Mostrando entradas con la etiqueta suelos - erosión - desertificación. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta suelos - erosión - desertificación. Mostrar todas las entradas

Desertificación y acciones en el NOA y Cuyo



Lucha contra la desertificación: el Ministerio de Ambiente intensifica acciones en el NOA y Cuyo

Fecha de Publicación
: 11/03/2018
Fuente: Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable
Provincia/Región: Nacional


La iniciativa promueve el manejo sustentable de tierras en ecosistemas áridos, semiáridos y subhúmedos secos del noroeste de la Argentina.
En el marco del Proyecto de Manejo Sustentable de Tierras del NOA y Cuyo, que lidera el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, se realizaron en Jujuy y Catamarca dos capacitaciones para evaluar la desertificación en la Puna y en la región del Monte de Sierras y Bolsones, respectivamente.
En San Salvador de Jujuy, la cartera que conduce el ministro Sergio Bergman realizó una capacitación orientada a metodologías de análisis de la degradación de tierras para la región de la Puna. La misma estuvo destinada a profesionales del sistema público provincial involucrados en la temática y tuvo por objeto transferir conocimientos para la evaluación de la desertificación, de acuerdo con los lineamientos propuestos por el Observatorio Nacional de Degradación de Tierras y Desertificación (ONDTyD).
Asimismo, en la ciudad de San Fernando del Valle de Catamarca, el Ministerio de Ambiente organizó un taller de validación de la línea de base del Sitio Específico de Intervención (SEI) Monte de Sierras y Bolsones. Durante el encuentro, se presentaron y validaron los aspectos biofísicos y socioeconómicos que caracterizan la degradación de tierras en la zona, poniendo en valor las percepciones de los productores y representantes institucionales.
Estas capacitaciones se enmarcan en el estudio de “Identificación, monitoreo y evaluación de la implementación de prácticas de manejo sustentable de tierras en los tres sitios específicos de intervención del Proyecto MST NOA Cuyo”, consultoría desarrollada por el Instituto Argentino de Investigación en Zonas Áridas (IADIZA), para el seguimiento y estudio de las prácticas de Manejo Sustentable de Tierras (MST) en los Sitios Específicos de Intervención (SEI) del Proyecto.
Tanto en Catamarca como en la Puna jujeña, se encuentran dos de los tres Sitios Específicos de Intervención (SEI) del Proyecto MST NOA Cuyo, iniciativa que cuenta con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), implementada por Ambiente de Nación y financiada por el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM, GEF su sigla en inglés).
Por su parte, en el marco de este proyecto y junto con la Secretaría de Ambiente de Catamarca, se construyó el primer módulo de vivero forestal y frutal en la Reserva provincial Anillaco, que pretende dejar capacidades locales instaladas para la producción de plantas. El vivero será gestionado por la Municipalidad de Tinogasta, que aportará mano de obra permanente para su operación y mantenimiento. Con él se espera proveer a los productores de la zona de especies forestales nativas (algarrobo, arca, chañar, taco zorro), y otras que sirvan para instalar cortinas forestales que protejan el suelo. Durazneros, higueras, nogales, manzanos o membrilleros son parte de la idiosincrasia productiva de la zona, tanto para la producción de frutas frescas como para la elaboración de dulces y jaleas, emprendimientos a cargo de mujeres campesinas.      
El Proyecto MST NOA Cuyo abarca las provincias de Catamarca, Tucumán, La Rioja, Jujuy, Salta, Mendoza, San Juan y San Luis, y busca mantener y mejorar los servicios de los ecosistemas para sostener las formas de vida de las comunidades rurales y reducir la presión sobre los recursos naturales por los usos de la tierra.
.

Jujuy inició de plantación de cortinas forestales

Cortinas forestales para evitar la degradación del suelo
Fecha de Publicación: 16/01/2018
Fuente: Jujuy al Día
Provincia/Región: Jujuy


En el marco del Proyecto de Manejo Sustentable de Tierras (MST-NOA/CUYO), que cuenta con el apoyo del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable de Nación junto con el homónimo Ministerio de Jujuy, iniciaron la etapa de plantación de cortinas forestales en el norte de la provincia.
Se trata de una iniciativa financiada por el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (PFMAM, GEF), y articulada a nivel local entre la Dirección de Ordenamiento Ambiental del Territorio, la Dirección de Manejo y Uso del Suelo, y la Dirección de Bosques, de la Secretaria de Desarrollo Sustentable. Y a través de la cual se busca plantar cortinas forestales como parte de una estrategia para evitar la erosión de los suelos fértiles cultivables y mejorar las condiciones de habitabilidad en la Puna.
En este sentido, se inició en el Paraje Santuario con la primera de 10 a 15 plantaciones que se distribuirán por terrenos aptos para fortalecer la lucha contra la degradación de los suelos en el norte de la provincia. En esta oportunidad, se plantaron un centenar de árboles para conformar las cortinas forestales.
Por otro lado, es importante destacar que así como el proyecto contempla la producción de bio abono (70 % compost, 30 % humus) como uno de sus componentes, para las cortinas forestales se aprovechó el generado a través de composteras y lombricarios en zonas cercanas.
Finalmente se informó que gracias un convenio celebrado oportunamente, los árboles plantados fueron retirados del invernadero municipal de La Quiaca. Y se anticipó que la semana próxima los equipos del Ministerio de Ambiente continuarán con las mismas tareas en Parajes de Abra Pampa, Puesto del Marqués y Orosmayo.

Cortinas forestales
No solo minimizan la erosión del suelo, por el carácter multifuncional de los árboles y los bosques, también posibilitan la diversificación de la producción por la obtención de postes, varillas y leña. Además, poseen efectos benéficos sobre los cultivos, disminuyendo la evapotranspiración y la caída de flores y frutos, entre otros, al mejorar las condiciones micro ambientales de los lotes con cultivos.

MST en Zonas Secas del Noroeste Argentino
El proyecto tiene como finalidad la promoción del Manejo Sustentable de Tierras en los ecosistemas áridos, semiáridos y subhúmedos secos del noroeste de la Argentina.
El proyecto de esta manera abordará el problema del aumento de la perdida, tanto de las funciones como de los servicios de los ecosistemas, en las regiones que se caracterizan por poseer altos niveles de degradación de las tierras y de pobreza.
Asimismo, impulsará la incorporación del manejo sustentable de la tierra (MST) con el propósito de mejorar los medios de vida de las comunidades rurales, facilitando el cambio de abordaje que presente un manejo integrado de los recursos naturales que implemente prácticas de MST para la mitigación de los efectos de la degradación de tierras (DT) mediante la: prevención, adaptación, mitigación y rehabilitación de dichas tierras.
Participaron de las plantaciones, además de los técnicos del Ministerio de Ambiente de Jujuy, productores locales, especialistas del Instituto de Tecnología Agropecuaria (INTA – Abra Pampa), y del Proyecto.
.

Córdoba pierde más de cuatro toneladas de suelo al año



Cada hectárea en Córdoba pierde 4.170 kilos de suelo, al año, por erosión hídrica

Fecha de Publicación
: 03/01/2018
Fuente: AgroVoz
Provincia/Región: Córdoba


Un trabajo elaborado por investigadores del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) estima que, cada año, la erosión hídrica se lleva 4,17 toneladas de suelo de cada hectárea de Córdoba. Equivale a que la superficie se reduce a razón de unos 0,38 milímetros anuales.
“Estimación de la pérdida de suelo por erosión hídrica en la República Argentina” es el título de este documento elaborado por seis técnicos del Instituto de Suelos, el Centro de Investigación de Recursos Naturales (Cirn) y el Centro Nacional de Investigaciones Agropecuarias (CNIA), que dependen del Inta.
El relevamiento incluye una tabla con los datos de cada provincia: Córdoba está 15° sobre las 23 jurisdicciones en que se divide la nación (no se incluye a Capital Federal).
“Las provincias con mayor tasa de erosión hídrica actual son Neuquén, Misiones y Santa Cruz. En el caso de Neuquén, la tasa media de 22,8 toneladas por hectárea al año equivalen a una pérdida de una capa de aproximadamente dos milímetros de suelo por año. Las provincias con menores tasas son La Pampa, Formosa y Santiago del Estero”, resume el informe.
El guarismo de Córdoba es superior a los de Santa Fe (1,79 toneladas) y Buenos Aires (2,95), pero inferior a la tasa media de erosión hídrica para todo el territorio nacional, que se ubica en 6,2 toneladas por hectárea al año. Es decir, una pérdida de aproximadamente medio milímetro de suelo en cada ejercicio.
“Dado que la superficie de la República Argentina es de aproximadamente 278 millones de hectáreas, dicha tasa equivaldría a una pérdida de 1.725 millones de toneladas o 1.490 millones de metros cúbicos de suelo por año”, precisa el estudio.

Consecuencia
Para los investigadores del Inta, “la consecuencia inmediata de la erosión del suelo es una disminución de la productividad agrícola, debido a la pérdida de materia orgánica y nutrientes, a su deterioro físico, a la pérdida de profundidad y, en casos extremos, a la pérdida total del suelo”.
En ese contexto, el trabajo realiza una aproximación a la pérdida económica, proyectando qué impacto tiene la erosión en los rindes, en base a un estudio realizado en 2000 que calculó pérdidas de 95 kilos por hectárea de soja, por cada centímetro de suelo perdido, de 273 kilos para maíz, y 71 kilos para trigo.
En la zona de producción intensiva de estos cultivos, la tasa media de erosión hídrica es de 3,91 toneladas por hectárea; es decir, una pérdida de capa de 0,033 centímetros de suelo, por lo que cada hectárea de soja estaría perdiendo 3,14 kilos de rinde potencial al año; el maíz, 9 kilos; y el trigo, 3,34 kilos.
Multiplicado por la superficie sembrada en 2015/16 para cada grano, son 61.230 toneladas perdidas de soja, 48.150 de maíz y 18.550 de trigo; que a valores de mercado significan 30 millones de dólares: 20,82 millones, 6,26 millones y 2,78 millones, respectivamente.
.

Taller sobre degradación de tierras y desertificación

San Luis participó de un taller sobre degradación de tierras y desertificación

Fecha de Publicación
: 19/12/2017
Fuente: ANSL
Provincia/Región: San Luis


Representantes del Ministerio de Medio Ambiente, Campo y Producción se capacitaron en Metodologías de Evaluación de la Desertificación para la Región Monte de Llanuras y Mesetas. La actividad tuvo lugar el pasado martes, miércoles y jueves en Mendoza.
Mientras el gobernador Alberto Rodríguez Saá disertaba en la Pontificia Academia de Ciencias del Vaticano sobre medioambiente, clima y justicia, en consonancia, un equipo de la cartera medioambiental asistía a un taller sobre degradación de tierras y desertificación, en la provincia de Mendoza.
Allí se capacitaron sobre las Metodologías de Evaluación de la Desertificación para la Región Monte de Llanuras y Mesetas, expuestas por integrantes del Observatorio Nacional de la Degradación de Tierras y Desertificación (ONDTyD). “Nos explicaron sobre cómo realizar mediciones en áreas degradadas y qué aspectos tener en cuenta para esta tarea. Esto permitirá obtener un estándar de medición y, luego, comparar resultados con otras provincias”, señalaron desde la cartera sanluiseña.
En la Argentina hay diferentes sitios pilotos de evaluación, donde se generan indicadores vinculados a la degradación del suelo. “La idea de San Luis es presentar un sitio para realizar estas mediciones, lo que permitirá obtener un diagnóstico del lugar y su potencialidad. Además servirá para observar el efecto de las acciones que se realicen en dicha zona”, precisaron.
Es importante remarcar que San Luis se encuentra dentro del Proyecto de Manejo Sustentable de Tierras en las zonas secas del noroeste argentino (MST NOA Cuyo), al igual que Jujuy, Salta, Mendoza, San Juan, La Rioja y Catamarca. “Este fue un taller regional, participaron San Juan, San Luis y Mendoza”, indicaron.

Sobre el Observatorio Nacional
El ONDTyD es un sistema nacional de evaluación y monitoreo de tierras a diferentes escalas (nacional, regional y de sitios piloto), basado en un abordaje integral, interdisciplinario y participativo. Está sustentado en una red de organizaciones científico-tecnológicas y políticas que proveen datos y conocimientos, y al mismo tiempo son usuarios de la información.
.

La erosión hídrica no sale caro



En la Argentina, se pierden US$ 30 M al año por erosión hídrica

Fecha de Publicación
: 17/12/2017
Fuente: INTA
Provincia/Región: Nacional


Cerca del 26 % del país, equivalente a 72 millones de hectáreas, tiene niveles de degradación que afectan el rendimiento anual de soja, maíz y trigo. El dato surge del libro “Estimación de la pérdida de suelo por erosión hídrica en la República Argentina”.
La pérdida de suelo es el principal problema que compromete la sustentabilidad de todos los sistemas productivos del país, con un impacto económico sobre el rendimiento anual de los cultivos estimado en US$ 29,9 M. Esta pérdida, calculada para soja, maíz y trigo, es acumulativa y, por lo tanto, ascendería a US$ 1.645 M en una década.
Los valores surgen del libro “Estimación de la pérdida de suelo por erosión hídrica en la República Argentina”, que llevaron a cabo especialistas el Instituto de Suelos del Centro de Investigación de Recursos Naturales del INTA. Se trata de la primera investigación realizada a escala nacional en los últimos 30 años, con la finalidad de contribuir al ordenamiento y manejo sustentable de los suelos.
Según este estudio científico, alrededor del 26 % del territorio argentino, equivalente a 72 millones de hectáreas, presenta niveles de erosión hídrica que superan las tasas tolerables, es decir, que afectan la salud de los ecosistemas. Esto indica un agravamiento del problema, ya que el último estudio efectuado en 1988 estimó que la superficie afectada era de 25 millones de hectáreas, 47 millones de hectáreas menos respecto de la actualidad.
La consecuencia inmediata de la erosión del suelo “es una disminución de la productividad agrícola, debido a la pérdida de nutrientes, a su deterioro físico y a la pérdida de profundidad”, indicó Juan Gaitán, especialista del Instituto de Suelos del INTA y uno de los autores del trabajo, quien puntualizó: “En casos extremos, puede implicar la pérdida total del suelo”.
De acuerdo con el estudio, la tasa media de erosión actual de los suelos, que considera todo el territorio nacional, equivale a seis toneladas por hectárea al año. Esto representa aproximadamente una capa de 0,5 milímetros de espesor que se pierden al año.
En tanto, los especialistas reconocen que existen fuertes diferencias entre las regiones del país. Cerca del 60 % del país presenta bajas tasas de erosión, menores a dos toneladas por hectárea por año, sobre todo en regiones con alta cobertura vegetal de pastizales naturales, bosques y selvas.
Por su parte, alrededor de un 12 % del territorio presenta tasas de erosión mayores a 10 toneladas por hectárea por año, principalmente en las regiones áridas y semiáridas con fuertes pendientes y baja cobertura vegetal.
En cuanto a las pérdidas económicas por disminución de los rendimientos de los cultivos, “son relativamente bajas, si se toma el promedio del área agrícola nacional por hectárea, pero hay zonas puntuales de la pampa ondulada o del área serrana de Buenos Aires, Córdoba, San Luis, Salta y Tucumán que están muy afectadas, donde el perjuicio económico es ascendente”, destacó Patricia Carfagno, especialista del instituto e integrante del estudio.
Alrededor del 26 % del territorio argentino, equivalente a 72 millones de hectáreas, presenta niveles de erosión hídrica que superan las tasas tolerables, es decir, que afectan la salud de los ecosistemas.
Según el trabajo científico, que demandó dos años de investigación, en la Argentina la tasa media de erosión hídrica en el área de cultivos agrícolas equivale a 3,91 toneladas por hectárea por año. En tal sentido, se toma como referencia una densidad aparente media de 1,2 toneladas por metro cúbico para toda el área agrícola –valor considerado para región Pampeana–, por lo que esta tasa se correspondería con la pérdida de una capa de 0,33 milímetros de suelo por año.
No obstante, la investigación reconoce que, además de la pérdida de rendimiento de los cultivos, la erosión provoca otros costos que “no son valorizados en números” y corresponden a “costos ambientales”, causados por la pérdida o disminución de los servicios ecosistémicos que brindan los suelos.
Según María Fabiana Navarro, especialista de la misma unidad del INTA y coautora del libro, “es muy difícil establecer los costos ambientales”. Por ejemplo, en el proceso de erosión, cuando el agua se lleva partículas del suelo, también se lleva partículas de contaminantes asociadas que, al llegar a los cursos de los ríos, contaminan los cuerpos de agua.
Las provincias con mayor tasa de erosión hídrica son Neuquén, Misiones y Santa Cruz. En el caso de Neuquén, la tasa media es de 22,8 toneladas por hectárea por año y constituye, aproximadamente, la pérdida de una capa de 2 milímetros de suelo por año.
Asimismo, las mayores tasas de erosión ocurren en el norte de esa provincia donde, simultáneamente, se registran fuertes pendientes, precipitaciones de moderadas a altas y una fuerte degradación de la cobertura vegetal, principalmente debido al sobrepastoreo. En tanto, las provincias con menores tasas de erosión hídrica son La Pampa, Formosa y Santiago del Estero.
Según el trabajo científico, que demandó dos años de investigación, en la Argentina la tasa media de erosión hídrica en el área de cultivos agrícolas equivale a 3,91 toneladas por hectárea por año.

Reconocer la erosión
La erosión es el desgaste que se produce en la superficie del suelo por la acción de agentes externos, ya sea el viento o el agua, o, también, puede ocasionarse por la fricción continua de otros cuerpos.
Los especialistas definen la erosión hídrica como el proceso de desprendimiento y arrastre acelerado de las partículas del suelo causado por la acción del agua, que disminuye la productividad de los suelos y afecta la salud de los ecosistemas.
La publicación señala que esta problemática involucra tres etapas donde se producen daños importantes: la preparación del material, en cuanto a desprendimiento y remoción, el transporte y la sedimentación.
“La expansión de la frontera agropecuaria contribuyó a la deforestación de amplias superficies que, antes estaban bajo bosques naturales, y actualmente están bajo agricultura”, explicó Carfagno y agregó: “Aumentó la erosión hídrica, lo que se observa en el número de hectáreas que se encuentran bajo este proceso en los últimos años, información que surge del trabajo”.
Pero no solo la causa es la deforestación. “También ocurre o puede ocurrir cuando hay una conversión”, dijo Navarro. Consideró que cuando se pasa de “un sistema natural a un sistema antrópico, se produce de por sí un aumento, ya sea pequeño o grande, en la tasa de erosión, o, por lo menos, del riesgo de erosión”. Y, aunque a veces la erosión hídrica no ocurre, “sí está presente el riesgo”, subrayó.
La expansión de la frontera agropecuaria, sobre todo en la región subhúmeda Pampeana y Chaqueña, mediante la incorporación de tierras al cultivo intensivo de granos –especialmente de soja– a expensas de tierras ocupadas por bosque natural sometidas a desmonte y sobrepastoreo en las regiones áridas y semiáridas, “produjo una disminución de la cobertura vegetal y es una de las principales causas que provocaron un aumento de la erosión hídrica en las últimas décadas en el país”, explicó Gaitán.
La consecuencia inmediata de la erosión del suelo “es una disminución de la productividad agrícola, debido a la pérdida de nutrientes, a su deterioro físico y a la pérdida de profundidad”, aseguró Gaitán.

Estudio nacional
El mapa es innovador dado que mediante “la clasificación de imágenes satelitales, el tratamiento de información de base de clima, suelos y modelos digitales de terreno a partir de sistemas de información geográficos y del relevamiento de datos de campo, se pudo aplicar a escala nacional el modelo USLE (Ecuación Universal de Pérdida de Suelo, según sus siglas en inglés)”, indicó Gaitán.
La USLE es un método para predecir la tasa de pérdida en cualquier combinación de suelo, topografía, clima, cobertura y prácticas de manejo. Se utiliza para estimar la degradación promedio por el período de tiempo y contempla cinco factores como erosividad de la lluvia, erodabilidad del suelo, longitud y gradiente de la pendiente, cubierta y manejo de cultivos y residuos, y prácticas de conservación.
“En este trabajo se aplicó una misma metodología para todo el país”, explicó Navarro y aclaró que, en otros trabajos previos, “cada uno utilizaba una determinada metodología que generalmente no coincidía con los otros, lo que generaba inconvenientes a la hora de compatibilizar los trabajos o resultados”.
Asimismo, Carfagno expresó que “se determinó no solo la erosión actual, sino la potencial que es la máxima tasa de erosión que ocurriría si los suelos se mantuvieran desprotegidos sin cobertura vegetal, lo cual permite identificar las zonas con mayor riesgo”.
De repente comenzaron “a recibir consultas de productores que parecía que nunca habían visto la erosión hídrica hasta que se encontraron con las cárcavas”, advirtió Carfagno, sobre los socavones que se producen en el suelo en aquellos campos con pendiente a causa de las avenidas de agua de lluvia.
Al respecto de esto último, la demanda técnica creció en la zona de Pergamino, Arrecifes, San Pedro y Santa Lucía –algunas comunidades de la provincia de Buenos Aires–, cuyos campos son afectadas por el proceso de erosión. Junto con productores y organizaciones, como los Grupos CREA y Aapresid, el INTA trabaja en la concientización, recuperación de cárcavas y sistematización de datos bajo diferentes métodos, según la problemática.
Este estudio, donde además de Gaitán, Navarro y Carfagno, participaron Leonardo Tenti, María José Pizarro y Santiago Rigo, presenta información de suma importancia para la planificación y toma de decisiones de los gobiernos provinciales y nacional.
Estos mapas podrían contribuir a generar políticas públicas basadas en la implementación de buenas prácticas agrícolas tendientes al ordenamiento y al manejo sustentable de los suelos, principalmente a partir del conocimiento de la ubicación de las áreas críticas y de los riesgos de degradación por erosión.
.

Dos millones de hectáreas con agua



Un informe del INTA afirma que hay más de 2 millones de hectáreas con agua

Fecha de Publicación
: 26/11/2017
Fuente: Revista Chacra
Provincia/Región: Nacional


Un informe técnico del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) advirtió que existe 2.258.110 hectáreas afectadas por el agua, entre inundadas, anegadas y con napas a menos de 60 centímetros en superficie.
El relevamiento, que se dio a conocer en las últimas horas, fue elaborado por el ingeniero Pablo Vázquez, del Área de Gestión Ambiental y Recursos Naturales del Centro Regional La Pampa-San Luis del INTA.
El objetivo del informe fue avanzar en un relevamiento vinculado a la evolución del área inundada tras los 650 milímetros de lluvia precipitados entre el 26 de marzo y el 30 de abril de 2017 y lluvias subsiguientes en los departamentos del noreste y este pampeano.
Se indicó que en base principalmente a imágenes satelitales analizadas por el INTA, "hay en la provincia de La Pampa 735.145 hectáreas inundadas; 809.063 anegadas; y 713.902 con napas a menos de 60 centímetros de superficie".
.

La cuenca La Picasa en la corte por los excesos hídricos



Buscan abordar la problemática de La Picasa

Fecha de Publicación
: 07/11/2017
Fuente: NotiFe
Provincia/Región: Santa Fe - Buenos Aires - Córdoba


Raúl Lamberto, titular del organismo, presentó ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación un escrito con tres propuestas, que tienen como premisa el acuerdo entre las partes involucradas, en el marco de la audiencia pública que el máximo tribunal convocó para el próximo 8 de noviembre y del que participarán los gobiernos de Santa Fe, Buenos Aires y Córdoba, además de un representante del Estado nacional.
El defensor del Pueblo de la provincia de Santa Fe, Raúl Lamberto, presentó este viernes un escrito ante la Corte Suprema de la Nación con propuestas tendientes a que las provincias de Santa Fe, Buenos Aires y Córdoba, con la partición del Estado nacional, arriben a consensos sobre aspectos básicos y obras necesarias para solucionar los problemas hídricos generados en la cuenca de La Picasa. La presentación de la Defensoría santafesina se realizó en el marco de la audiencia pública que el Máximo Tribunal convocó para el 8 de noviembre por esta cuestión.
El escrito presentado por Lamberto consta de tres propuestas puntuales. En la primera de ellas, se propone la “creación de un ente operativo con participación de todas las provincias y de la Nación dentro del Comité de Cuenca Interjuridisccional, con competencia en el manejo de aguas, planificación, estudios, control de obras y monitoreo permanente de la cuenca (conforme a recomendación de las Defensorías del Pueblo de la Región Centro en Jornadas realizadas en el mes de marzo de 2017)”. En este caso, el planteo se basa en lo señalado en los Principios Rectores de la Política Hídrica de la Argentina, proclamados en el marco del Acuerdo Federal del Agua concertado dentro del Consejo Hídrico Federal del cual forman parte las 23 provincias y la ciudad de Buenos Aires. Allí se expresa que “dado que el movimiento de las aguas no reconoce fronteras político-administrativas sino leyes físicas, las cuencas hidrográficas o los acuíferos constituyen la unidad territorial más apta para la planificación y gestión coordinada de los recursos hídricos”, y más adelante se señala que “para cuencas hidrográficas de carácter interjurisdiccional es recomendable conformar ‘organizaciones interjurisdiccionales de cuenca’ para consensuar la distribución, el manejo coordinado y la protección de las aguas compartidas”.
“Resulta incontrovertido que La Picasa se alimenta de aguas aportadas por las provincias de Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires y las consecuencias son padecidas principalmente por los habitantes de las dos últimas, ergo, las soluciones inmediatas deben surgir de un Comité de Cuenca Interjuridisccional con una fuerte intervención del gobierno federal”, reafirma Lamberto en el texto elevado a la Corte Suprema.
La segunda propuesta aportada por la Defensoría del Pueblo santafesina consiste en solicitar que se autorice a las “Defensorías del Pueblo de la Nación y de las provincias de Buenos Aires y Córdoba a firmar convenio donde las partes se comprometan a desarrollar procedimientos de consulta convocando a las partes interesadas y damnificadas, organizaciones sociales, vecinales y productivas”. En este caso, lo propuesto cuenta con el antecedente del conflicto de la Cuenca del Río Salí-Dulce donde las partes, en el marco del juicio ante Suprema Corte firmaron un acta acuerdo y establecieron el compromiso de “instruir un procedimiento de consultas o participación ciudadana”. En esa oportunidad, las Defensorías del Pueblo de la Nación y de las provincias de Tucumán y Santiago del Estero firmaron un convenio para establecer un sistema participativo para el control de la contaminación de la cuenca y se comprometieron a ejecutar acciones necesarias para desarrollar procedimientos de consultas dirigidas a ambientalistas locales, sectores sociales ONG y asociaciones.
Finalmente, el defensor del Pueblo santafesino solicitó a la Corte que, “si lo estima pertinente, disponga las medidas que considere adecuadas a los fines de poder expedirse respecto a la interjurisdiccionalidad de la cuenca del río Salado bonaerense”, dado que en este caso está suscitada una controversia: la provincia de Buenos Aires consideró en 1997 que se trata de un río provincial, mientras que Santa Fe alega que el mencionado curso es interjurisdiccional porque ingresa a la provincia de forma natural a través del sistema de Las Encadenadas llegando hasta las proximidades de la ciudad santafesina de Venado Tuerto. En este contexto, Lamberto sugirió: “La creación de una cuenca hidrográfica de carácter interjurisdiccional y que las decisiones respecto a ella sean adoptadas por consenso de las partes que la conforman”.
.

Mendoza transita su 7° año de emergencia hídrica



Alertan por el 7° año de emergencia hídrica en Mendoza  

Fecha de Publicación
: 18/10/2017
Fuente: Los Andes
Provincia/Región: Mendoza


El científico del Ianigla, Ricardo Villalba, llamó a desarrollar y utilizar las energías alternativas ante el cambio climático.
En Mendoza, científicos realizaron un llamamiento para desarrollar y utilizar energías alternativas ante el cambio climático que genera catástrofes naturales y la crisis hídrica que atraviesa por séptimo año consecutivo la provincia durante un congreso internacional que finalizó ayer.
“A modo global, el hombre está cambiando el planeta y la necesidad es buscar soluciones, ser más amigables con el medio ambiente, cuidar los recursos y caminar hacia las energías alternativas”, dijo Ricardo Villalba, investigador del Conicet, quien expuso sobre “Cambio Climático y Recursos Hídricos al Pie de los Andes”.
Villalba, doctor en Geociencias e investigador del Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (Ianigla), recordó que en Mendoza éste será el séptimo año de emergencia hídrica y que “el cambio climático es transversal a los tres temas de la reunión: aguas, ambiente y energías”.
Precisó que el llamado fundamental “es a comenzar a trabajar en soluciones porque están sucediendo cosas inusuales en el planeta y eventos climáticos extremos”.
Con datos científicos en mano, el experto ejemplificó los aluviones de 2013 que cortaron la cordillera; los deslizamientos en zonas cafeteras donde murió mucha gente o los huracanes como consecuencia de las altas temperaturas en el Atlántico tropical, mientras que hubo desprendimientos de icebergs en abril pasado.
“Todo esto está asociado a las actividades humanas”, aseguró, y con estudios del clima en el pasado culpó “a la concentración de gases, el nivel de dióxido de carbono y la quema de combustibles como causantes de deforestación que han alcanzado niveles que nunca existieron en el planeta en el último millón de años”, además de la mortandad extensiva de bosques como consecuencia de las sequías.
Durante su exposición, el científico mendocino planteó el panorama actual y los escenarios climáticos futuros para la región, y resaltó la importancia del recurso hídrico para el oeste de Argentina y zona central de Chile.
“El cambio climático es inequívoco. La tierra se está calentando y las tres últimas décadas han sido las más cálidas de los últimos 160 años. Este aumento de temperaturas a escala global hace que el océano también se haya calentado y el volumen de hielo y nieve hayan disminuido con un aumento de 17 centímetros del nivel del mar”, advirtió.
El Congreso Internacional “Aguas, Ambiente y Energías 2017. Uso o conservación de los Recursos” fue organizado por la Asociación de Universidades Grupo Montevideo. El coordinador de Energía y profesor de la Universidad de Rosario, Marcelo Vega, destacó que la intención fue “intercambiar y consensuar criterios en materia de sustentabilidad hacia el interior de la Asociación”.
.

Convenio para buscar la solución al exceso de agua

Universidad y Gobierno trabajan desde hoy para gestionar recursos hídricos

Fecha de Publicación
: 17/09/2017
Fuente: OPDS
Provincia/Región: Buenos Aires


Con la firma de un acta acuerdo se creó una mesa de trabajo permanente para gestionar los recursos hídricos de la provincia de Buenos Aires, de la que participan la Red de Universidades Bonaerenses (RUNBo) -integrada por la UNLP-, el Conicet, el Ministerio de Ciencia y Tecnología provincial, el Organismo para el Desarrollo Sostenible (OPDS) y la Autoridad del Agua, entre otros organismos del Estado provincial.
Tras la firma del acuerdo, el titular del OPDS Rodrigo Aybar sostuvo que "esta iniciativa apunta a hacer un trabajo conjunto entre instituciones que piensan a largo plazo. El Gobierno de la Provincia ya viene llevando adelante obras hidráulicas y viales, son obras que hoy se inician y que tienen un horizonte que no es tan cercano, pero que van a dejar un capital para el desarrollo de las personas, de las comunidades, de la economía de la Provincia y son fundamentales".
"Que hoy estén organismos como OPDS, ADA, el Ministerio de Ciencia y Tecnología y por otro lado todo el saber académico del Conicet, de la Universidad de La Plata y de todas la red de universidades, para nosotros es un capital enorme que tenemos que saber aprovechar para articular entre el saber y el hacer. Que estas obras sean una solución para los bonaerenses de hoy y los de mañana", resaltó Aybar.  
En la apertura del encuentro, el presidente de la Universidad Nacional de La Plata, Raúl Perdomo estuvo acompañado por el ministro de Ciencia y Tecnología Jorge Elustondo y el titular del Conicet, Alejandro Ceccatto. Perdomo subrayó la importancia de "poner todos los recursos técnicos y científicos que tenemos a disposición para trabajar en la temática hídrica de la Provincia”. "En la Red RUNBo tenemos como aspiración, junto con el Conicet, reunir a la academia con todos los organismos responsables vinculados al manejo del agua en la provincia para resolver las problemáticas de los bonaerenses”, agregó.   
Por su parte, Elustondo remarcó que su cartera “tiene la enorme responsabilidad de asistir y asesorar a aquellos que tienen que ejecutar soluciones para resolver los problemas de la población y este encuentro reúne trabajo, producción y consenso de distintos actores representados en la Red RUNBo”.
El encuentro de hoy se planificó con la finalidad de avanzar en las posibilidades de cooperación e integración entre las universidades y los distintos organismos vinculados al tema hidrológico, incluyendo problemas específicos relacionados con el agua y la sociedad. El equipo de trabajo tiene el propósito de coordinar esfuerzos para una mejora del conocimiento hidrológico regional a fin de colaborar con una gestión integrada en el manejo de los recursos hídricos de los bonaerenses.

Jornada de trabajo en tres temas
En este primer encuentro se trabajó en Mapa hidrogeológico de la provincia de Buenos Aires, su elaboración a través de un aprovechamiento  integral de la información disponible en las universidades y los distintos organismos y será utilizado en la investigación, formación, extensión y gestión en materia hidrogeológica; redes de monitoreo y banco de datos hidrogeológicos, el grupo tiene capacidad de proponer un proyecto de integración de las distintas redes hidrológicas existentes, incluyendo las posibilidades de verificación de la instrumentación y calidad de la información generada, la inspección, el sostenimiento y la coordinación de bases de datos accesibles a los organismos y a la sociedad en general. Y procesos hidrológicos en el manejo de cuencas hidrográficas, para los que las universidades proponen actuar con el conjunto de los organismos involucrados para la realización de asesorías técnicas, generación de conocimientos, desarrollos científicos-tecnológicos que favorezca todo aquello relacionado con un manejo sostenible de cuencas hidrográficas que permitan afrontar la alternancia de inundaciones y sequías que afectan los aspectos sociales y productivos en la Provincia.

Organismos participantes
Además de las Universidades Nacionales Bonaerenses que integran la Red RUNBo, formaron parte del encuentro el ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la provincia de Buenos Aires; CONICET, Comisión de Investigaciones Científicas bonaerense; Instituto Nacional del Agua; Autoridad del Agua de la provincia de Buenos Aires; Dirección Provincial de Obras Hidráulicas; Organismo de Control del Agua; Servicio Provincial de Agua Potable y Saneamiento Rural; Organismo Provincial para el Desarrollo Sustentable; Comisión Nacional de Actividades Espaciales; Servicio Geológico Minero Argentino; Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria; Autoridad de Cuenca Matanza – Riachuelo; Comité de Cuenca Río Reconquista.
.

Ambiente presente en la COP13 en China



Lucha contra la desertificación: Ambiente celebra la COP13 en China

Fecha de Publicación
: 16/09/2017
Fuente: Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable
Provincia/Región: Nacional


El Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable, representado por Diego Moreno, secretario de Política Ambiental, Cambio Climático y Desarrollo Sustentable, formó parte de la 13ª Conferencia de las Partes 13 (COP13) que se llevó a cabo en Ordos, China. El encuentro es establecido por la Convención de las Naciones Unidas para la Lucha contra la Desertificación (UNCCD) como el órgano decisorio supremo.
Durante la jornada, Moreno explicó que “en Argentina, la política ambiental es de una importancia creciente entre las prioridades nacionales”. Y explicó que “en 2015 se ha creado el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable, que entre sus primeras medidas, ha ideado diferentes instrumentos que, directa e indirectamente, aportan a generar un contexto favorable para abordar los desafíos de la Lucha contra la Desertificación”.
De esta manera, el secretario se refirió al trabajo de la cartera ambiental argentina y  detalló cuatro “instrumentos de políticas, que brindarán las herramientas básicas para la discusión e implementación de una política para la lucha contra la desertificación y la atención de situaciones de sequía, a escala nacional”: la creación del Gabinete Nacional de Cambio Climático, la generación del Sistema Nacional de Gestión Integral del Riesgo, la creación del Observatorio Nacional de Cambio Climático y el trabajo del Observatorio Nacional de la Degradación de Tierras y Desertificación, un sistema interinstitucional de evaluación y vigilancia de las variables ambientales y socioeconómicas relacionadas a la desertificación y degradación de tierras.
La Convención de las Naciones Unidas para la Lucha contra la Desertificación (UNCCD) llamada oficialmente “Convención de las Naciones Unidas sobre la Lucha contra la Desertificación en los países gravemente afectados por la sequía y la desertificación, en particular en Africa”, es un acuerdo internacional adoptado en París el 17 de junio de 1994. Actualmente, la convención ha sido ratificada por más de 190 países, marcando un hito en la toma de conciencia internacional sobre la importancia de los problemas relacionados con la desertificación.
La convención tiene por objetivo luchar contra la desertificación y atenuar los efectos de la sequía en los países gravemente afectados por la desertificación. Recalca que las poblaciones que sufren directamente la desertificación y  conocen la fragilidad de sus ecosistemas mejor que nadie, deben estar en estrecha relación y pleno conocimiento de las decisiones que influenciarán sus modos de vida.
.

La pampa húmeda bajo el agua



Las inundaciones afectan casi un tercio de la producción agropecuaria

Fecha de Publicación
: 02/09/2017
Fuente: La Nación
Provincia/Región: Nacional


Según un informe de Carbap, lo sufren amplias regiones de las provincias de Buenos Aires, La Pampa, el sur de Córdoba y de Santa Fe; allí se realiza el 25% de la agricultura y se encuentra el 26% del ganado vacuno del país
Las inundaciones que sufre buena parte de la pampa húmeda afectan casi un tercio de la producción agropecuaria: concretamente, el 25% de la agricultura y el 26% del ganado vacuno del país. Además, en el caso particular de la provincia de Buenos Aires, el 60% de la producción lechera está hoy en las regiones inundadas o anegadas, al igual que un porcentaje similar del rodeo vacuno.
Los datos se desprenden de un trabajo que acaba de terminar la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) a partir de un relevamiento de imágenes satelitales de la última semana y con datos de producción que realizó Pablo Ginestet, un experto que integra el consejo directivo de esa entidad.
El informe alerta que está comprometida una parte importante de la producción, de cara a la nueva campaña agrícola que empezará el mes próximo con el maíz y que continuará en octubre con la soja. En cuanto al trigo, por las inundaciones no se pudieron sembrar 150.000 hectáreas y hubo pérdidas superiores a las 80.000 hectáreas en lotes que ya estaban implantados, según la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
Fernando Alzueta, presidente de la Sociedad Rural de Bolívar, aportó un dato que evidencia el drama de ese partido: en los últimos 40 años tuvieron 16 inundaciones. "Cada dos años y medio perdés todo", dijo Laura Hernández, productora de la zona. Y agregó que la situación genera "desgaste psíquico y emocional".
El trabajo de Carbap analizó una superficie de algo más de 21,7 millones de hectáreas, que abarcan gran parte de la provincia de Buenos Aires, los partidos del nordeste de La Pampa y los del sur de esa provincia que limitan con Buenos Aires, Córdoba y la provincia de Santa Fe.
La situación es dramática en la mayor parte de la denominada cuenca del Salado, desde la desembocadura de ese río en la bahía de Samborombón, atravesando toda esa región, hasta La Pampa y Córdoba. "Parte de esas zonas, como el partido de General Villegas, vienen en problemas desde hace más de 15 meses", destaca el trabajo. Sobre el volumen de hectáreas analizadas, 5,5 millones están inundadas y/o anegadas. Es el 26% de la superficie de la región considerada.
Pero, además de lo que está bajo el agua o con serios problemas de anegamientos, el trabajo detectó también la superficie que no tiene piso, por estar altas las napas, y donde no se puede realizar ninguna clase de labor. En números, la superficie en esas condiciones suma 2,5 millones de hectáreas. De este modo, entre la superficie inundada y la que no tiene piso hay 8 millones de hectáreas afectadas.
En el último ciclo agrícola, en el área complicada se plantaron 7,2 millones de hectáreas con los cultivos de soja, girasol, maíz, trigo y cebada. Eso representó el 23% de la agricultura nacional y es ése justamente el porcentaje del área para agricultura que hoy tiene interrogantes de cara a la nueva campaña. "De continuar las precipitaciones por encima de la media, la situación se seguirá agravando. Si bien los pronósticos auguran un escenario de precipitaciones algo más bajas que lo normal, la situación actual no nos permite ser optimistas", explicó Ginestet en el trabajo.
Considerando la superficie comprometida para la agricultura, agregó que la actual situación hídrica en el país "pone un gran manto de duda sobre la posibilidad de llevar a cabo esos cultivos este año".
"En promedio, más del 25% de la producción agrícola nacional se encuentra en la zona afectada, siendo el maíz, con el 30% de la superficie potencial (1,47 millones de hectáreas), el que podría verse más perjudicado", consigna el trabajo de Carbap.
Respecto de la ganadería, Buenos Aires, Córdoba, La Pampa y Santa Fe reúnen 32,6 millones de cabezas vacunas. De ellas, en las zonas inundadas hay 14,1 millones de cabezas, el 43% de la hacienda de todas esas provincias o el 26% del rodeo nacional, que alcanza un total de 53,5 millones de cabezas.
Entre las regiones, sobresale el impacto en la provincia de Buenos Aires, que tiene el 63% de su rodeo sobre tierras inundadas o anegadas. "El rodeo ganadero de la provincia de Buenos Aires se encuentra ante un potencial daño de impacto severo; 12 de los 18 millones de cabezas de la provincia se encuentran en el área inundada", señala el informe.
La cuenca baja del Salado, que alberga un porcentaje importante del rodeo de cría de la provincia y del país, se encuentra en la zona afectada. Y el ganado que está en esas zonas "está en la etapa de parición, por lo que se está definiendo la producción potencial del año próximo, que seguramente tendrá un impacto negativo en la tasa de destete de 2018", señala el informe de Carbap.
En el caso de la lechería, se observa que otra vez es crítico el panorama en Buenos Aires. De 2485 tambos, un 60% (1498) está en la zona afectada. En tanto, de sus 467.625 vacas en ordeñe, el 67% se encuentra en la región comprometida por el agua.

Caminos rurales
Entre los partidos inundados, en las últimas semanas la situación se agravó en Bolívar. Allí, según la productora Laura Hernández, del 70% de las 500.000 hectáreas del partido que estaban inundadas hace quince días ahora se llegó prácticamente al ciento por ciento.
En esa ciudad, la semana pasada los productores hicieron una movilización hasta el centro cívico y dejaron un petitorio al jefe comunal, Eduardo "Bali" Bucca, reclamando por los caminos rurales (de lo que se informa por separado).
Entre otros temas, el informe de Carbap se detiene sobre la infraestructura en toda la región inundada de las cuatro provincias. Dice que hay 15.000 kilómetros de caminos cortados o intransitables. Al respecto, habla de "la nula inversión en infraestructura hídrica de las ultimas décadas, en una zona altamente productiva". Y agrega: "Es necesario que las obras que están comenzando y por comenzar se mantengan en ritmo apropiado por los próximos años para tratar de mitigar el impacto de estos eventos, que cada año se vuelven más frecuentes".
El trabajo alerta que en la pampa húmeda, por las inundaciones, "mucha gente" tuvo que mudarse a los centros urbanos y "varias escuelas rurales están cerradas momentáneamente", con chicos que no pueden concurrir a clases.
.

Miles de hectáreas en La Pampa bajo agua



Hay 200 mil hectáreas bajo el agua en La Pampa

Fecha de Publicación
: 29/08/2017
Fuente: El Diario de La Pampa
Provincia/Región: La Pampa


Un informe del INTA determinó que en los últimos meses la zona inundada en la provincia se redujo, todavía hay 200 mil hectáreas cubiertas de agua. Además, hay amplias zonas que están anegadas
El ministro de la Producción, Ricardo Moralejo dijo que hay 200 mil hectáreas con agua en superficie en la provincia de La Pampa, según el último informe del INTA. La zona con agua se redujo si se la compara con las casi 500 mil que había en abril pasado después de las intensas lluvias. A las hectáreas bajo agua hay que sumarle las zonas anegadas donde no se puede transitar porque la napa está al nivel del suelo.
El funcionario dijo que en los próximos días tendrán más precisiones a partir de que le han solicitado al INTA un nuevo muestreo satelital.
En la provincia hay 12 departamentos afectados por las inundaciones y que fueron declarados en emergencia.
“Las pérdidas son cuantiosas, es complejo su cálculo, porque hay que ver el cálculo inmediato que produjo en pérdidas productivas sino también las pérdidas que se generaron como consecuencia de las inversiones extras que hubo que hacer, remediar caminos, rutas o la asistencia los productores”, explicó el ministro en diálogo con el canal de la CPE.
A esas pérdidas hay que sumarle “la cantidad de hectáreas van a quedar sin poder se sembradas para la próxima cosecha”.
.

El "agronegocio" y sus "daños colaterales "

El daño colateral de los agronegocios

Fecha de Publicación
: 23/08/2017
Fuente: Página/12
Provincia/Región: Buenos Aires


Cuando en abril de este año el intendente de Salto, Ricardo Alessandro, culpó a la “soja que sembramos hasta en las macetas” por las inundaciones que afectan a la provincia de Buenos Aires, pocos lo tomaron en serio. Cinco meses después, 400 mil hectáreas están bajo el agua en el partido de Bolívar, donde la situación es “crítica”.
De acuerdo al informe satelital que el INTA le acercó a la secretaría de Asuntos Agrarios bolivariense, el 55 por ciento del partido está directamente inundado y un 30 por ciento anegado, lo cual significa que unas 425 mil hectáreas quedaron afuera del circuito productivo agrícola-ganadero. 
"Venimos desde febrero con los problemas de excesos hídricos, pero nunca llegamos a esto, ahora la situación es crítica", dijo Mariano Ruiz, secretario del municipio. Ruiz detalló que "en lo que va del año llovió unos 1400 milímetros aproximadamente, cuando la media anual está entre 800 y 900 en nuestro distrito".
Las inundaciones afectaron no sólo la cosecha de girasol, sino también la de soja, y tampoco permitió cumplir el ciclo de siembra de maíz. En total, un 30 por ciento de la producción quedó descartada y literalmente bajo 50 centímetros de agua. El arroyo Villamanca, por ejemplo, está “totalmente desbordado y alcanza unos 600 metros del cauce, es una locura”. 
El intendente de Bolívar, Eduardo Bucca, llamó a "reflexionar sobre la necesidad de un programa de infraestructura y desarrollo hídrico en la Provincia de Buenos Aires". "Es momento de pensar sobre un plan que sea serio, contundente, que se ejecute. Estamos hablando de la obra del Plan Maestro de la Cuenca del Salado hace muchos años y está sin finalizar. No digo que eso evitaría la actual situación, sino que ayudaría a mitigar los daños", dijo Bucca en declaraciones a Radio Télam. Señaló además que "a la situación puntual se suma un elemento que llegó para quedarse, que es el cambio climático".
Sin embargo, Bucca obvió una cuestión que ya se debate incluso en el seno mismo del lobby agropecuario: ¿hasta cuándo podrá continuar este modelo de explotación de siembra directa y aplicación indiscriminada de agroquímicos, que compactan el suelo y le quitan absorción? Así lo dejó en claro Miguel Angel Taboada, director del Instituto de Suelos del INTA, en la última edición del congreso Aapresid, a principios de mayo en la ciudad de Rosario: “Nos dijeron que estábamos bendecidos por los suelos que teníamos y nos pensamos que podíamos hacer cualquier cosa”.
Ante un público compuesto por directivos de multinacionales y productores, Taboada fue tajante: “El monocultivo deja una gran cantidad de agua ociosa. En diez años de monocultivo de soja se dejaron de consumir 5000 mm de agua. Lo que estamos haciendo con los suelos, está influenciando. Hay recarga de acuíferos y napas freáticas, salinización de suelos”.
Según el Ministerio de Agroindustria, en la Argentina se consumen 13.000 toneladas de agroquímicos por año.
Para el ingeniero agrónomo y máximo referente en agroecología en el país, Eduardo Cerdá, el problema es sistémico: “Son 25 años de un uso muy intensivo de los suelos, de falta de rotaciones, de cultivos que dañan, y eso hace que los suelos pierdan porosidad, y por ende retención de agua. Los suelos se sellan, no absorben, el agua queda en superficie y se desplaza por la pendiente hacia los lugares de menor altura”.
Cerdá calculó en un 20 por ciento la pérdida de poder de absorción del suelo en distintos puntos de la provincia de Buenos Aires y señala como responsable a la siembra directa con agroquímicos. “Una vez consumado el desastre, reclaman obras hídricas para sacar el agua. Después vamos a tener una sequía terrible”, advirtió a Página/12.
“Hay un error en la forma de ver la agricultura: se cree que con los fertilizantes se reemplaza la fertilidad. Y no es así. Es una falsa percepción de riqueza. Es cortoplacismo, nos estamos empobreciendo, porque estamos perdiendo el recurso del suelo.No sé cuánto tiempo tardarán en recuperarse, quizá sean años. El modelo está mal concebido”, cerró.
.

Localidad rionegrina 'se planta' contra la desertificación



Jacobacci va por más verde contra la desertificación  

Fecha de Publicación
: 03/08/2017
Fuente: Diario Río Negro
Provincia/Región: Río Negro


El municipio de Jacobacci junto a otras instituciones puso en marcha un ambicioso proyecto forestal para crear espacios verdes, mejorar la estética en algunos sectores y contribuir en la lucha contra la desertificación.
Operarios municipales comenzaron a realizar los primeros pozos en el camino que une la ciudad con la zona de chacras para plantar 200 árboles.
También, con la colaboración de una de las empresas que construye la pavimentación de la ruta Nacional 23, se nivela un terreno para instalar un sistema de riego con el respectivo reservorio de agua.
Buscan reforestar así un sector de la zona urbana que fuera sembrado en agosto de 2012, con el objetivo de crear una senda peatonal a la vera del camino.
“Estamos realizando los trabajos de nivelación del terreno y demarcación de la línea donde se plantarán árboles de diferentes especies. La idea es forestar del camino que va al vivero municipal, al campo de doma “Beto Liempe, y la cancha de fútbol”, señalaron desde la Secretaría de Servicios Públicos.
.

Día mundial contra la desertificación y la sequía 2017



Día mundial de lucha contra la desertificación y la sequía

Fecha de Publicación
: 17/06/2017
Fuente: Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable
Provincia/Región: Nacional


Nuestro país suscribió en 1994 la Convención de las Naciones Unidas para la Lucha contra la Desertificación, que dispone las pautas para enfrentar este problema y mitigar los efectos de la sequía a través del mejoramiento de la productividad del suelo, su rehabilitación, su conservación y el ordenamiento de los recursos hídricos y de las tierras.
Neutralizar la degradación de la tierra es prioritario en materia ambiental. En función de ello, hemos iniciado un camino en las medidas a tomar hacia 2030. Entre ellas se encuentran luchar contra la desertificación, rehabilitar las tierras y los suelos degradados —incluidas las tierras afectadas por la desertificación, la sequía y las inundaciones—, y procurar lograr un mundo con una degradación neutral del suelo. Además, trabajamos en múltiples iniciativas, programas y proyectos junto con las provincias y los municipios, para mejorar la calidad de vida de más de 7 mil familias.
En articulación con importantes instituciones, pusimos en funcionamiento el Observatorio Nacional de la Degradación de Tierras y la Desertificación, con sitios pilotos en las principales ecorregiones del país, donde se genera información y se ensayan programas de restauración. La evaluación y el monitoreo de la degradación de la tierra y su visibilización a través de mapas temáticos facilitan la toma de decisiones al momento de planificar acciones en el territorio.
.

El problema de la erosión hídrica en varias provincias

El 43 por ciento de la superficie provincial sufre erosión hídrica

Fecha de Publicación
: 28/04/2017
Fuente: Sin Mordaza
Provincia/Región: Nacional


La erosión hídrica afecta a casi la mitad del territorio santafesino.
Casi la mitad de la superficie de Santa Fe —el 43 por ciento— sufre un problema de erosión de origen hídrico como consecuencia de los cambios en el uso del suelo introducidos en los últimos años por el modelo agroindustrial pampeano, según consigna el informe "Estado del ambiente" edición 2016 presentado la semana pasada por el Ministerio de Ambiente de la Nación.
Esa investigación detalla que, en total, existen más de cinco millones de hectáreas (5.672.782 con exactitud) en la provincia afectadas por algún tipo de erosión hídrica, la gran mayoría (5.381.136 hectáreas) en un grado "ligero a moderado" mientras que el resto (291.646 hectáreas), padece este problema en forma "severa a grave".
A la hora de explicar por qué ocurre esto, desde esa cartera del gobierno nacional señalaron que en las regiones con tierras húmedas y subhúmedas, este fenómeno se debe a un cambio en el modelo productivo "traducido en una mayor agriculturización y un cambio de uso del suelo, con una menor rotación".
También alertaron sobre las graves consecuencias económicas, ambientales y sociales que provoca la degradación de los suelos, cuyo empobrecimiento no sólo se traduce en una disminución de la rentabilidad agropecuaria, si no también en procesos de "migración de la población, abandono de tierras y situaciones de pobreza y marginalidad".

Provincias más afectadas
La provincia que más padece la erosión hídrica de sus suelos es Entre Ríos, con el 50 por ciento de su superficie afectada, seguida por La Rioja (49 por ciento) y Formosa (46 por ciento). Santa Fe es la cuarta provincia de ese listado.
En realidad, se trata de un problema que repercute en buena parte del territorio nacional de la República Argentina. De acuerdo a lo que se desprende del informe del Ministerio de Ambiente de la Nación, mientras que en 1956 había unos 34 millones de hectáreas en todo el país que estaban afectadas por algún fenómeno de erosión, esa cifra llegó el año pasado a los 105 millones.
"La creación de nuevos fertilizantes, el predominio de la siembra directa (90 por ciento del área sembrada), la presencia de la soja transgénica desde 1996, los maíces híbridos, la agricultura de precisión y el crecimiento de la agroindustria entre otros factores generaron problemas que aumentaron marcadamente dichos procesos a lo largo de los últimos 20 años", se explica en el trabajo.
Esta degradación de los suelos que padece "la mayoría del territorio argentino" provoca un desequilibrio territorial/ambiental que incluye "la pérdida de biodiversidad y de servicios ecosistémicos, suelos contaminados por agroquímicos, erosión hídrica y eólica, la disminución de la cobertura vegetal y/o de la productividad de la vegetación natural y la alteración del ciclo hidrológico, con consecuencias negativas sobre la población".

Efectos sociales
El informe "Estado del ambiente" destaca que el cambio estructural sufrido por los sistemas agropecuarios de la pampa en las últimos dos décadas genera —además de la degradación del suelo—, falta de trabajo rural, concentración de la tierra, especulación inmobiliaria y problemas de salud o de mala alimentación asociados a este modelo agroindustrial.
"En gran parte de estas regiones se evidencia un profundo fenómeno social: el envejecimiento de la población rural originado por la migración de los jóvenes que, empujados por falta de oportunidades, buscan un desarrollo personal en otros lugares".
En ese punto se mencionan estadísticas censales que muestran que la fracción de la población que habita en las zonas rurales es ampliamente menor a la que vive en las áreas urbanas, con una tendencia creciente a la concentración en estas últimas.

Análisis sistemático
El informe del estado del ambiente es un análisis sistemático sobre la situación ambiental del territorio argentino que considera sus dimensiones sociales, económicas, culturales y ecológicas.
El estudio contiene datos y estadísticas sobre los desafíos que la agenda ambiental impone: la situación del agua, la atmósfera, el suelo, la biodiversidad, los cambios climáticos, los residuos; un diagnóstico sobre grandes unidades biogeográficas (bosques, pastizales, zonas áridas, humedales, el mar Argentino y la Antártida) y un marco jurídico ambiental.
5 millones de hectáreas afectadas en la provincia. Santa Fe es el cuarto territorio en el país por la magnitud de suelos con erosión hídrica.
.

Paleoclimatología de la Patagonia

Buscan determinar cuándo se empezó a secar la Patagonia

Fecha de Publicación
: 03/03/2017
Fuente: El Litoral
Provincia/Región: Patagonia


La investigación se basa en el estudio de la fauna y la flora de la formación geológica Santa Cruz.
Investigadores del Conicet, su similar bonaerense, la Universidad y el Museo de La Plata buscan determinar en qué momento de la edad Santacrucense, entre el cenozoico y mioceno temprano, hace 18 millones de años, comenzó el proceso de secamiento de la Patagonia, sobre la base del estudio de la fauna y la flora de la formación geológica Santa Cruz, poblada entonces de vegetación tropical.
“En esa época, se registró un momento de clima óptimo en todo el mundo, con condiciones mucho más cálidas y húmedas que las que hay ahora en la Patagonia, de vegetación tropical, y animales de gran tamaño y peso, en su mayoría carnívoros”, dijo a Télam Susana Bargo, paleontóloga del Museo de La Plata y de la Comisión de Investigaciones Científicas de la provincia de Buenos Aires.
El proyecto “Paleoecología y bioestratigrafía de la formación Santa Cruz” -parte de otro estudio de carácter continental-, desde hace 15 años convoca entre enero y febrero a los científicos a la zona para la recolección de restos fósiles de vertebrados, mamíferos, monos, marsupiales, aves, reptiles y algo de flora, con el fin de analizarlos y reconstruir el ambiente existente en ese período.
“Esa reconstrucción ambiental resulta algo mucho más cercana a lo que es la cordillera hoy, con el agregado de palmeras alternando con pastizales, y que podía soportar una comunidad de vertebrados mucho más diversa y de mayor tamaño y peso que los actuales, incluyendo lagartos, osos hormigueros y hasta monos”, describió el paleontólogo Sergio Vizcaíno.

Fauna tropical
La fauna que vivió en la costa atlántica entre los ríos Gallegos y Coyle, donde se encuentran los ejemplares mejor preservados, forma parte de una publicación que en 2012 condensó toda la información recuperada de ese período particular, con la participación de una treintena de autores.
“Resulta comparable a lo que hoy encontramos en comunidades biológicas de una región intratropical, con temperaturas promedio de 20 grados anuales y precipitaciones que estaban alrededor de los 1.500 milímetros por año”, agregó Vizcaíno, profesor de la Universidad Nacional de La Plata e investigador del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), que dirige el proyecto.
En ese período de estudio, la Tierra tuvo la mayor temperatura y humedad de los últimos 35 millones de años, equivalente a lo que ocurre hoy por otras razones, la acción humana y no las geológicas, como fue la fase de levantamiento de la cordillera que empieza a interrumpir los flujos de vientos del Pacífico, que hoy quedan mayoritariamente del lado chileno y cuando llegan a la Patagonia extraandina han perdido casi toda la humedad.
También tuvieron que ver cuestiones astronómicas, “la posición de la Tierra dentro de su propia órbita y el ángulo de orbitaje”, añadió el investigador que lidera el equipo que trata de calibrar en qué momento se inicia el secamiento de la región.
El paleontólogo advirtió que “ciertamente había condiciones muy diferentes a las actuales” y que en la última fase de desarrollo de esa fauna “empiezan a haber evidencias del inicio de etapas de secamiento de la Patagonia, no extremas aún. Eso es lo que estamos tratando de calibrar, exactamente cuándo ocurre ese evento, de acuerdo con cómo va reflejándose en los organismos” bajo estudio, explicó.
.

Investigan tóxicos en suelo costero



El uso de suelo costero y el impacto ambiental de compuestos ecotóxicos

Fecha de Publicación
: 18/02/2017
Fuente: Argentina Investiga
Provincia/Región: Nacional


Un grupo de investigadores analiza la presencia de compuestos con alta potencialidad ecotóxica, capaces de provocar alteraciones en la reproducción, el desarrollo y en algunas funciones inmunológicas de animales y vegetales, en una zona costera de alta complejidad. Entre los objetivos del proyecto se encuentra el de cuantificar las exportaciones de estos compuestos a través de la red de drenaje.
Un grupo de investigadores del Departamento de Química de la Universidad Nacional del Sur, de Bahía Blanca, y el Instituto Argentino de Oceanografía (UNS-Conicet), busca conocer la presencia y el transporte de contaminantes en la zona costera de esa ciudad. Para ello, llevan adelante un proyecto de investigación con muestreos en 16 sitios estratégicos sobre la cuenca del drenaje y 8 áreas en el estuario, dedicado a componentes identificados a nivel mundial como altamente peligrosos, resistentes a la degradación y que se acumulan en los tejidos.
Se trata de compuestos con alta potencialidad ecotóxica, ésta incluye diversas alteraciones en la reproducción, el desarrollo y en algunas funciones inmunológicas de animales y vegetales. “Los resultados de este trabajo, cuyo desarrollo demandará en total cuatro años, brindarán un panorama integrado de la presencia y transporte de contaminantes hacia la zona costera”, explica a Argentina Investiga su director, el doctor Andrés H. Arias.
Los investigadores analizan la presencia de compuestos organoclorados (OCs), bifenilos policlorados (PCBs) e hidrocarburos aromáticos policíclicos (PAHs). Se trata de subgrupos catalogados como “contaminantes orgánicos persistentes”. “Estos contaminantes son mayormente sustancias sintetizadas o generadas por el hombre, resistentes a la degradación y que se acumulan en los tejidos de diferentes especies” explica Arias.
En este proyecto se muestrean diez de los doce compuestos definidos por la Convención de Estocolmo como altamente prioritarios para su monitoreo, regulación y eliminación, conocidos como “the dirty dozen” (la “docena sucia”, en castellano). El resto forma parte de un listado de 90 incluidos en el Global Monitoring Plan (GMP, Convención de Estocolmo), un proyecto de monitoreo global. Además se realizan otro tipo de mediciones asociadas, como parámetros fisicoquímicos (Turbidez, pH, Temperatura, Salinidad, Oxígeno Disuelto), caudal de drenaje, material particulado en suspensión, etcétera.
Los objetivos del proyecto apuntan a cuantificar las exportaciones de estos compuestos a través de la red de drenaje, y a determinar de qué manera los cambios en los usos del suelo costero y las áreas de drenaje asociadas alteran el tipo y la distribución de descargas, identificar los principales medios de transporte y a estimar su impacto ambiental.
El área de estudio es el estuario de Bahía Blanca y su respectiva red de drenaje, conformada por cursos de agua, arroyos, canales de drenaje artificial y descargas cloacales. Ocupa el sudoeste de la provincia de Buenos Aires y cuenta con una superficie aproximada de dos mil trescientos kilómetros cuadrados. Se trata de un sector con una alta presencia de actividades humanas: puertos de aguas profundas que operan con cereales, fertilizantes, combustibles y contenedores; las ciudades de Bahía Blanca y Punta Alta, las localidades portuarias de General Cerri e Ingeniero White, la Base Naval Puerto Belgrano y uno de los complejos petroquímicos más grandes de América del sur.
“El uso del suelo se encuentra en continuo cambio, no sólo en el orden local y regional sino a nivel global. Se estima que 3.600 millones de personas viven en la franja de menos de 60 kilómetros de la costa y que esa proporción aumentará a 6.400 millones en los próximos treinta años. Al mismo tiempo, el 80% de los recursos oceánicos se concentra en la plataforma continental, que también funciona como reciclador: más de tres cuartas partes de los materiales que degradan proceden del continente. Dichos materiales llegan a la costa infiltrándose en el suelo para reaparecer en los ríos, cuencas y redes de drenaje que desembocan en el mar, por derramamiento directo o por transporte atmosférico”, explica el científico. “Este problema es sostenido y agravado por la deficiencia o ausencia de planes de manejo, suficientes estructuras urbanas de saneamiento, así como la extensión de la agricultura intensiva y la industria en desarrollo principalmente adquirida en el transcurso del siglo XX y comienzos del XXI”, agrega.
Las investigaciones muestran que los compuestos, luego de ingresar al ambiente, comienzan un largo proceso de transporte que suele culminar con su depósito final en suelos o sedimentos profundos, o bien pasan de una especie a otra en la cadena alimenticia. Según el Convenio de Estocolmo, se califican como “persistentes” a los que muestran una vida media en el agua mayor a dos meses y en el suelo a seis meses.
El grupo de trabajo está integrado por seis investigadores de distintas disciplinas, a los que se suman ocho más de áreas como Biogeoquímica, Sistemas de Información Geográfica, y Metales Pesados. Utilizan como indicadores bioquímicos a enzimas sensibles a la presencia de los contaminantes seleccionados, que están en algunas especies como el mejillín, y algunas variedades de peces. Algunas de las enzimas son Lactato Deshidrogenasa (LDH), Aspartato Aminotransferasa (AST), Superóxido dismutasa (SOD), Glutatión reductasa (GR), Glutatión peroxidasa (GPx), etcétera”. En cuanto a resultados –en vías de publicación– encontramos que algunas de estas enzimas se disparan concomitantemente a la presencia de contaminantes orgánicos persistentes, y son evaluadas en la actualidad para establecerlas como herramientas de diagnóstico y monitoreo.
“Investigamos el tema desde 2004, y desde entonces pudimos generar líneas de base para todos los compuestos mencionados en sedimentos, peces, mejillones y hasta delfines (ver referencias). En este nuevo proyecto pretendemos contestar nuevas preguntas a partir de nuevos enfoques, que incluyan aspectos esenciales aún no abordados; por ejemplo, el uso de bioindicadores, mediciones estimativas de flujo de contaminantes desde el continente al océano mediante monitoreo continuo en muestras integradas, vías atmosféricas de transporte, etcétera”, explica Arias.
.

La política socio-ambiental ha sido y es subestimada



Inundaciones, sequías, incendios

Fecha de Publicación
: 19/01/2017
Fuente: Clarín
Provincia/Región: Nacional


Por Maristella Svampa y Enrique Viale

¿Por qué la política socio-ambiental ha sido y es subestimada sistemáticamente por todos los gobiernos? ¿Es que los gobernantes de turno, más allá del color ideológico, no toman en cuenta las nefastas consecuencias que tiene la ausencia de una auténtica política socio-ambiental, incluso en su relación con los costos económicos? ¿Creerán que es una mera cuestión de cosmética, de sólo un par de slogans efectistas tras un discurso de marketing?
Se impone que la Argentina ponga en su verdadero lugar la problemática ecológica. Que ésta no sea pensada como “un aspecto” o “una dimensión más”, sino a partir de una perspectiva integral. Ni siquiera se trata de cambiar de Ministro de Ambiente y de reemplazarlo por uno más idóneo. En realidad, deben debatirse las consecuencias, ya inocultables, del modelo productivo/extractivista consolidado en nuestro país. Cualquier política ambiental que quiera llevarse a cabo sin debatir las múltiples implicancias del modelo de desarrollo hoy vigentes, será un parche, un recorte parcial, incluso un “ambientalismo superficial” (como dice laEnciclica Laudato Si), másque a una propuesta de discusión integral sobre sus consecuencias socio-ambientales, socio-sanitarias, económicas, culturales y políticas.
Las causas de la emergencia socio-ambiental que hoy golpean a la Argentina son de carácter complejo y pluridimensional, pero está lejos de aparecer como una “tragedia inevitable”. Existen dos factores mayores, íntimamente ligados, que explican la magnitud de estos eventos: uno es de carácter global, el Cambio climático, que profundiza y multiplica los fenómenos climáticos extremos; otra es de carácter nacional, vinculada a la expansión de un modelo de (mal) desarrollo, incompatible con los ciclos de la Naturaleza.
El cambio climático no es una excusa y mucho menos una abstracción. En realidad, es lo menos “natural” que existe, pues es de origen antrópico y nos recuerda que en la era delAntropoceno,el ser humano se ha convertido en una fuerza geológica de alcance global. Dicho carácter global no diluye ni tampoco atenúa la responsabilidad de los funcionarios y políticos, sino todo lo contrario, la acentúa y la pone en valor, a la hora de tomar decisiones acerca de las políticas públicas territoriales o de gestar programas de control y prevención ante los impactos que éstas políticas han generado. Dicho de otro modo: los incendios, inundaciones, sequías y demás eventos extremos no son parte de una“profecía apocalíptica”,sino de un fenómeno extendido en el planeta, que las políticas de gobierno potencian a través de medidas en favor del agronegocio, la megaminería, la fractura hidráulica (fracking) y los megaemprendimientos inmobiliarios, entre otros.Más allá de sus diferencias internas, dichos modelos presentan una lógica común; gran escala, ocupación intensiva del territorio, amplificación de impactos ambientales y socio-sanitarios, preeminencia de grandes actores corporativos y democracia de baja intensidad. Ahora bien,¿qué país puede estar preparado para el Cambio Climático, o generarverdaderas estrategias de adaptación, si cuenta con políticas públicas que promueven ciegamente la deforestación, la destrucción de humedales, el incremento de la producción de combustibles fósiles, entre otros?
El corazón del modelo sojerototalmente inundado no es sólo consecuencia de altas precipitaciones, sino de un suelo que ya no absorbe los excesos hídricos, producto de un capitalismo agrario que necesita arrasar con bosques nativos y humedales en su avance por los territorios. Un modelo que es necesario replantear, porquesi bien trae riqueza para un sector de la población argentina, genera enormes impactos negativos que paga el resto de la sociedad y la naturaleza. ¿Acaso no cuentan ni siquiera los costos económicos que generan los daños producidos por las inundaciones y los incendios? ¿O los costos en salud, cuando no de vidas humanas?
Lamentablemente, gran parte de la clase política no puede -ni quiere- relacionar las causas de las inundaciones y de los voraces incendios con el modelo de desarrollo y los desastres ecológicos que éste genera. Es hora de hacerlo, no hay más excusas.
.

Evalúan la desertificación en el sur rionegrino



La desertificación en la Región Sur, materia de estudio

Fecha de Publicación
: 06/01/2017
Fuente: Diario Río Negro
Provincia/Región: Río Negro


Instalaron una planta con equipamiento de última generación para medir vientos, temperatura y humedad entre otros factores. Servirá para analizar la degradación de la tierra.
Una estación meteorológica de última generación fue instalada en un campo de Lipetrén Grande con el objetivo de mejorar la información sobre el clima en esta parte de la Región Sur rionegrina y contribuir al estudio de la desertificación y la degradación de la tierra.
El equipamiento fue instalado en el campo de la familia del productor Segundo Collueque, ubicado a unos 90 kilómetros al sur de Jacobacci y a más de 1.100 metros sobre el nivel del mar. Participaron referentes de distintos organismos que estudian, a través de la ejecución de distintos proyectos, la desertificación, el estrés hídrico y el cambio climático en la zona. Se trata del INTA, Centro Atómico Bariloche, Climagua, Senasa, cooperativas Ganadera Indígena de Jacobacci, De Aguas y Otros Servicios Públicos de Jacobacci y Surgente y de la delegación Jacobacci de la Subsecretaría de Agricultura Familiar, además de los productores de la zona.
El equipamiento forma parte de un lote de 15 estaciones meteorológicas que se están instalando en distintas zonas del país desde el Observatorio Nacional de Degradación de Tierras y Desertificación para recopilar información sobre el clima en esta parte de la Patagonia. “Nos ayudará a mejorar la adquisición de datos para nuestra institución y para quienes lo requieran”, señaló Donaldo Bran de INTA Bariloche.
El Observatorio Nacional de Degradación de Tierras y Desertificación fue creado para recopilar, normalizar y generar información a distintas escalas, con el fin de fortalecer la toma de decisiones en el manejo de la tierra. Por su lado, el ingeniero Sebastián Gortari, del Centro Atómico Bariloche y del Proyecto Climagua, detalló que la estación meteorológica instalada servirá para adquirir datos sobre viento (velocidad y dirección), humedad, registro de lluvias, presión atmosférica, temperatura y radiación solar.
En la actualidad no hay registros oficiales exactos de precipitaciones o de la acumulación de nieve en los últimos 30 años.
.

Blog Archive

Temas

Archivo de Blogs