Así se realiza el monitoreo del Riachuelo



Monitoreos de la Cuenca Matanza Riachuelo

Fecha de Publicación
: 12/02/2017
Fuente: Acumar
Provincia/Región: Riachuelo


ACUMAR controla la Cuenca a través de estaciones de monitoreo desplegadas en sus diversos cursos de agua, en las que se realizan tomas de muestras periódicas, que luego son enviadas a analizar en laboratorios. Los resultados de estos estudios son utilizados por ACUMAR en distintas herramientas de análisis como bases de datos y modelos matemáticos, que permiten realizar evaluaciones sobre la calidad del agua del río.
Desde su creación, ACUMAR controla la Cuenca a través de estaciones de monitoreo desplegadas en sus diversos cursos de agua, en las que se realizan tomas de muestras periódicas, que luego son enviadas a analizar en laboratorios. Los resultados de estos estudios son utilizados por ACUMAR en distintas herramientas de análisis como bases de datos y modelos matemáticos, que permiten realizar evaluaciones sobre la calidad del agua del río. Estos estudios ayudan a responder preguntas sobre la situación ambiental del río a lo largo de los distintos cursos de agua de la Cuenca, predecir su comportamiento y obtener información sobre las posibles fuentes de la contaminación. Además, son un aporte para las tareas de saneamiento: estas investigaciones son imprescindibles a la hora de decidir qué medidas tomar para recuperarlo.

Red de monitoreo
Los datos sobre la calidad del agua son reunidos por la Coordinación de Calidad Ambiental a través de una red de monitoreo de 73 estaciones de toma de muestras desplegadas por toda la Cuenca, gestionada por ACUMAR. Las muestras tomadas manualmente se analizan para medir diversos parámetros. Pero sobre la red también se efectúan mediciones simultáneas de caudal; es decir, de la cantidad de agua que transporta el río. Este es un dato fundamental para evaluar mejor cuál es la situación del río en cada momento. Con estos datos es posible detectar aumentos repentinos en los valores de ciertos parámetros del agua, como los de sustancias contaminantes que indican actividades no autorizadas en los establecimientos ubicados dentro de la Cuenca, lo que colabora en la tarea de identificar infracciones y dar alerta a las áreas de control.
Este es un seguimiento constante (una vez por mes se hacen las mediciones de caudal, y cada dos meses las de calidad) a lo largo de las 14 (catorce) Subcuencas Hídricas que integran la Cuenca del Matanza Riachuelo, y da la posibilidad de hacer comparaciones sobre cómo se encuentra el río entre los distintos momentos del año, y también trazar una línea histórica de su evolución.

Base de datos
Esta red de monitoreo, junto a otros estudios llevados adelante por ACUMAR, generan grandes cantidades de información. ¿Cómo organiza ACUMAR todos estos datos? Para tal fin se creó la Base de Datos Hidrológicos de la Cuenca Hídrica Matanza Riachuelo que es una base abierta y disponible para consultas en la web donde se almacenan los resultados de los diversos estudios y mediciones realizados hasta ahora, y se agregan permanentemente otros nuevos, ayudando a crear una imagen cada vez más precisa de la Cuenca. En ella se ofrece información muy diversa sobre la situación del río a lo largo de la Cuenca: por ejemplo, cuál era el nivel del agua y su caudal en marzo de este año en el arroyo Morales, en su cruce con la ruta 4 en Marcos Paz; o en el curso principal, en Puente La Noria, entre Ciudad de Buenos Aires y Provincia, por nombrar solo dos de las más de 70 estaciones de información disponibles.
También se publican datos cruciales para evaluar el estado del agua, como los niveles de oxígeno disuelto: son una amplia variedad de parámetros analizados a través de las tomas de muestras de agua de la red, que incluyen temperatura, presencia de distintos metales pesados, de sólidos disueltos y suspendidos, y de materia orgánica, entre otros. La base incluye, además, datos tomados en diversas estaciones en relación a indicadores biológicos, como la presencia de algas diatomeas y organismos macroinvertebrados -ambos microorganismos-, y sobre el estado del agua subterránea y de los humedales prioritarios (sobre estos últimos ver la nota en revista Cuenca N° 2 en la web de ACUMAR). Esta información, actualizada en forma permanente, es un avance histórico. Nunca antes se había contado con datos tan amplios, generados sistemática y sostenidamente desde hace 8 años, acerca de las variables y factores que influyen en la calidad del agua de la Cuenca.
Desde la página web de ACUMAR es posible descargar los datos en forma de planillas, y también realizar gráficos que ayuden a su visualización y comprensión. Esto permite un seguimiento de los distintos parámetros a lo largo del tiempo, en los diferentes puntos de la Cuenca, y también compararlos, por ejemplo, con los parámetros de calidad de agua para diferentes usos.
La base, además, aporta información para otras coordinaciones del organismo como la de Plan de Manejo Hídrico de la Cuenca, que aprovecha los datos sobre los niveles y caudales del río para, por ejemplo, el estudio del riesgo de crecidas e inundaciones en distintos lugares de la Cuenca, fundamental para planificar las medidas estructurales que ayuden a prevenirlas o mitigar su impacto.
Esta herramienta es también valiosa como espacio de consulta para investigadores dedicados a estudiar el río en muchos otros ámbitos, más allá de ACUMAR; por ejemplo, para los investigadores que trabajan en centros universitarios en temas relacionados con el territorio de la Cuenca y para los distintos organismos públicos de las jurisdicciones abarcadas. Ente otros materiales, se incluye una sección de publicaciones y estudios actuales e históricos de diversos organismos públicos. Toda esta información es utilizada por distintas organizaciones civiles interesadas en la situación del Matanza Riachuelo y en seguir el avance de las tareas desarrolladas por ACUMAR.

Base de Datos Hidrológica de la Cuenca Hídrica Matanza Riachuelo
Una base pública y de acceso libre en Internet disponible en http://www.acumar.gob.ar/pagina/1218/control-y-monitoreo  Incluye un mapa interactivo con los puntos de la red de monitoreo de agua superficial y subterránea, y las estaciones meteorológicas gestionadas por ACUMAR, y otros organismos públicos. Y permite consultar los datos obtenidos desde el inicio del monitoreo. Incluye fotos, informes y legislación actual e histórica de estudios sobre la Cuenca Matanza Riachuelo.

Modelos matemáticos
Por último, para estudiar la Cuenca también se cuenta con los modelos matemáticos de calidad de agua. Se trata de programas para cálculos complejos sobre el comportamiento hidrodinámico -es decir, del flujo del agua (la manera en que “corre”) - y la calidad de los ríos, utilizados en otras cuencas de nuestro país y del mundo. Estos modelos aprovechan los datos reunidos en la Base Hidrológica y permiten combinarlos con otros sobre el territorio de la Cuenca, como los datos sobre su relieve, con sus diferentes alturas y depresiones, las variaciones en la profundidad del cauce del río, los niveles de precipitaciones y los distintos tipos de suelo, entre otras variables.
Los modelos ayudan a sistematizar toda esta información y permiten visualizar la complejidad de los elementos que se combinan para influir en el comportamiento de los ríos: ayudan a simplificarlos y a la vez a realizar evaluaciones más puntuales sobre ellos, ofreciendo una mirada abarcadora. De este modo, es posible hacer análisis sobre la velocidad con la que decaen y se degradan las distintas sustancias presentes en el agua, al ser arrastradas y avanzar río abajo.
Antes de utilizarlo, el modelo debe pasar por un arduo proceso de pruebas. Pero una vez realizadas, es posible simular escenarios y predecir cómo se comportará el río. Por ejemplo, ¿qué pasaría con la calidad del agua de una Subcuenca si se lograran reducir los aportes de contaminantes provenientes de fuentes difusas en su territorio, como los de los desechos cloacales domiciliarios sin tratar? O, ¿cuánto mejoraría la calidad del agua si se redujeran los aportes puntuales de sustancias que realizan ciertos establecimientos industriales? El modelo ayuda a tener un diagnóstico más detallado de la situación de la Cuenca y a evaluar mejor cuál es la importancia de los diversos factores que influyen en la calidad de sus cursos de agua, reconociendo el efecto que producen en ella.
Todos estos estudios, desde los modelos matemáticos al trabajo de los informes periódicos y los datos del monitoreo continuo, requieren de la participación coordinada de técnicos y científicos con saberes muy diversos, y aportan un elemento fundamental para las tareas llevadas adelante por ACUMAR: ofrecen un conocimiento cada vez más detallado sobre el río y se convierten en una herramienta para tomar decisiones de gestión, ayudando a planificar las medidas que serán más efectivas para recuperar la Cuenca.

Evaluación de Subcuencas Hídricas
Recientemente las Coordinaciones de Calidad Ambiental y Fiscalización, de manera conjunta y coordinada, realizaron una evaluación de las distintas Subcuencas en las que se divide el Matanza Riachuelo, aprovechando los datos generados por la red de monitoreo de calidad de agua y de vertidos de origen industrial y cloacal.
Esta evaluación permitió cruzar los datos de calidad de agua y de vertidos y poner el foco en áreas más reducidas del territorio. Se logró así identificar mejor cuáles son las fuentes de la contaminación y cómo varían en los distintos lugares que abarca la Cuenca. Las fuentes de contaminación son de origen “puntual” (por ejemplo, un efluente de origen industrial o de una planta de tratamiento de líquidos cloacales) o “difuso” (el agua de lavado de origen agropecuario o los aportes de origen cloacal domiciliario de la población no abarcada por las obras de saneamiento). Al reunir todos estos datos es posible evaluar la importancia relativa entre las fuentes de contaminación de origen puntual y difusa para cada Subcuenca. Y se pueden definir con mayor fundamento técnico las acciones de control y de reducción de la contaminación necesarias para mejorar la calidad del agua, identificando los principales aportantes en términos de carga másica (por ejemplo, de kilogramos por día de materia orgánica) para cada una de las Subcuencas.
Este estudio, además, permite evaluar cómo van sumándose los aportes de contaminantes a lo largo del recorrido de las distintas Subcuencas y su influencia en la calidad del agua del curso principal del Matanza Riachuelo.
.

0 comentarios:

Blog Archive

Temas

Archivo de Blogs