino que también promueve un aire más limpio, ciudades más silenciosas, transporte inclusivo y equitativo y tránsito más seguro.

Leyes de envases y de plásticos de un solo uso
Se estima que el 60% del volumen de los residuos domiciliarios son envases. Muchos de estos empaques son de plástico y se descartan una vez abiertos. En los plásticos de un solo uso, también están los cubiertos, los platos y los vasos descartables.
Argentina está muy retrasada en la gestión de estos residuos. A pesar de que se presentaron proyectos, nunca fueron tratados en el Congreso. La normativa debería ser doble:
Regular los plásticos descartables, principalmente envases y embalajes, bajo el principio de responsabilidad extendida del productor.
Eliminar progresivamente la producción y el consumo de plásticos de un solo uso que no están alcanzados por la anterior normativa.

Ley de eficiencia energética
Es impensado que no exista en el país una ley de eficiencia energética, pese a las recurrentes crisis que sufre este sector. La mejor forma de gastar menos dólares en energía es ahorrando energía. En 2019 se presentó un proyecto de la mano de Cambiemos, pero la iniciativa está estancada.
“Al promover el uso racional de la energía, se mejora no sólo el acceso a la energía para todos los consumos, sino que también se promueven mejoras tecnológicas y se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero, responsables del cambio climático”, asegura un documento de la Fundación Vida Silvestre.

Leyes para tomar conciencia
En Argentina, la sanción de una ley no es garantía de su cumplimiento. Sin embargo, las normas visibilizan los problemas para que se tome conciencia y se establezca un compromiso por parte de los estados.
También generan mecanismos y beneficios para que los ciudadanos, empresarios y ONG más responsables actúen, y habilitan instancias de sanción frente a aquellos que todavía no entienden que el cuidado del planeta es tan urgente como importante.

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Humedales en el Congreso

Fecha de Publicación: 06/08/2022
Fuente: La Tinta
Provincia/Región: Nacional


Representantes de la academia y la sociedad civil reclaman que se sancione una ley de humedales y cuestionan un anteproyecto que promueve el Ministerio de Ambiente junto al COFEMA, mientras que en el Poder Legislativo hay más de diez proyectos que esperan ser tratados. Entre ellos, uno que había sido debatido, unificado y consensuado a partir de diversas iniciativas.
Los humedales son imprescindibles para mantener una buena provisión de agua y mitigar los efectos del cambio climático, ya que actúan como los mayores sumideros de carbono, con lo que atenúan los efectos del calentamiento global. Además, su capacidad de retención hídrica disminuye los impactos de crecidas y reduce los riesgos de inundaciones; son reservorios y purificadores de aguas dulces, y constituyen el hogar de más del 40% de la biodiversidad mundial. En la Argentina, se estima que hay más de 600.000 kilómetros cuadrados de humedales, un 23% del territorio nacional (que incluye salinas y otros cuerpos de agua como lagunas, mallines, turberas, bosques fluviales, esteros, bañados y marismas), y que desde hace al menos cinco años se encuentran entre los ecosistemas más degradados y amenazados del país. Por todo esto, urge contar con una ley que regule los usos que pueden desarrollarse sobre ellos, que sean sostenibles y aseguren su conservación.
Sin embargo, a pesar de que hace alrededor de una década que se presentan proyectos, estos terminan perdiendo estado parlamentario, sin llegar a convertirse en ley. Actualmente, hay más de una decena de ellos a la espera de ser tratados: tres han sido presentados en la Cámara de Senadores y ya tienen comisiones asignadas para su debate, y ocho fueron presentados en la Cámara de Diputados y todavía esperan ser girados a las comisiones correspondientes para su tratamiento.
“Si no se les da el giro a las comisiones, no se puede iniciar el proceso de análisis legislativo de la Ley de Humedales. Por eso, lo más urgente, que es lo que estamos pidiendo, es que se hagan los giros y un plenario de comisiones, que todas en conjunto den dictamen, porque ya se ha discutido la ley, para así bajar a recinto y que obtenga una media sanción”, explica Ana Di Pangracio, directora ejecutiva de Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN), que esta semana presentaron un pedido de informe, acorde a la Ley de Acceso a la Información, en el cual solicitan que se responda a dos preguntas puntuales: por qué todavía no se hicieron los giros correspondientes, dado que ha pasado un tiempo considerable desde la presentación de los proyectos, y cuál es la fecha estimativa en que piensan hacerlo.
“Nos preocupa que en el escenario del Congreso Nacional no está presente la agenda ambiental. No obstante, como organizaciones de sociedad civil, seguiremos presionando ante distintos organismos, tanto del Poder Ejecutivo como del Legislativo, para generar conciencia de que necesitamos urgentemente una ley de humedades”, subrayó Di Pangracio, que es abogada especializada en Derecho Ambiental, y advierte que todavía continúan los incendios: “Solo en Corriente se quemaron decenas de miles de hectáreas de humedales y ahora también se recrudece en el Delta”, puntualiza.

El proyecto consensuado
Mientras tanto, un anteproyecto recientemente acordado entre el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación (MAyDS), y el Consejo Federal de Medio Ambiente (COFEMA), que fue anunciado como un texto “consensuado de manera federal” y que constituye “un hito en la materia de trabajo colectivo, conjunto”, está recibiendo cuestionamiento y críticas, ya que reduce el alcance territorial de la norma, flexibiliza la realización del inventario, desconoce el principio precautorio y limita la participación ciudadana.
El 11 de julio pasado, durante una asamblea del COFEMA en la sede del MAyDS, el ministro de Ambiente, Juan Cabandié, anunció que esperan llevar al Congreso un proyecto de Ley de Humedales consensuado entre ambos organismos. Según comunicaron desde ese ministerio, la propuesta fue “elaborada sobre la base del Proyecto de Ley de Presupuestos Mínimos de Humedales consolidado en la Comisión de Recursos Naturales y Conservación del Ambiente Humano de Diputados, con el aporte de distintas organizaciones y actores involucrados”.
El anuncio responde a un compromiso asumido por el MAyDS a principios de este año, luego de que el proyecto de Ley de Humedales que estaba listo para ser tratado perdiera estado parlamentario por tercera vez consecutiva. Se trata de un proyecto que las organizaciones ambientales y de la sociedad civil están impulsando desde hace más de diez años, que en esta última oportunidad había sido debatido, unificado y consensuado, en base a al menos diez propuestas diferentes, con el apoyo de más de 300 organizaciones, asambleas, multisectoriales, especialistas y científicos. Ese mismo texto ha sido presentado nuevamente en la Cámara de Diputados el 2 de marzo de este año, por el diputado Leonardo Grosso (Frente de Todos), con el apoyo de otros 37 legisladores, y es uno de los que todavía no ha sido girado a comisiones para su tratamiento.
“El discurso público se monta sobre la continuidad de un proyecto que había logrado un alto consenso, pero para producir un proyecto que nada tiene que ver con él y que no nos deja otra posibilidad de lectura que la de que se busca garantizar la continuidad del modelo extractivista en sus diferentes manifestaciones, a lo largo y ancho del país”, Patricia Pintos, que es doctoranda en Geografía e integrante de la Red Nacional de Humedales (ReNaHu).
Uno de los aspectos más cuestionados del anteproyecto es que modifica la definición de humedales que había sido acordada por la comunidad científica nacional –e incluso adoptada por el mismo COFEMA, en el año 2016–, reduciendo el alcance territorial y los ecosistemas a ser protegidos. Específicamente, esa definición entiende por humedal a un ambiente en el cual la presencia temporaria o permanente de agua superficial o subsuperficial causa flujos biogeoquímicos propios y diferentes a los ambientes terrestres y acuáticos. Rasgos distintivos son la presencia de biota adaptada a estas condiciones, comúnmente plantas hidrófitas y/o suelos hídricos o sustratos con rasgos de hidromorfismo.
“Lo más preocupante es que el nuevo texto degrada el proyecto de Ley de Humedales, entre otras cosas, porque el ordenamiento ambiental queda sujeto a que primero se termine el inventario, lo cual puede llevar años y años. Mientras tanto, los humedales se siguen degradando y destruyendo. Además, borra toda la agenda de derechos que incluye el proyecto consensuado”, agrega Di Pangracio y advierte que es un texto que termina favoreciendo a las provincias que le bajan el perfil al involucramiento que el Ministerio de Ambiente de Nación tendría en la implementación de la norma, y simplemente “sería una forma de que puedan obtener fondos, como lo hacen para la Ley de Bosques”.
Otra de las modificaciones cuestionadas, vinculada al ordenamiento territorial, es que desaparece la moratoria, una medida que pondría freno a nuevas actividades o a la ampliación de actividades existentes, hasta que los humedales sean incorporados en el Ordenamiento Ambiental del Territorio. De ese modo, se vulneran los principios preventivo y precautorio. “Su eliminación es como una invitación a dar continuidad al festival de transformación de ecosistemas de humedales que se viene llevando adelante por parte de muchas actividades que son propias del extractivismo. Al eliminar instancias clave como la moratoria, los plazos y los tiempos del ordenamiento territorial ambiental, lo que se hace es garantizar la continuidad o la profundización de prácticas extractivas en curso”, subraya Pintos.
Además, en el texto, desaparecen las prohibiciones a la intervención en los humedales sin la previa aprobación por parte de la autoridad competente, de la Evaluación de Impacto Ambiental u otras evaluaciones que correspondieran, así como el capítulo sobre el uso racional y sostenible de los humedales. También desaparecen objetivos generales fundamentales para hacer frente a los procesos de degradación de estos ecosistemas, como el desarrollo de mecanismos o procedimientos específicos para proteger y preservar la biodiversidad de los humedales; la implementación de las medidas necesarias para desalentar las actividades inadecuadas y las malas prácticas que afecten significativamente la integridad ecológica de los humedales; y la valoración, el reconocimiento y el apoyo a los medios de vida y producción tradicionales, y de la economía popular, que en un marco de respeto y conocimiento de su entorno se realicen de forma racional y sostenible.
“Estos anuncios realizados por el Ministerio de Ambiente en acuerdo con el COFEMA no son otra cosa que una máscara para dar una señal de que se está avanzando en el tratamiento de un proyecto de ley que es altísimamente demandado desde las organizaciones socioambientales y también de la ciudadanía, pero que oculta la continuidad de un modelo que es altamente exfoliador y desnaturalizador de estos ecosistemas”, concluye Pintos.
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